Durante la época navideña la mayoría disfruta a la familia, los amigos y los excesos propios de la temporada.

Pero más allá de una cruda o gastritis, lo cierto es que las personas deben tomar en cuenta precauciones para no afectar su salud, sobre todo la anímica y mental.

Y es que en la temporada aumentan los casos de la llamada “depresión navideña”, un síndrome que se caracteriza por la tristeza y el desgano, tal como una depresión común.

En el marco de la campaña “Juntos contra la Ilegalidad”, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y la Procuraduría General de la República (PGR) decomisaron cuatro millones 700 mil cigarrillos pirata.

En un operativo en las aduanas de Lázaro Cárdenas, Michoacán, y Chetumal, Quintana Roo, los verificadores de la Cofepris y el SAT, así como personal de la Procuraduría aseguraron los cigarrillos de las marcas Jaisalmer y Alamo.

En plena víspera de Navidad, las personas tienen la mente en todo menos en la salud y bienestar de su cuerpo. Buñuelos, alcohol, chocolates, churros, tamales y demás se vuelven el pan de cada día y la palabra "nutrición" desaparece del vocabulario hasta que llegue enero y con ello la cruda realidad.

En países como México la mala alimentación se traduce en padecimientos como obesidad, sobrepeso y diabetes, siendo ésta última una de las principales causas de muerte en la República Mexicana. 

Uno de los principales problemas de salud en México es el del cáncer de cuello uterino, que se ha convertido en la primera causa de muerte por neoplastias malignas, en mujeres de 25 a 64 años de edad.

Según números del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en el 2010 la tasa media nacional de mortalidad en el país a causa de este problema fue de 42.12 por cada 100 mil mujeres mayores de 25 años; es decir, 15 mil 247 defunciones. 

La mayoría ya está de vacaciones o pasa los fines de semana como tal. Entre Netflix, posadas, fiestas y desveladas, los sábados y domingos se vuelven días para "hibernar" y dormir cuantas horas sea posible.

Sin embargo, como todos los excesos y extremos, dormir durante mucho tiempo puede ser perjudicial para la salud.