Ponen ‘play’ al terror
El periodista James Foley, de 40 años, apareció frente al mundo tras estar casi dos años secuestrado, sólo para expresar que moría deseando “no ser estadounidense”.
Foley se desempeñaba como reportero independiente para GlobalPost y AFP cuando lo secuestraron en Siria.
“Pocas semanas después de su desaparición, en 2012, los familiares y amigos de James habían iniciado una campaña para pedir su liberación”, informó ayer BBC Mundo.
Andrea B. Assunto500
"Hemos estado diciendo por mucho tiempo que hay un número significante de británicos operando con organizaciones extremistas"
"Es cierto, el asesinato de James Foley es impactante y depravado. Hoy me reuniré para tratar la situación Iraq/Siria"
"El asesinato barbárico del periodista James Foley... enferma a cualquier persona decente"
"Nunca hemos estado más orgullosos de nuestro hijo Jim. Dió su vida tratando de exponer al mundo los sufrimientos sirios"
El periodista James Foley, de 40 años, apareció frente al mundo tras estar casi dos años secuestrado, sólo para expresar que moría deseando “no ser estadounidense”.
Foley se desempeñaba como reportero independiente para GlobalPost y AFP cuando lo secuestraron en Siria.
“Pocas semanas después de su desaparición, en 2012, los familiares y amigos de James habían iniciado una campaña para pedir su liberación”, informó ayer BBC Mundo.
Sin embargo, esta nunca llegó a concretarse debido a los ataques aéreos a Iraq, autorizados por el presidente Barack Obama el pasado 7 de agosto.
El martes inició a circular en Internet un video que rezaba “Un mensaje a América (EU)” en el que se observa el momento de la ejecución de Foley, como consecuencia de las acciones estadounidenses.
“Hoy, su fuerza aérea militar nos ha atacado diariamente en Iraq. Sus ataques han causado muertes entre los musulmanes”, dice el verdugo, quien presuntamente es británico y pertenece al grupo ISIS.
“Cualquier intento tuyo, Obama, de negar a los musulmanes su derecho de vivir con seguridad bajo el califato islámico resultará en un baño de sangre de tu gente”, añade.
De sospecha a terror
Aunque al principio se dudó de la autenticidad del video, ayer Caitlin Hayden, vocera del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, explicó que “la comunidad de inteligencia del país analizó el video en que aparecen los ciudadanos estadounidenses Foley y su colega Steven Sotloff y determinó que es auténtico”, reportó BBC Mundo.
Sotloff también había desaparecido cuando realizaba su trabajo como fotoperiodista, y según el video podría ser la próxima víctima.
“La vida de este ciudadano estadoundiense, Obama, depende de tu próxima decisión”, afirma el encapuchado que momentos antes había asesinado a Foley.
Estas declaraciones no solo pusieron en alerta a la Casa Blanca, pues usuarios de redes sociales estallaron indignados e incluso crearon una campaña bajo el hashtag #IsisMediaBlackout para silenciar las transmisión del Estado Islámico.
Para el periodista estadounidense Jon Lee Anderson “ya no existe duda que el Internet, con su poder de contagio y su utilidad para reclutar, se ha convertido en la herramienta particular preferida de los terroristas”.
Por ello, y a pesar de la campaña y de que redes sociales como Twitter y YouTube intentaron bloquear el video e imágenes sobre la ejecución, estas continúan circulando la Red.
”Hemos estado y estamos suspendiendo activamente cuentas que descubrimos relacionadas con estas imágenes explícitas. Gracias”, tuiteó Dick Costolo, director ejecutivo de Twitter.
Incluso, la Policía Metropolitana en el Reino Unido declaró que “ver, descargar o difundir el video… puede ser tratado como una ofensiva criminal”, informó The Independent.
La ofensiva surgió después de que se realizaran afirmaciones sobre la procedencia británica del asesino de Foley.
“Estamos absolutamente conscientes de que hay un número significativo de ciudadanos británicos implicados en crímenes terribles”, agregó. Según The New York Times la cifra gira alrededor de los 500 británicos.
De confirmarse, las acciones de Europa contra Iraq podrían hacerse más severas.
Además, el presidente Obama decidió pasar por alto las amenazas de ISIS de “drenarles las sangre” a sus ciudadanos y aseguró ayer en rueda de prensa que Estados Unidos continuará “confrontando a este odiado terrorismo para reemplazarlo con sentido de esperanza y civismo”.