Dentro de la extensa galería de juegos indie hechos con el corazón, este título nos llamó la atención y ahora no podemos dejar de jugarlo
Hay dos elementos que caracterizan profundamente los juegos indies: la creatividad y la presentación, y muchas veces éstos no están necesariamente relacionados. Aunque hay muchos juegos que se puede considerar divertidos y bonitos, son mucho más los que son que tienen un gameplay original pero que se ve terrible o, como es el caso de Dogfight – A Sausage Bomber Story, es un titulo visualmente bonito pero poco original.
OTRA GUERRA MÁS
Desarrollado por Katsu Entertainment, este título nos pone al control de uno de cuatro pilotos de guerra que deberán cumplir las misiones asignadas por su general para detener la invasión del Imperio vecino. El chiste del juego son sus referencias a la comida y la propuesta en general no es más que ser un shooter tradicional en el que avanzas por el escenario elimiinando todo lo que se mueva, hasta llegar al final y enfrentar a un jefe poderoso. La diferencia aquí es que los niveles no están secuenciados, sino que uno puede seleccionar la misión que desees cumplir y podrás repetirlas cuantas veces quieras.
En este juego, quizá el detalle que primeramente llama la atención es el crecimiento gradual del nivel de dificultad, pues el juego aumenta el nivel de enemigos y la velocidad con la que estos atacan según tu desempeño. De esta forma, el juego aparentemente sencillo crece y aprende de tu habilidad. Tu desempeño varía no sólo por tu proeza, sino también por la forma en como combines las armas disponibles, las cuales se desbloquean conforme cumples misiones y obtienes una mejor calificación al final de cada una. De esta forma, antes de cada escenario puedes armar tu avión con dos tipos de armamento, una metralla base y un tipo de “hot dog”, o bomba.
BOMBAS BONITAS
El juego esta diseñado para que el jugador repita cada escenario una y otra vez hasta poder eliminar a todos los enemigos y el jefe sin perder vidas o recibir daño. Obviamente, esto va mejorando conforme se liberan más y mejores armas, y aprendes los patrones de movimiento de cada horda enemiga. Cada uno de los poco más de 20 escenarios califica tu desempeño por estrellas y de dominar cada uno de ellos dependerá obtener algunas de las mejores armas del juego.
Para os veteranos de los juegos de navecitas, el título me recuerda muchísimo la estructura que ofrecía el clásico U.N. Squadron, de Capcom, llegando al punto de acabar cn los jefes finales destruyendo sus cañones y cascos de uno en uno.
Gráficamente el título cuenta con un diseño de vehículos y personajes un tanto carismático, pero no nos ofrece nada verdaderamente nuevo, mientras que con respecto al audio y la banda sonora pues, la verdad Dogfight – A Sausage Bomber Story no ofrece nada verdaderamente innovador. A final de cuentas el juego no es más que una bonito pasatiempo que sería más interesante si fuera un poco más dificil, aunque los fanáticos del género sabrán apreciar su diseño y presentación.
Calificación 7.5
Dentro de la escena indie tenemos muchos juegos, muchísimos, que como éste acaban pasando desapercibidos, principalmente porque no parecen ofrecer mucho. Aun así, Dogfight – A Sausage Bomber Story nos trae un juego entretenido y retador que los fanáticos del género encontrarán increíblemente entretenido y con un diseño de producción más bonito que funcional. Como curiosidad menor vale la pena.
Dogfight – A Sausage Bomber Story es un juego desarrollado por Katsu Entertainment y distribuido por Hound Picked Games para PayStation 4 PlayStation 5, Xbox Series X/S, Xbox ONE, Nintendo Switch y PC. Para esta reseña se jugó la versión para Nintendo Switch, la cual fue proporcionada por el distribuidor.
