¿En realidad la economía va mal?
Los empresarios y el gobierno viven una relación con sabores agridulces, mientras el presidente asegura que el panorama económico avanza, al sector privado no le terminan de convencer algunas medidas
Nayeli Meza OrozcoLa economía va a marchas forzadas. El gobierno mexicano mantiene el optimismo, aunque la cúpula empresarial prefiere mantener un positivismo moderado.
La ratificación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) puso a los empresarios contentos, debido a que se mandó un mensaje de certidumbre no solo a los inversionistas también a los socios comerciales, pero la caída en la generación de empleos les borró la sonrisa.
El último informe sobre la generación de empleos formales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) mostró una caída de 88 por ciento en mayo, en contraste con el mismo periodo de 2018.
88
El IMSS explicó que la creación de empleos durante mayo fue de 3 mil 983, resultado de la disminución de 36 mil 861 empleos eventuales y acompañados de la creación de 40 mil 664 empleos permanentes, comportamiento explicado, principalmente por efectos cíclicos.
José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), asegura que la desaceleración de la economía ha comenzado a afectar la vida de las familias mexicanas a través de menos oportunidades.
Ya no estamos en tiempos de hablar de política, debemos comenzar a hablar de crecimiento económico
De la Cruz asegura que uno de los indicadores que son un buen termómetro para saber como va la economía es el de la construcción, la cual se ha desacelerado.
Desencanto empresarial por la economía
A pesar de los esfuerzos por trabajar de manera conjunta, el sector empresarial mantiene una posición firme y clara sobre algunas de las medidas adoptadas por la Cuarta Transformación, como es el caso de la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) y la construcción de la refinería de Dos Bocas, en Tabasco cuyos pronósticos de éxito son bajos, según varios estudios realizados por organizaciones civiles.
La Coparmex realiza el Indicador Una Sola Economía cada trimestre con el objetivo de medir la tasa de crecimiento anual que pertenece al sector formal. Los datos del cuarto trimestre de 2018 muestran que la economía formal creció 1.3 por ciento a nivel nacional, cifra que significó un aumento muy ligero de 0.1 puntos porcentuales con respecto al año anterior.
1.3
A nivel estatal, Baja California Sur y Aguascalientes crecieron por arriba de 6 por ciento y se encuentran muy por encima de Sinaloa, el tercer estado que más creció durante este trimestre, 3.4 por ciento.
Mientras que Querétaro, Guanajuato y Quintana Roo han mantenido un promedio de expansión por encima de 3 por ciento durante los últimos cinco años.
Por el contrario, durante el cuarto trimestre del año pasado el indicador de la Coparmex reveló una desaceleración en la actividad económica formal de 10 estados: Tabasco; Tlaxcala; Morelos; Colima; Zacatecas; Michoacán; Chiapas; Estado de México; Campeche y Coahuila. Esto no había ocurrido desde 2009.
José Luis de la Cruz considera que en este momento existen diversos factores que influyen en la desaceleración económica, por ello es momento de tomar acciones a favor del crecimiento.
“Se requiere un programa de renovación económica que haga frente al gasto público, la caída de la inversión y a las fricciones que hay con Estados Unidos”.
