Arquímedes Puccio sabía que ya no había salida. Empezó haciendo el trabajo sucio para la dictadura de Argentina en los años 80’s. Al terminarse, continuó secuestro tras secuestro y luego comenzó a asesinar. Los elegidos eran conocidos y personas de familia con poder.
Arquímedes involucró a su familia. No lo pensó. A 31 años de su caída, todos siguen pagando su propia condena.
El retrato del director Pablo Trapero en la película-documental “El Clan” es la imagen real del caso policial de los “Puccio”, quien tras parecer una familia normal, eran cómplices de uno de los más viles crímenes en la ciudad de Barracas, Argentina.
Las secuelas quedaron aun después de la dictadura y aún después de su caída en 1985.
Los hermanos Alejandro y Maguila Puccio quedarían al descubierto con su padre al ser revelado el ‘clan’ por la familia de su cuarta víctima. Alejandro, el famoso jugador de rugby de Argentina en esa época vendría a poner el ingrediente de morbo del escándalo a nivel mundial.
Eran 10 los nombres anotados en su lista, les faltó cuidado, todo quedó al descubierto al ser investigados por las autoridades de ese país. Se les acusaba por un crimen, podrían al menos haber librado unos años, pero un detalle al aire los dejó completamente expuestos.
Muchas personas en Argentina se preguntan qué habría sido si no los hubieran descubierto y, sobre todo, cuántos más fueron víctimas de los residuos de una dictadura que no tuvo piedad.
Basada en hechos reales, el filme “El Clan” es una obra que seguro te dejará el fin de semana con las ganas de conocer más sobre este caso que estremeció Argentina.
Lo mejor es que podrás encontrarlo en las diferentes plataformas digitales y sin largas filas.
