La comedia de Tykwer

El burnout laboral, el lidiar con la hipoteca, el divorcio, la mensualidad automotriz, son solo algunos de los problemas con los que carga Alan Clay, cuando tiene que irse de viaje de trabajo hasta Arabia Saudita.

Esta es la premisa de “Un holograma para el rey”, una cinta de comedia que toma las particularidades del día a día de un ejecutivo que bien pudiera ser estadounidense, mexicano o de cualquier latitud capitalista del globo.

Tom Tykwer –conocido por películas como “Corre Lola Corre” (1998), “El Perfume: Historia de un asesino” (2006), “Cloud Atlas (2012), entre otras– tomó el libro homónimo de David Eggers, para llevarlo al cine junto a Tom Hanks en el papel de Clay.

El resultado es un viaje de introspección lleno de hilaridad, que además cuestiona en las generaciones actuales el ritmo de vida acelerado y exacerbado que nos demanda la sociedad consumista occidental.

El realizador alemán comentó en videoconferencia desde su país natal, que el hacer en sí la película fue un viaje increíble, ya que la mayoría de la producción se tuvo que hacer en Marruecos, simulando que es Arabia Saudita, ya que la nación musulmana tiene una contraposición cultural interesante.

“Todo lo que fue ese viaje fue sorprendente, no era lo que esperaba (…) no era hacer una película de su sistema, claro, el sistema tiene muchos detalles,  pero ¿qué sistema no tiene problemas?

 “Aunque si se mencionan las problemáticas que tienen ellos, como la manera de tratar a las mujeres y todos los problemas del país son mencionados, pero hasta que estás ahí te das cuenta que la gente que vive ahí tiene la mente abierta a nuevas ideas (Sic.)”, comentó Tykwer a la prensa mexicana.

Entre la ficción y la realidad

A pesar que la cinta se basa en una novela, Tykwer se topó con vivencias personales al estar ya en Medio Oriente que enriquecieron la producción, ya que hasta no estar en las locaciones sabían si iban a poder filmar o no debido a las condiciones gubernamentales del lugar.

En la ficción, todo ocurre en Arabia Saudita, por lo que se intentó filmar lo más posible ahí, sin embargo Marruecos fue donde mejor se acopló el equipo de realización.

“Hay un personaje muy gracioso en la cinta llamado Yousef, pero él es una persona real, se llama Mamdouh y él me llevaba a todos los lugares, me llevó a la casa de su abuelo y por error a La Meca.

“¡Yo ni siquiera sabía que podía estar ahí!, entonces la película se inspiró mucho también en mis experiencias personales”, narra el cineasta, pues parte de estas vivencias, las transcurre también el personaje de Clay (Hanks) en el filme.

‘Sense 8’ fue una prueba para mi’

Tykwer al hablar de su experiencia de colaborar con las hermanas Wachowski para la primera temporada de la serie “Sense 8”, comentó que fue como un laboratorio audiovisual.

“Hacer ‘Sense 8’ fue como una prueba para mí, veía todas las circunstancias de filmación que funcionaban para mí, porque producir para televisión es distinto (…) la televisión es el futuro para muchos cineastas pero no para mí”, puntualizó.