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La postemporada de las Grandes Ligas ofrece platillos suculentos a disfrutar tanto en la Liga Americana como en la Liga Nacional, con equipos que si bien no son los más poderosos económicamente, sí poseen la gracia para conquistar nuevos fans.
El caso de Reales de Kansas City llama la atención. Ahora que disputan la Final de la Serie de Campeonato de la Nacional, los Royals vuelven a la plataforma del éxito después de 29 años de su último título.
Esta son algunas razones por las que Kansas City comienza a destaparse como el equipo favorito de los amantes del béisbol en la Unión Americana.
De la mano de un manager destacable como Ned Yost, un bateo recién descubierto y liderado por Alex Gordon, además de una defensiva dinámica, los Reales siguen como favoritos para llevarse la Serie que hoy se reanuda ante Baltimore… y para llegar más lejos.
> Último lugar en jonrones
Kansas City solo conectó 95, por los 136 de Seattle, pero han pegado varios jonrones en extrainnings en esta postemporada.
> Los dos mejores pagados no dan el sueldo de Zack Greinke
En los Royals, solo dos jugadores rebasan los 10 millones de dólares en su contrato anual: James Shields y Alex Gordon. Zack Greinke cobra 28 millones de dólares por lanzar en los Dodgers. Shields recibe 13.5 millones y Gordon 11.2.
> Calidad de casa y de bajo costo
Entre los equipos de postemporada, Kansas City es el segundo con más jugadores formados en sus sucursales, con 13. En la serie divisional, tres de ellos estuvieron remolcando las carreras de la ventaja. Diez de los jugadores de Kansas City fueron adquiridos en el draft de junio para peloteros de preparatoria y universidad que residen en Estados Unidos, Canadá y Puerto Rico, y tres más fueron firmados como agentes libres amateurs.
> Una larga espera para los playoffs
Por la vía del comodín y ahora instalados en la semifinal de la Serie Mundial, los Royals cortaron este 2014 con la sequía más larga de un equipo de cualquier liga profesional en Estados Unidos sin llegar a los playoffs.
Los Reales no avanzaban a la postemporada desde que George Brett los guió al título de la Serie Mundial sobre los Cardenales de San Luis, en 1985.