Apenas en febrero pasado uno fue el campeón de la NFL y el otro estuvo cerca de disputar el Super Bowl, pero la realidad de esta temporada para las Águilas de Filadelfia y los Jaguares de Jacksonville ha sido diferente y son dos de las mayores decepciones, con récords perdedores y lejos de pensar en clasificar a Playoffs.
Con 19 lesionados, varios de ellos de su zona defensiva, el panorama para Filadelfia estaba complicado en que se repitiera el escenario del año pasado, pero los malos resultados también han sido consecuencia de la inoperancia ofensiva y la gran diferencia del Carson Wentz de 2017 al de esta campaña.
Tan solo en el juego de la Semana 11, las Águilas vivieron una pesadilla al caer 48-7 ante la maquinaria ofensiva de los Santos de Nueva Orleans y su líder Drew Brees. Pero en este juego Wentz también fue un desastre, con apenas 156 yardas, tres intercepciones y tres capturas, mientras que por tierra fue que llegó el touchdown.
La ventaja para Filadelfia es que la división Este de la Nacional es de las de menor nivel, por lo que el líder que son los Pieles Rojas de Washington apenas le sacan dos juegos de ventaja.
A estas alturas, 11 semanas, en 2017 Filadelfia era lo que hoy es su último rival, los Santos, porque tenía nueve juegos ganados y solo una derrota y mostraban una ofensiva arrolladora, el problema es que el resto del calendario les presenta cuatro juegos divisionales y visitar a Carneros.
Son un desastre
Acostumbrado a ser un equipo del montón, los Jaguares sorprendieron la campaña pasada al llegar a la Final de Conferencia contra los Patriotas de Nueva Inglaterra y haberse quedado a minutos de poder llegar al Super Bowl, gracias a que tuvieron la mejor defensa de la liga y que la ofensiva funcionó a pesar de su quarterback Blake Bortles.
Pero este año las lesiones y errores en momentos clave han puesto a los Jaguares con la peor racha de todos los equipos, pues suman seis derrotas consecutivas y entre las lesiones (17) y la inoperancia de Bortles, deben empezar a pensar en la siguiente temporada.
Pese a que le extendieron el contrato, las dudas cada vez son mayores sobre su mariscal, quien es incapaz de conseguir las jugadas más básicas como bajarle al reloj o cambiar la estrategia sobre la línea.
Los ‘Jags’ necesitan ganar todos los duelos que les quedan para aspirar a ser uno de los mejores segundos lugares de la Americana.
