Parkinson, el mal que también ataca a los jóvenes

Durante muchos años se relacionó al Parkinson con la vejez, sin embargo, la incidencia en personas menores a 40 años alta; aunque aún no hay una cura, existen dos tipos de tratamiento que apuestan con mejorar la calidad de vida de quien la padece.

El Parkinson es una enfermedad que durante mucho tiempo fue relacionada con la vejez, sin embargo, la incidencia en personas menores a 40 años es muy alta debido a una pérdida de dopamina a nivel cerebral.

Es la segunda enfermedad neurogenerativa más frecuente en el mundo después del Alzheimer y aunque en México no se tiene un dato preciso del número de personas que son afectadas por este padecimiento, la Secretaría de salud estima que cerca de 250 mil mexicanos viven con Parkinson.

En entrevista con Notimex, el marco del Día Mundial del Parkinson que se conmemora el 11 de abril. El neurólogo Daniel Martínez Ramírez, comentó que “en el caso particular de las células cerebrales que producen dopamina, se van perdiendo con la presencia del Parkinson y se produce síntomas motores como rigidez y lentitud del movimiento”.

Los principales síntomas son, insomnio, estreñimiento, disminución del olfato, ansiedad, depresión, fatiga, temblores en manos, brazos y piernas, movimientos lentos en piernas y brazos, rigidez muscular sobretodo en la zona de la mandíbula.

Aunque actualmente no existe una cura para esta enfermedad, existen dos tipos de tratamiento que pueden mejorar la calidad de vida de quien la padece. Uno de ellos es mediante la toma de medicamentos llamados ‘agonistas dopaminérgicos’, los cuales ayudan a compensar la escasez de dopamina cerebral.

La segunda opción es quirúrgica, donde se conecta un electrodo cerca del tálamo que funge como ‘estimulador’ al descargar pequeños impulsos eléctricos, lo que controla alguno síntomas más no cura el Parkinson. Sin embargo esta cirugía, es un poco costosa.

En caso de presentar estos síntomas, es necesario que acudas a un centro de salud pues aunque aún no se ha encontrado una cura para esta enfermedad, sí existen algunos tratamientos que pueden mejorar la calidad de vida de quienes la padecen.

Te puede interesar