Los refuerzos, los movimientos, los choques particulares y desde luego los clásicos son motivos fundamentales para no perderse la Liga MX en cada nueva temporada, pero este 2015, pinta para ser emocionante y expectante de principio a fin.

Aunque el futbol y la cantidad de goles anotados durante la campaña fueron a la baja el año pasado, los equipos fueron conscientes de ello y se armaron hasta los dientes para ofrecer un mejor espectáculo que haga valer cada peso que se paga en los boletos de entrada.

Terminó el ayuno del futbol mexicano, pero para cuatro clubes comenzó la lucha por no perder la categoría. 

Las Chivas, uno de los más longevos del balompié nacional; Leones Negros, el benjamín del máximo circuito; así como dos expertos equilibristas: Puebla y Veracruz, se juegan la vida.

Tres de los cuatro clubes arrancarán con igualdad en el cociente. El Rebaño parte con algo de ventaja, aunque esta es apenas de un partido ante el equipo de La Franja, su rival más cercano. 

Los implicados en el descenso 

¿Desde hace cuántos torneos que un delantero mexicano no termina como el máximo goleador del futbol nacional? ¿Hace cuánto que no aparece una nueva camada de artilleros de nuestro país en el ataque de un equipo?

Mientras los clubes de la Liga MX continúan contratando goleadores extranjeros y recurriendo a naturalizados para liderar sus ofensivas, el futbol mexicano ha ido disminuyendo drásticamente su producción de delanteros.

Cada año el futbol mexicano se pone como objetivo crecer, tener mayor y mejor espectáculo, y la superación de cada uno de sus protagonistas. De forma particular, los jugadores también sueñan con crecer y emigrar a una mejor liga, de preferencia en el continente europeo.

Luego de la primera sorpresa del 2015 en la que Miguel Layún decidió enrolarse con el Club Watford de Inglaterra, otros cinco compatriotas podrían seguirle la huella durante los próximos meses, o quizá días, para vestir la camiseta de algún equipo en el viejo continente. 

Marco Fabián

Es un país de café, vallenato y futbol. En Colombia se venera a Gabriel García Márquez, y también a la Selección Nacional. 

Lo tienen en las venas, el talento de sus jugadores es nato y las canchas siguen siendo su válvula de escape.

Colonizar al mundo con su espectáculo no es un objetivo sino una visión del presente, y para esto la Liga MX se deja querer con esta masiva llegada de futbolistas que desde hace varios años se han apoderado del gusto de la afición.