De repechito al Mundial

Los cinco goles que la Selección Nacional le clavó a Nueva Zelanda en el primer juego del repechaje rumbo a la Copa del Mundo, no solo le permiten al Tri sentirse dentro de la justa mundialista, sino que le devolvieron el aliento a los principales patrocinadores del combinado mexicano.

A menos de que la próxima semana en Wellington, donde se jugará el partido de vuelta, suceda una tragedia de proporciones bíblicas, México será uno de los 32 participantes en la máxima fiesta del futbol mundial, pero además habrá salvado un negocio de miles de millones de dólares. 

Rocío Cepeda Rocío Cepeda Publicado el
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años pasaron para que el estadio Azteca viera seis goles en una eliminatoria

Los cinco goles que la Selección Nacional le clavó a Nueva Zelanda en el primer juego del repechaje rumbo a la Copa del Mundo, no solo le permiten al Tri sentirse dentro de la justa mundialista, sino que le devolvieron el aliento a los principales patrocinadores del combinado mexicano.

A menos de que la próxima semana en Wellington, donde se jugará el partido de vuelta, suceda una tragedia de proporciones bíblicas, México será uno de los 32 participantes en la máxima fiesta del futbol mundial, pero además habrá salvado un negocio de miles de millones de dólares. 

Un doblete del siempre héroe Oribe Peralta, un gol de Raúl Jiménez, otro de Paul Aguilar y uno más del capitán Rafael Márquez, contra el solitario gol de rebote de neozelandés Chris James, fueron parte del festín que disfrutó el pletórico estadio Azteca en una atípica tarde de futbol.

El papel que desempeñó la selección de Miguel Herrera fue decoroso, un reflejo del proceso que lleva el América en la Liga MX, aderezado con el futbol vistoso de Carlos “Gullit” Peña, Luis Montes y el “Hermoso” Peralta.

“Si México clasifica al Mundial, aquí me van a ver hasta el 2018”, fue la amenaza del apasionado Herrera unas horas antes del partido, reflejando esa confianza que le brinda su equipo y de paso el frágil rival que les tocó esta vez.

La alineación le funcionó, su línea de cinco surtió efecto, los carrileros Paul Aguilar y Miguel Layún desbordaron con antojo por las bandas para general peligro constante durante el inicio del encuentro.

Al minuto 18’ México sufrió de ver la pelota en la línea de Glen Moss y que éste la sacara de puños, lo que hubiera significado el primer tanto de la tarde. Parecía gol, pero el Tricolor no se detuvo para lamentarse y continuó tocando, adelantando líneas y buscando la oportunidad que se concretó después.

Cerca del 31’ vino el primero por conducto de Paul Aguilar, quien se encontró con el balón en el área para empujarlo cerca del poste izquierdo. De la emoción, festejó con la banca y con su efusivo entrenador.

Ocho minutos después el segundo gol fue de Raúl Jiménez. El tercero, el de Oribe, cayó en el inicio del segundo tiempo, para que el Azteca cantara el “Cielito lindo” a todo pulmón.

Mientras Moss se convertía en la figura de Nueva Zelanda por tantas atajadas, el cuadro mexicano no bajó los brazos para hacer efectiva la superioridad palpable con otra anotación más, el cabezazo de Oribe al 80’. Rafa cerró la cuenta al 83’

El “prietito en el arroz” se dio tras un mal rechace de “Moi” Muñoz, el cual ocasionó que James contrarrematara para marcar el gol visitante.

Con esta victoria, el Tricolor pone pie y medio en Brasil. A menos que los “All Whites” consigan la diferencia de cinco goles en Wellington, México tiene el camino libre para ir al Mundial. 

Ellos también se van a salvar

El resultado apabullante de 5-1 contra Nueva Zelanda también brindará alegrías en las altas esferas del futbol mexicano, particularmente del negocio de las televisoras y el puesto del directivo Justino Compeán.

Cuando México se metió en este lío de complicarse demás para obtener el pase al Mundial de Brasil 2014, los presidentes de las televisoras nacionales, así como los patrocinadores y dirigentes de la Femexfut pusieron sus interéses en juego en caso de no llegar.

Si bien todavía falta el juego de vuelta en Wellington el próximo 20 de noviembre, la Selección Mexicana está a nada de salvar los 600 millones de pesos que se ponen en juego con su presencia en la máxima justa mundialista.

Emilio Azcárraga Jean, presidente de Grupo Televisa, y Ricardo Salinas Pliego, de TV Azteca, ya pueden sentirse más relajados pues no perderían sus 100 millones de dólares que pagaron por los derechos de transmisión del Mundial.

A Justino también le están asegurando otros meses más como presidente de la Federación Mexicana de Futbol, aun y cuando es el principal señalado en el fracaso que se ha convertido la Selección Mexicana en este proceso mundialista rumbo a Brasil.

Los cinco grandes patrocinadores de la Femexfut: Adidas, Coca-Cola, Banamex, Movistar y P&G, también se pueden ir sintiendo menos presionados porque sus marcas también tienen pie y medio dentro del escenario más importante del balompié en el planeta.

Quedan 90 minutos y solo una catástrofe en tierras neozelandesas podría quitarle la sonrisa a los de pantalón largo, así que por lo pronto que sigan rezando que sus plegarias están siendo escuchadas.

 

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