La aviación es responsable del 2.5 por ciento de las emisiones mundiales de CO2. Foto: Airbus

Nuevas tecnologías reducirían las emisiones de CO2 de los aviones

Con el objetivo de alcanzar cero emisiones netas de carbono para 2050, los Combustibles de Aviación Sostenibles pueden representar una reducción del 80% de las emisiones

La aviación es responsable del 2.5 por ciento de las emisiones mundiales de CO2, ya que la mayoría de los aviones funcionan con turbosina, que es el combustible especial para las aeronaves. Por tal motivo, la Comisión Europea prevé que, a mediados del siglo XXI, la demanda de vuelos podría aumentar las emisiones de gases de efecto invernadero de la aviación en más de un 300% con respecto a los niveles de 2005 si no se toman medidas drásticas para reducirlas.

En octubre de 2022, la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) de la ONU dirigió dos semanas de negociaciones en las que participaron 184 países para acordar medidas de reducción de las emisiones de CO2. Entre ellas figuran el aumento de las tecnologías innovadoras en las aeronaves, la “racionalización” de las operaciones de vuelo y el incremento de la producción y el uso de Combustibles de Aviación Sostenibles (SAF).

Ante este panorama, el sector de la aviación ha adoptado el objetivo de alcanzar cero emisiones netas de carbono para 2050, para lo cual, los Combustibles de Aviación Sostenibles (ASF) pueden representar una reducción del 80% de las emisiones, según la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA).

Retos y beneficios de los SAF

El SAF puede fabricarse a partir de varias fuentes, desde residuos agrícolas hasta carbono capturado del aire y es totalmente compatible con las aeronaves y la infraestructura de abastecimiento de combustible existentes. Sin embargo, los elevados costos de producción y el suministro limitado han frenado su adopción.

Según la IATA, el sector de la aviación no podrá eliminar por completo las emisiones en origen y tendrá que mitigar el resto mediante diversos mecanismos de compensación y, dado que los vuelos de corta distancia de menos de 600 millas representan más del 17% de las emisiones de las aerolíneas, también se están desarrollando nuevas tecnologías como los aviones eléctricos y propulsados por hidrógeno.

El gigante europeo de la aviación, Airbus, está desarrollando tres tipos de aviones comerciales de emisiones cero propulsados por hidrógeno que, según afirma, podrían entrar en servicio a partir de 2035. Se trata de un avión turbohélice con capacidad para 100 pasajeros y una autonomía de más de 1,000 millas náuticas; un turboventilador para 120 o 200 pasajeros, con una autonomía de más de 2,000 millas náuticas; y un blended-wing body, de hasta 200 pasajeros, que también podría volar más de 2,000 millas náuticas. Sin embargo, para que el hidrógeno sea un combustible de aviación neutro en carbono, tendrá que producirse utilizando métodos sostenibles.