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La tensión por los resultados y el funcionamiento del equipo no es el único padecimiento que se vive en el Monterrey. Ahora, los aficionados que asistan a los entrenamientos del equipo serán bien vigilados, hasta por elementos de la Fuerza Civil.
Luego de que hace una semana un grupo de seguidores reclamara actitud a futbolistas albiazules, al grado de llevarles una tapa de huevos en protesta, los martes de afición en El Barrial serán diferentes.
Ayer un grupo de 10 elementos de seguridad privada fueron acompañados por policías de la corporación Fuerza Civil, que aunque se denominan como un grupo creado para “proteger la tranquilidad de las familias”, esta vez dieron un rondín para mantener la paz contra los jugadores.
Los elementos de la fuerza estatal entraron al complejo deportivo para cerciorarse que todo estuviera en orden con los hinchas que tomaron lugar en las gradas ubicadas junto a la Cancha 1, donde entrena el primer equipo. Luego de estar unos minutos se retiraron del lugar sin mayor problema.
Esto, después de que los miembros de seguridad interna del lugar, dispersos desde la entrada y por todo El Barrial, revisaran minuciosamente los objetos y pertenencias de cada una de las personas que llegaron a observar el trabajo del Monterrey.
Tal parece que los reclamos y hasta los huevos que llevaron los aficionados de La Pandilla hace una semana hasta el mismo lugar, obligó al club regio a tomar mayores medidas de seguridad para sus jugadores, pues viendo que el ambiente es tenso y de mucho cuidado, es importante para ellos evitar que una vez más se salga de control.
Los Rayados se ubican en este momento en el sitio 11 de la Tabla General del Torneo Clausura 2013 con solo siete puntos sumados.
Y se preparan para medirse el próximo sábado en actividad de la Jornada 7 contra el Atlas en Guadalajara. Un partido que no luce nada sencillo para los pupilos de Víctor Manuel Vucetich, considerando el nivel que han tomado los Zorros con Tomás Boy como técnico en este 2013.
