Nadie detiene a los Vaqueros, quienes cabalgan desatados hacia la Postemporada.
De la mano de su mariscal de campo Dak Prescott y el corredor Ezekiel Elliott, Dallas superó en dramático partido a Acereros de Pittsburgh 35-30 para lograr su octava victoria consecutiva de la campaña.
Los novatos de Cowboys son una realidad. Elliott corrió para 114 yardas y anotó dos touchdown en los últimos dos minutos para otorgar la victoria.
Mientras, Prescott lanzó para 319 yardas y dos touchdowns, en un partido donde quedó demostrado sobre quién debe ser el mariscal de campo titular en Dallas.
Durante la semana, Tony Romo practicó y se mantuvo en vilo ante un posible regreso, sin embargo estaba claro: Dak no suelta el mando y ha sido pieza fundamental para el presente que gozan los Cowboys.
Por primera vez desde 1977, Dallas acumula una seguidilla de ocho triunfos al hilo y en aquella ocasión se adjudicaron el Super Bowl.
Además, con marca de 8-1, encabezan la Conferencia Nacional y son el equipo con los mejores
números.
Por otro lado, Dez Bryant obtuvo seis capturas para 116 yardas, mientras que por Steelers Ben Roethlisberger lanzó para 408 yardas y tres anotaciones.
Además, padeció la cuarta derrota ante un mariscal de campo novato, como Prescott, desde 2004.
A segundos de consumarse el reloj y con la pizarra 30-29 en favor de Acereros, Dak hizo una pantalla hacia Elliott quien corrió 83 yardas y colocó el touchdown de la victoria, siendo el acarreo más largo para la franquicia desde que Herschel Walker lo hiciera para 84 yardas contra Filadelfia en
1986.
