Ayuda para comedores compulsivos

Existen personas que buscan combatir la ansiedad por medio de la comida, ya que ésta provee sensaciones de tranquilidad, satisfacción y bienestar; sin embargo, después se sienten culpables y se eleva su frustración. Expertos explican cómo enfrentar el problema

“Hola, soy Ana y soy comedora compulsiva. Recuerdo haber estado comiendo, saber que ya no tenía ganas, ni antojo, ni hambre y me caché abriendo un pastelito, metiéndomelo a la boca y sentir asco, pero a pesar de eso, quererlo comer”, así relata la experiencia que la llevó a formar parte del grupo de Comedores Compulsivos Anónimos (CCA).

Comer compulsivamente es un trastorno de la conducta alimentaria, generalmente producido por una mezcla de ansiedad y un trastorno de personalidad que hace que se maneje a través del exceso de comer.

Estudios reportan que entre 16 y 51 por ciento de los pacientes con sobrepeso y obesidad que acuden a consulta, presentan trastorno por atracón, explica, para Reporte Índigo, Héctor Lara Tapia, académico de la Facultad de Psicología de la UNAM.

Los miembros de CCA se reúnen en la colonia Portales. Ahí, María, miembro del mismo, cuenta que son un grupo que trata de ayudarse unos a otros. “Aquí hablamos como un ente donde tratamos trastornos alimenticios, pero sobre todo el de la alimentación que se genera al acercarte a la comida y a la deformación que muchas veces tenemos de nosotros mismos”.

De acuerdo con María, el grupo antes era parte de Alcohólicos y Neuróticos Anónimos, pero surgió la necesidad de tener su propio espacio, por lo que decidieron separarse y ser uno individual. “Nos gusta vernos y sentirnos como una comunidad, en la que compartimos nuestra experiencia, fortaleza y esperanza para resolver un problema común y recuperarnos”

De acuerdo con Lara Tapia, algunas personas buscan combatir la ansiedad por medio de la comida, ya que ésta provee sensaciones momentáneas de tranquilidad, satisfacción y bienestar; sin embargo, después se sienten culpables y se eleva su frustración, lo que genera un círculo vicioso.

Las pistas

De acuerdo con CCA, algunas características de un comedor compulsivo son:

> Darse atracones de comida sin razón aparente

> Dedicar demasiado tiempo y atención a la comida

> Cuando el peso afecta la manera de vivir

> Planear con anticipación atracones secretos

> Sentir ansiedad al comer a una hora definida

> Haber recibido tratamiento médico por exceso de peso

> Comer para escapar de las preocupaciones o los problemas

> A pesar de la evidencia en su contra, continuar afirmando que puede hacer dieta cuando lo desee

> Alejarse de las personas que sugieren tener fuerza de voluntad para dejar de comer excesivamente

> Comer con medida delante de otros y luego compensarlo a solas

> Anticipar con placer y expectación los momentos en que se puede estar solo para comer

Mente y cuerpo

Cecilia Silvia Gutiérrez, académica de la Facultad de Psicología de la UNAM, explica que los comedores compulsivos tienen sobrepeso, por lo que los cambios físicos que presentan son muy similares a los de cualquier persona con obesidad.

“Los cambios más comunes se notan en las alteraciones de su nivel de presión arterial, pueden generar diabetes o, por ejemplo, dañar el sistema digestivo, ya que al comer en grandes cantidades, en poco tiempo, no se le permite al sistema metabolizar bien los alimentos ni digerirlos de manera adecuada”, asegura Silvia Gutiérrez.

También señala que cuando un comedor compulsivo no presenta sobrepeso puede ser por dos motivos: que esté en las primeras etapas y por lo tanto no haya una ganancia de peso evidente o patológica y, segundo, que presente alguna conducta compensatoria como llevar a cabo ejercicio en exceso o incluso vomitar, empezando así a desarrollar un trastorno de corte bulímico.

Ana y María dicen que los únicos requisitos para ser miembro de CCA es el deseo de dejar de comer compulsivamente y querer un cambio en su manera de vivir, ya que no hay exigencia de cuotas porque el grupo se mantiene con sus propias cooperaciones voluntarias. Además, CCA no está afiliado a ninguna secta, religión o partido político.

“A mí me dijeron del programa y recuerdo que se me hizo una idea muy loca venir, sentí que era lo más bajo que podía hacer, pero ya necesitaba ayuda. En los grados de obesidad que estaba, no podía agacharme a amarrarme las agujetas, subir escaleras era como correr un maratón, y poder cruzar la pierna era un reto”
AnaMiembro de CCA

 

Sin apartar la mirada de sus uñas color rosa, Ana relata que haber llegado al grupo la ayudó a descubrir que la comida sólo es la punta del iceberg, ya que entendió que ese acto cubre las emociones, es como querer resolver todo con la comida, desde el enojo hasta la alegría.

En el grupo se trabaja con el programa de 12 pasos y 12 tradiciones, similar al que existe en AA, sólo que, de acuerdo con los miembros, mientras los primeros tapan la botella, en CCA se habla de cómo manejar los alimentos

Ana señala que ha notado avances desde que es miembro del grupo. “Hoy puedo correr cuando antes no podía hacerlo. Hoy sé que hay esperanza, sé que si me acerco al programa y trato de llevarlo, no hay manera que los resultados sean malos”.

El grupo, que empezó con 15 miembros y que actualmente está conformado por 60, trabaja con sus integrantes sin medirlos, sin hacer uso de básculas y sin dietas. En las juntas de hora y media que se realizan de lunes a domingo, los integrantes hablan sobre cómo han resuelto sus problemas con base en los 12 pasos, dan consejos e incluso trabajan con literatura aprobada por CCA.

“Mucha gente no sabe qué hay detrás de nosotros, a veces nos señalan y dicen ‘está gordo’, pero no notan que nuestro problema se trata de emociones, por eso sabemos lo importante que es estar de la mano”, indica Marisol.

El comer compulsivamente es un problema de salud pública que se ha incrementado en los últimos años, por ello, los expertos opinan que es importante que quienes lo padezcan encuentren la forma de luchar con la ansiedad que viven en su entorno.

De acuerdo con Lara Tapia, una manera de tratar el comer compulsivamente desde el ámbito psicológico, además de las terapias, es trabajar con técnicas de modificación de conductas en donde se enseña a la persona, primero, a relajarse para después identificar que patrones facilitan y desatan dicha conducta.

Además, la académica afirma que si bien es un inicio asistir a programas como CCA, las personas deben apoyarse en programas especializados, ya que no sólo es un problema de salud mental, sino también físico, ya que tiene que ver con su nutrición.

“Existe el tratamiento de conductas adictivas, en la Secretaría de Salud se han trabajado programas desde la prevención de trastornos alimenticios hasta el tratamiento asistencial. Si bien no hay un programa dedicado exclusivamente a trastornos alimenticios, encontrarán ayuda en aquellos que están dirigidos al combate de las adicciones porque al fin y al cabo estamos luchando contra la adicción a la comida”, explica la experta.

“Hoy sé que hay esperanza, sé que si me acerco al programa y trato de llevarlo, no hay manera que los resultados sean malos”
AnaMiembro de CCA

Los nombres de los miembros de CCA fueron cambiados por petición de ellos.