Caballos de las mejores líneas de sangre del mundo para entrenarse en la equitación ingresaron a México, vía aérea, con documentos falsificados y así llevan un año. 

Alberto Sánchez-Cózar, criador de equinos en España, denunció que por la retención de dos potrancas para subastarse en Monterrey, la autoridad le pide que regrese sus caballos a Europa.

Pero la transportación tiene un costo de 14 mil euros por viaje, cuando él no tiene ninguna responsabilidad en la falsificación de documentos.

La Senasica (Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad, y Calidad Agroalimentaria) de la Sagarpa informó ayer que la detención de los caballos procedentes de España se debió a la falsificación de documentos para su importación. 

La unidad de enlace de la dependencia explicó que los equinos no pueden entrar al país porque al ser falsificados sus documentos, no existe una certificación de su sanidad.

Pero los caballos no serán sacrificados si sus propietarios pagan el flete para que vayan de regreso al país de procedencia. 

Al menos dos yeguas y un caballo de las mejores razas para salto que arribaron de la Península Ibérica al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México fueron retenidos en un camión, desde el 27 de septiembre.

Peligra la vida de las potrancas y del equino porque se encuentran en pésimo estado de salud, ya que desde que llegaron al aeropuerto están de pie en un espacio muy reducido.

Y es que la Sagarpa carece de cuadras para poner en observación a los animales.

Pero además, porque corre la versión de que los equinos serían sacrificados.

México se ubica entre los 15 países que producen más alimentos y ocupa el número 13 como exportador de productos agrícolas, sin embargo, una cuarta parte de la población no disfruta los beneficios de esa abundancia.

Desde la entrada en vigor del TLCAN, México ha importado alimentos por cerca de 250 mil millones de dólares.

Es decir, se ha convertido en un importador nato que tiene en su haber 28 millones de ciudadanos en pobreza alimentaria.

La propia FAO otorgó al país en 2011 el primer lugar como importador de alimentos básicos en América Latina.