El Big data en manos de la ciencia y la calidad del aire
El gobierno capitalino le entregará a los científicos e investigadores respaldados por el Conacyt los datos que obtenga de la ciudadanía con el fin de desarrollar políticas públicas en favor su bienestar
Fernanda MuñozCada político que es votado para representar a la Ciudad de México asegura que buscará los mejores métodos para el bien de la sociedad. En la administración capitalina actual, se encontró una solución para uno de los temas que han sido tratados desde años anteriores, pero sin resultados óptimos, la calidad del aire.
A dos meses de que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, declaró que el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) será el único instituto que lo asesorará en términos científicos y tecnológicos, Claudia Sheinbaum, jefa de gobierno de la Ciudad de México y con quien el Ejecutivo comparte partido político, confirmó el apoyo hacia este organismo al firmar un convenio en conjunto.
El gobierno capitalino acordó con el instituto la entrega de todos los datos que registre de la ciudadanía, no sólo en materia de medio ambiente, sino administrativa, con el fin de que los científicos e investigadores respaldados por el Conacyt, junto a funcionarios, creen políticas públicas que solucionen los problemas que las personas enfrentan, como la calidad del aire, entre otros asuntos.
María Elena Álvarez-Buylla Roces, directora general del Conacyt, enfatizó a la prensa, en el Patio del Antiguo Palacio del Ayuntamiento, que esta decisión se tomó luego de que se percataron que fue gracias a la mala toma de decisiones de los gobiernos anteriores que la calidad del aire se deterioró.
El vacío político que existía ocasionó muchas pérdidas naturales. Afortunadamente, una nueva política de gobierno está ayudando a revertir estos procesos destructivos (…) Mientras que la corrupción estaba afectado claramente a nuestro bienestar, la producción científico-tecnológica sólo respondía a criterios económicos, ajena a los problemas cotidianos de los ciudadanos
La postura de la también Premio Nacional de Ciencias 2017 se dio luego de que el organismo que dirige señaló que el Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCyT), el cual asesoraba al Ejecutivo, presuntamente no administraba de manera adecuada los recursos económicos que por parte del gobierno se les entregaba.
Atentos al bienestar y la calidad del aire
Con la Firma de Convenio de Colaboración Conacyt-Gobierno de la Ciudad de México en Materia de Ciencias de Datos y Calidad del Aire, tanto la sociedad como los científicos e investigadores respaldados por el órgano institucional estarán en una situación de ganar-ganar, de acuerdo con José Nerín, titular de la Agencia Digital de Innovación Pública de la CDMX.
En conferencia de prensa, Nerín explicó que con la aplicación de este convenio, los científicos participantes no sólo le ayudarán al gobierno a crear políticas públicas en favor de los capitalinos, sino que con el uso de los millones de datos que tienen registrados, los investigadores podrán realizar estudios particulares a su favor y, de igual manera, que ayuden a la sociedad.
“El esquema básico de este proyecto es que la Ciudad de México creará un catálogo de los datos registrados, y que creemos útiles, para que, con ayuda de los científicos del Conacyt respondamos a las necesidades sociales”, detalló Nerín.
300 mil
De acuerdo con el titular de la Agencia Digital de Innovación Pública de la CDMX, la creación de este convenio surgió por parte del órgano institucional, pues habían creado una nueva área de inteligencia de Datos. Hasta el momento, mencionó, el campo con el que más tiene avances en la creación de políticas públicas es en la calidad del aire.
Marina Robles García, secretaria del Medio Ambiente de la Ciudad de México, asumió que gracias al fortalecimiento que protagonizarán la Ciencia y el gobierno tras la firma de este convenio, es que se podrá informar a la gente de la mejor manera en términos ecológicos.
“Sólo en materia de calidad del aire, diariamente generamos al rededor de 300 mil datos, los cuales, aunque la Secretaría de Medio Ambiente los maneja minuto a minuto, con la ayuda de los científicos se ejemplificará mejor”, confesó.
María Elena Álvarez-Buylla Roces, especificó que en colaboración con expertos en tecnologías inteligentes, han planteado las primeras propuestas para generar un modelo estadístico sólido para que se puedan pronosticar los niveles de ozono y de partículas suspendidas de diferentes dimensiones.
“Estos modelos constituyen una herramienta útil para las autoridades regulatorias y la toma de decisiones”, agregó.
La directora del Conacyt puntualizó que el modelo que utilizan puede pronosticar en 10 minutos cómo se da la calidad del aire con 24 horas de anticipación, con una precisión deseable y mejor de la que se ha reportado en otros modelos a nivel mundial.
Esto es lo mínimo que podemos darle a la sociedad, un trabajo en equipo que favorezca su bienestar