En 2017, los Bills de Buffalo cortaron su racha de 17 temporadas sin clasificar a Playoffs, aunque se fueron rápido y al año siguiente, en 2018, se quedaron fuera de nueva cuenta, con récord negativo y un quarterback novato que dejó a medias su presentación en la NFL por una lesión.
El equipo no supo aprovechar que cuentan con una defensiva de lujo, especialmente contra el pase, rubro en el que ocuparon el primer lugar de la liga y fueron los segundos mejores de la NFL en general.
Ahora, Josh Allen regresa para tomar su segundo aire y demostrar por qué formó parte de una generación interesante que llegó en el Draft de la temporada anterior. Los Bills basaron su juego en el ataque por tierra, y para esta ocasión llega el veterano Frank Gore para apoyar a LeSean McCoy, además de tener a TJ Yeldon.
Sin embargo, quien llama la atención es el novato Devin Singletary, a quien le llaman el ‘Motor’, por sus 4 mil yardas en tres temporadas en el colegial, él irá tomando poco a poco el lugar de honor, aunque si la legión veterana falla, él estará listo para cargar con la responsabilidad.
Aunque luce complicado que Buffalo regrese a la Postemporada, el equipo tiene el talento de buscar por lo menos más ganados que perdidos, pues desplazar a los Patriotas de Nueva Inglaterra de la cima de su división está difícil.
