El resultado estuvo impulsado en gran parte por el encarecimiento de una gran cantidad de frutas y verduras, en donde destacó el incremento en el precio del chile serrano, en un 31.81 por ciento; el del tomate verde, en un 22.97 por ciento; y el de los chiles frescos, los cuales elevaron su precios un 18.39 por ciento, según Inegi. Foto: Especial

La señal inflacionaria que preocupa ante un incremento por encima de lo esperado

Ante un repunte en el Índice Nacional de Precios al Consumidor, existe el riesgo de reconsiderar, por completo, los escenarios previamente estimados por analistas e instituciones

Ante el repunte que ha venido registrando el Índice Nacional de Precios al Consumidor, se complica la misión de aliviar las presiones inflacionarias que aquejan a la economía mexicana, lo que tiene el potencial de modificar por completo el escenario establecido por analistas y autoridades.

En la primera quincena de este mes, el Índice Nacional de Precios al Consumidor registró un avance de 0.09 por ciento respecto al periodo anterior, lo que impulsó a la inflación general hasta 4.63 por ciento, de acuerdo con la última actualización elaborada por el Instituto Nacional de Estadística (Inegi).

El dato, que estuvo por encima de las previsiones de mercado, envió un mensaje de alerta ante la probabilidad de que las presiones inflacionarias repunten de forma álgida luego de más de un año a la baja, oscilando alrededor del cuatro por ciento.

“La inflación en México lleva seis meses con estancamiento o aceleración, nosotros estimamos que cerrará el año 4.25 por ciento, pero este pronóstico podría ser revisado al alza si la inflación de todo el mes de abril confirma el repunte observado en la primera quincena del mes”, destacó al respecto Gabriela Siller, directora de análisis económico en grupo financiero BASE.

Al respecto, el resultado estuvo impulsado en gran parte por el encarecimiento de una gran cantidad de frutas y verduras, en donde destacó el incremento en el precio del chile serrano, en un 31.81 por ciento; el del tomate verde, en un 22.97 por ciento; y el de los chiles frescos, los cuales elevaron su precios un 18.39 por ciento, según Inegi.

“Las cifras de hoy no fueron buenas, a pesar de que las estimaciones para los precios de los servicios estuvieron sujetas a mucha incertidumbre en la medida en que los efectos estacionales de semana santa se fueron desvaneciendo, el deterioro que observamos fue algo más generalizado, además, en contraste con lecturas pasadas, los incrementos de precios en el rubro de mercancías también excedieron lo anticipado”, alertó el equipo de análisis de Finamex.

De lo anterior que el dato del INPC para la primera quincena de abril haya resultado trascendental para analistas e instituciones, pues podría modificar, por completo, las previsiones de crecimiento e inflación estimadas para este año.

Los analistas esperan un impacto directo en la próxima decisión de política monetaria

Con la materialización de un mayores presiones inflacionarias, diversos analistas financieros coincidieron en que es muy probable que Banco de México (Banxico) reconsidere una hipotética decisión adicional respecto a la disminución de su tasa de referencia, cuestión que coincide con el hecho de que en la Encuesta Citibanamex de Expectativas más reciente se expuso que la herramienta de política monetaria establecida por el banco central nacional cerrará el año en 10 por ciento.

Mejoras más limitadas en inflación y otros retos llevarán a Banxico a una pausa en mayo, creemos que las condiciones están alineadas para que la junta de gobierno mantenga la tasa de referencia sin cambios en 11 por ciento en su reunión del nueve de mayo, de manera más relevante, consideramos que las mejoras en el panorama inflacionario no han sido suficientes para un ajuste adicional a la baja en este momento especialmente ante la persistencia al alza en los servicios dentro la subyacente”, puntualizó la dirección general adjunta de análisis económico y financiero de Banorte.

Aunado a lo anterior, se suma el hecho de que la propia institución encargada de procurar la estabilidad del poder adquisitivo del peso mexicano declaró que priorizaría en el monitoreo de la inflación antes de profundizar en una postura monetaria menos restrictiva.

“La Junta de Gobierno vigilará estrechamente las presiones inflacionarias, así como todos los factores que inciden en la trayectoria prevista para la inflación y en sus expectativas. En las siguientes reuniones, tomará sus decisiones en función de la información disponible. Tendrá en cuenta el progreso en el panorama inflacionario y los retos que aún prevalecen”, dejó en claro la junta de gobierno de Banxico en su última decisión de política monetaria.

Si se intensifica la inflación, se espera un menor crecimiento económico

Ante el impacto que podría generar el encarecimiento generalizado de bienes y servicios  dentro de la economía nacional, las previsiones en el avance económico del país continúan siendo menores respecto al resultado conseguido en 2023, sumando además, una probable reconsideración en el aspecto inflacionario de cara al futuro.

“Estimamos que la inflación interanual exhiba cierta desaceleración a lo largo del presente año, sin embargo, reconocemos que el panorama todavía es incierto y predominan los riesgos al alza; si bien la dilución de los choques de años pasados contribuirá cada vez menos al proceso de desinflación, la expectativa de un menor ritmo de crecimiento económico para este 2024 nos lleva a estimar que los precios se moderen algo más, no obstante, advertimos que el proceso no será lineal y es altamente probable que la inflación no baje del cuatro por ciento hasta 2025”, advirtió Alejandro Saldaña, economista en jefe de grupo financiero B×+.