Luto en la cancha

En medio de la mayor tragedia de su historia, el Chapecoense se dio cuenta que no está solo. 

 

El conjunto brasileño que sufrió la pérdida de prácticamente toda su plantilla del primer equipo tras un accidente de avión, unió al mundo del deporte y en específico al del futbol. 

Indigo Staff Indigo Staff Publicado el
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En medio de la mayor tragedia de su historia, el Chapecoense se dio cuenta que no está solo. 

 

El conjunto brasileño que sufrió la pérdida de prácticamente toda su plantilla del primer equipo tras un accidente de avión, unió al mundo del deporte y en específico al del futbol. 

Clubes, personajes y organizaciones hicieron todo lo necesario para que esta institución se levante y junto a sus aficionados siga sonriendo.

 

Una de esas medidas de apoyo llegó por medio del Atlético Nacional de Medellín, que solicitó a la Conmebol que el título de la Copa Sudamericana sea otorgada al Chapecoense, en memoria de las víctimas de la tragedia aérea.

 

“Atlético Nacional invita a Conmebol a que el título de la Copa Sudamericana le sea entregado a la Associaçao Chapecoense de Futebol, como laurel honorífico a su gran pérdida y en homenaje póstumo a las víctimas del fatal accidente que enluta nuestro deporte. De nuestra parte, y para siempre, Chapecoense Campeón de la Copa Sudamericana 2016”, publicó el club cafetalero.

 

Hasta el momento no ha habido una respuesta oficial de la Conmebol a la propuesta del Atlético Nacional, actual campeón de la Copa Libertadores, pero se sabe que la están analizando.

 

De concretarse ocurriría algo sin precedentes en la historia del futbol, esto debido al accidente que sufrió el equipo.

 

Tras las cifras finales, se determinó que 71 de las 77 personas que viajaban en el vuelo rumbo a Colombia perdieron la vida.

 

Solo sobrevivieron tres futbolistas: el portero Jackson Ragnar Follmann, a quien le amputaron una pierna; el defensa Helio Hermito Zampier “Neto” y el lateral Alan Luciano Ruschel.

 

También salieron con vida la auxiliar de vuelo, Ximena Suárez; el periodista Rafael Henzel y el técnico del avión, Erwin Tumiri. 

 

UN EQUIPO EN RECONSTRUCCIÓN

 

Inmediatamente después de la tragedia, el futbol brasileño se unió en torno al equipo de Chapecó, originario del estado sureño de Santa Catarina.

 

Cuatro clubes de mayor tradición en Brasil, como Santos, Palmeiras, Sao Paulo y Corinthians, se comprometieron a prestar futbolistas al Chapecoense, que se encuentra en estos momentos en el noveno lugar del Brasileirao.

 

También solicitaron a la Confederación Brasileña de Futbol (CFB) que al Chapecoense se le exonere de la lucha por no descender a la Serie B por los próximos tres años.

 

Mientras, clubes como el París Saint-Germain de Francia donará 40 millones de euros al club brasileño para contratar jugadores y armar así a un nuevo plantel.

 

Además de los tres jugadores que lograron sobrevivir a la tragedia, están otros pertenecientes al plantel que no hicieron el viaje y se salvaron de padecer el incidente.

 

Rafael Lima, Nenem, Demerson, Marcelo Boeck, Andrei, Hyoran, Moisés, Nivaldo y Alejandro Martinuccio no fueron convocados para formar parte de la expedición.

 

Otra opción del club son sus fuerzas básicas o inferiores, integradas por el equipo Sub 20 y Sub 15 que nutren al primer equipo de toda escuadra de futbol profesional.

 

Por lo pronto, la CFB decretó un luto de siete días, además de posponer las competencias como la Final de la Copa de Brasil y la última jornada del Brasileirao.

 

Fundado en 1973, luego de 35 años de ausencia en 2014 volvió a disputar el campeonato de Primera División de Brasil y en el presente 2016 jugaría su primera final internacional tras haberse clasificado a la serie definitoria de la Copa Sudamericana, la segunda competición más importante a nivel clubes de la Conmebol después de la Copa Libertadores.

 

En Semifinales, dejó en el camino al club argentino San Lorenzo de Almagro.  

 

TRAGEDIA DEL SIGLO

 

La del Chapecoense es la peor tragedia para el futbol en lo que va del Siglo XXI, sin embargo se recuerdan otros acontecimientos similares.

 

El más reciente de un equipo deportivo había sido el del Lokomotiv de hockey de Rusia, que el 7 de septiembre de 2011 sufrió la pérdida de sus jugadores al desplomarse su avión.

 

En el futbol se recuerdan la tragedia del Torino de Italia en 1949, en el que perecieron 31 personas, además de la del Manchester United en Munich (1958), donde sobrevivió el jugador inglés Bobby Charlton.

 

También está el avionazo del Alianza Lima (1987) y la de la Selección de Zambia, la cual disputaba las eliminatorias rumbo al Mundial de 1994.  

 

En esta última expedición, el jugador del América, Kalusha Bwalya se libró del incidente gracias que no viajaba con sus compañeros. 

 

También se recuerda la del equipo de futbol americano de la Universidad Marshall, cuyo avión se estrelló el 13 de noviembre de 1970.

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