El boom de la ciberliteratura
El internet y las plataformas digitales han obligado a las diferentes artes a renovarse y la literatura no escapa a este fenómeno, en donde a pesar de que no se han creado grandes obras, se ha logrado romper con los formatos tradicionales y alcanzar a un nuevo público
Azaneth CruzComo una expresión artística o de vanguardia, la ciberliteratura es un término acuñado en la modernidad que está siendo utilizado para hacer referencia a la creación literaria realizada para un entorno virtual, la cual, puede o no acompañarse de sonidos, videos e imágenes.
El fenómeno de esta nueva narrativa que comprende un conjunto de manifestaciones, constituye una nueva manera de entender lo literario a partir de las posibilidades tecnológicas abiertas por el desarrollo del entorno digital.
Lo que es considerado por algunos como un arma contra el intelecto por oponerse al concepto tradicional, representa para otros, una forma creativa de innovar y tener un contacto más personal con su audiencia.
“No considero que la ciberliteratura sea una moda o un género, es más bien una nueva forma de expresión narrativa que lleva consigo nuevas prácticas capaces de transmitirse a otros géneros literarios”
Designada a aquellas obras literarias concebidas específicamente para el formato digital, la ciberliteratura es aquella creación en internet que no puede existir fuera de él, sin embargo, el debate entre personas de este ámbito radica en qué formatos parten de él y cuáles ‘no’.
“La ciberliteratura es el conjunto de obras literarias que demandan un soporte alternativo, no tradicional o poco convencional. Se trata de expresiones literarias que sustituyen o complementan la palabra —naturaleza intrínseca de toda literatura— en aras de la experimentación visual, auditiva o cinética, todo a partir del uso de herramientas computacionales o digitales.
La “Literatura 2.0” es una variedad de ésta cuyo distintivo radica en el soporte: la World Wide Web y las posibilidades expresivas que en ésta se generan”, expresa Hiram Barrios, escritor, traductor y catedrático.
Para que esta nueva forma de narrativa sea aceptada como tal, es importante que no se confunda con pasar un texto a formato PDF, la ciberliteratura, debe contar con una serie de elementos que la puedan definir como tal.
La ciberliteratura aún no ha dado obras importantes, ni ha logrado romper paradigmas. Sus alcances aún están por descubrirse
“Utilizar un nuevo medio de expresión debería cuestionar los protocolos de lectura y promover un acercamiento distinto a la apreciación, y, eventualmente, al consumo de una obra artística… Si partimos del hecho de que se trata de obras expuestas en soportes no convencionales, lo imprescindible sería centrarse en el soporte mismo”, comenta Barrios, autor de los libros de ensayo ‘El monstruo y otras mariposas’.
Para Chimal, escritor de ‘Los esclavos’, es posible que la línea que une a la literatura tradicional y a la ciberliteratura, se pueda difuminar.
El papel del lector en la cultura digital
Al no formar parte de la literatura tradicional, la ciberliteratura se convierte entonces en un reto, donde de acuerdo con el catedrático Hiram Barrios, el lector debe decodificar un mensaje que puede estar cifrado, encriptado o deliberadamente intrincado, pues este, se convierte en el sujeto activo de la nueva narrativa.
Con alcances que aún están por descubrirse, Barrios describe que el camino de la literatura en internet puede ser muy variado.
“El internet ha abierto muchas puertas a los creadores y más aún a los lectores. Las páginas de fanfiction, los blogs de autor, los libros digitales o los ‘microblogging’ auguran nuevas formar de asir el fenómeno literario”
En particular, me parece que la llamada “tuiteratura” es un campo aún inexplorado y cuyos alcances comienzan a estudiarse en la academia, como sucede en la tesis doctoral de Paulo Gatica Cote, ‘La brevedad inconmensurable: el aforismo en la época de la retuiteabilidad’ (Universidad de Salamanca, 2017), primera en investigar y justipreciar esta tendencia de la que aún hay mucho por decir”, expone el catedrático mexicano.
Sin embargo y a pesar del camino inexplorado, Barrios expone que el recorrido de está corriente puede ser un poco desoladora, ya que no ve innovación ni rupturas significativas en los escritores de la web, por lo menos no en aquéllos que hacen de las herramientas digitales un credo.
“No por utilizar aplicaciones o programas especializados se alcanza el arte. La obra artística exige inteligencia y sensibilidad, en cualquier medio o soporte que la cobije. La computadora debe ser un medio, pero se ha convertido en un fin”, dice.
Internet, la nueva forma de abordar la literatura
A pesar de que las herramientas de la web no han logrado catapultar a la literatura, es gracias al internet que existen diversas instrumentos que han fomentado la lectura.
“Es innegable que el internet ha servido para acercar los textos a los lectores, hoy en día es muy sencillo hallar libros en la red. Esta democratización de los productos culturales ha beneficiado la difusión del arte y de la literatura y es una de las virtudes que debemos celebrar”, explica Hiram Barrios.
Para el escritor la ciberliteratura puede fungir como el arte conceptual y sus derivados, sin descartar, que dentro de ella se encuentren farsantes y ‘pseudoartistas’ que se rigen por la ley del mínimo esfuerzo.
En los tiempos actuales si no se combina lo que se hace con elementos multimedia en la red es muy difícil que tenga un buen enganche
“Es difícil hallar una propuesta legítima en ese mar de imposturas. Las hay, y gracias a ellas se sigue explorando en los medios digitales. El asunto es por demás espinoso y requiere un debate amplio que permita considerar todas las aristas. Por mi parte, considero que la ciberliteratura aún no ha dado obras importantes, ni ha logrado romper paradigmas. Sus alcances aún están por descubrirse”, comenta.
Booktube una comunidad de jóvenes
En el mundo de You Tube, no sólo hay espacio para la música, los gamer’s y los tutoriales de cómo hacer algo en casa; también para los lectores.
Aunque aún no alcanzan los millones de seguidores, los ‘booktubers’ de México han tenido un crecimiento mantenido durante los últimos años, ellos, dedican su video a compartir información sobre un libro, su experiencia y su crítica para quienes tengan ganas de leer algo, pero sin saber qué.
El fenómeno de la comunidad ‘booktube’, conformado principalmente por jóvenes de la generación ‘millennial’, es un movimiento reciente que logró tomar por sorpresa a muchas editoriales, quienes comenzaron a acercarse a estos ‘influencers’ de la literatura para promocionar una obra.
Una de las empresas que se acercó a estos jóvenes es el Fondo de Cultura Económica (FCE), editorial que lanzó una convocatoria a personas de 9 a 19 años invitándolos a elegir un libro determinado por su edad y grabar un video en el que compartan comentarios sobre su lectura con la intención de fomentar la literatura entre jóvenes. Los ganadores, determinados por el jurado, obtendrían una mención honorífica.
La llamada “tuiteratura” es un campo aún inexplorado y cuyos alcances comienzan a estudiarse en la academia
“La ciberliteratura es un avance bastante útil para la literatura, y aunque no soy fan de las ‘app’, si de los blogs, donde las personas emiten su crítica y sus comentarios sobre un libro determinado”, explica Andrés Mendoza, booktuber mexicano.
Para Andrés, en tiempos actuales si no se combina lo que se hace con elementos multimedia en la red es muy difícil que tenga un buen enganche, pues los retos del internet implican buscar nuevos temas y contenidos que sean atractivos para el espectador.
“No creo que la ciberliteratura tenga un grupo segmentado y aunque yo prefiero los libros en físico por lo que implica la experiencia, en términos ecológicos estaría muy bien que todos los libros se hicieran electrónicos”, cuenta Mendoza.