Para cumplir con la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible, cada país necesita implementar un plan interno y, en América Latina, las naciones no han hecho lo suficiente. Foto: Especial

Países de Naciones Unidas están lejos de cumplir la Agenda 2030

A siete años de que se venza el plazo para alcanzar los objetivos de Desarrollo Sostenible, es poco probable que los miembros de la ONU cumplan las metas

A partir de este lunes, los 193 países miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) analizarán los avances de la Agenda 2030.

Será a través del Foro Político de Alto Nivel sobre Desarrollo Sostenible, que se llevará a cabo en Nueva York hasta el 12 de julio, que se discutirá el progreso de los 17 objetivos que integran la Agenda.

Dichos objetivos fueron planteados por todos los miembros de las Naciones Unidas en 2015 para que, de manera conjunta, se avance en temas como la erradicación de la pobreza, garantizar la educación inclusiva, construir infraestructuras resilientes y reducir la desigualdad.

También, se planteó luchar contra el cambio climático, conservar los océanos, los mares y los recursos marinos, lograr la igualdad de género, promover sociedades pacíficas e inclusivas, facilitar el acceso a la justicia, brindar mayores empleos, entre otros.

A siete años de que se venza el plazo para cumplir la Agenda 2030, el panorama no es nada favorable, por lo que difícilmente se van a ejecutar las metas, sobre todo debido a la pandemia por COVID-19 y a los conflictos bélicos entre Rusia y Ucrania, de acuerdo con la doctora Alba Gabriela Cabriada, internacionalista de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

“La educación, la desigualdad, la alimentación y los sistemas de salud se vieron rebasados dada la situación de la pandemia, la cual desvió la atención que se le estaba brindado a otros temas.

“Sinceramente, y muy a mi pesar, creo que van a extender otros 15 años para cumplir los objetivos, porque realmente hay muy poca voluntad o seriedad en la tarea de cumplirlos (…) Parece que estamos jugando como humanidad, como comunidad internacional, al replantear cada determinado plazo estas metas. Creo que este año no va a haber un compromiso real salvo pronunciamientos de buena voluntad y de intención”, agrega la también docente de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Aragón.

Pandemia por COVID-19 retrasó cuatro años de progreso contra la pobreza

El año pasado, Naciones Unidas mostró a través del “Informe de los Objetivos de Desarrollo Sostenible” que debido a la crisis sanitaria más de cuatro años de progreso contra la pobreza fueron eliminados y la tasa de pobreza laboral aumentó por primera vez en dos décadas.

También, la pandemia por coronavirus, el cambio climático y las crecientes desigualdades, influyeron en el aumento de precios de alimentos en el 47 por ciento de los países; 31 por ciento más que en 2019.

En materia educativa, se informó que mientras la pandemia provocó que 147 millones de niños perdieran más de la mitad de las clases presenciales en el ciclo 2020-2021, se prevé que hasta 24 millones de alumnos, desde preescolar hasta universidad, nunca regresen a la escuela.

Aunque durante el Foro Político de Alto Nivel de este año se analizarán los 17 objetivos en general, se hará especial énfasis en el seis, siete, nueve, 11 y 17; sobre agua limpia y sustentable; energía limpia y no contaminante; industria, innovación e infraestructura; ciudades y comunidades sostenibles; y alianzas para lograr los objetivos.

En materia de agua limpia y sustentable, en el “Informe de los objetivos de Desarrollo Sostenible” se especifica que para cumplir con las metas de agua potable, saneamiento e higiene para 2030, se requiere incrementar x4 el ritmo de progreso.

Si no se aceleran las acciones, en siete años 1,600 millones de personas no contarán con agua potable, 2,800 millones no tendrán saneamiento gestionado de manera segura y 1,900 no dispondrán de instalaciones básicas para lavarse las manos.

Sin avances en energía limpia, industria y ciudades humanitarias

Sobre el objetivo siete de energía limpia y no contaminante, aunque el año pasado se reconoció que menos personas viven sin energía eléctrica a diferencia de 2010, 2,400 millones de personas siguen usando sistemas de cocina ineficientes y contaminantes. Además, la proporción de fuentes renovables en el consumo total de energía sólo es del 17.7 por ciento.

La meta nueve sobre industria, innovación e infraestructura también se encuentra por debajo del cumplimiento al tomar en cuenta que las pequeñas industrias no tienen acceso a apoyo financiero para recuperarse de la crisis sanitaria. Sólo uno de cada tres pequeños fabricantes se beneficia de un préstamo o línea de crédito.

La industria aérea, por ejemplo, sigue luchando por recuperar las pérdidas durante la pandemia. Mientras que en 2019 se registraron 4,500 millones de pasajeros, en 2021, 2,300 millones.

El objetivo 11 sobre ciudades y asentamientos humanos, inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles, también es algo poco probable de cumplirse, considerando que en la actualidad hay hasta mil millones de habitantes en barrios marginales.

Además, de acuerdo con las nuevas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 99 por ciento de la población urbana global respira aire contaminado y, según las Naciones Unidas, el crecimiento de ciudades aumenta los problemas de los residuos.

América Latina es parte del retraso en los objetivos de la Agenda 2030

Para cumplir con la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible, cada país necesita implementar un plan interno y, en América Latina, las naciones no han hecho lo suficiente para llegar a la meta.

“América Latina está aproximadamente a la mitad del cumplimiento de los objetivos, lo cual, por supuesto, implica un atraso inmenso. A este punto podemos decir que la región no alcanzará las metas de Desarrollo Sostenible que se plantearon.

“La Agenda 2030 simplemente no fue tomada en cuenta con la importancia, la urgencia y la relevancia que debería”, dice Arlene Ramírez Uresti, doctora en Relaciones Internacionales y docente de la Universidad Iberoamericana.

Desde su punto de vista, si en los últimos ocho años no se han cumplido los objetivos, no se logrará una sostenibilidad económica, social ni ambiental para 2030.

¿Cuál es el panorama regional en Desarrollo Sostenible?

Según datos de las Naciones Unidas, en la región 86 millones de personas aún viven en pobreza extrema, 92,8 millones sufren de inseguridad alimentaria grave, mientras que más de 21 mil mujeres han sido víctimas de feminicidio en los últimos cinco años.

En materia educativa, ningún país supera más del 50 por ciento en competencia mínima en matemáticas, mientras que en lectura el nivel más alto lo tiene Chile con el 59 por ciento.

En el caso específico de México, entre las acciones que retrasan al país para cumplir los objetivos de Naciones Unidas es que los municipios no pueden materializar proyectos “de gran envergadura” durante el corto tiempo de sus administraciones, de acuerdo con la “Guía para la elaboración de Planes Municipales de Desarrollo en el enfoque de la Agenda 2030”, publicado por el Gobierno federal.

“Aunado a ello, los recursos financieros de los que disponen son limitados pues su capacidad de recaudación es débil y su dependencia de las transferencias federales reduce su autonomía fiscal en el ejercicio y la disposición de los recursos”, se lee en el informe.

Ante ese panorama, Rubén Ramos Muñoz, internacionalista de la FES Aragón, UNAM, comparte que debido a que ha habido un cambio sustantivo en las nuevas generaciones no sólo a nivel educativo sino en su formación en general, ellas son quienes podrían dar un cambio a futuro para cumplir los objetivos de la Agenda 2030, pero mientras tanto sólo son parte de la concientización.

“Realmente quien está detrás de los grandes consumidores o los contaminantes, son las corporaciones multinacionales, los países más desarrollados, el esfuerzo que hagan hoy los jóvenes sólo puede ser en materia de concientización. Es benéfico que empiecen a interesarse por estos temas porque en generaciones pasadas quizás no nos importó mucho”, añade.