FINALAPERTURA2013
FINALAPERTURA2013 La final es en la cancha

Desde que se supo que América y León serían los rivales de la final del Apertura 2013, los focos se centraron en sus dueños Emilio Azcárraga Jean y Carlos Slim Helú, respectivamente.

El morbo que despiertan estos gigantes de las telecomunicaciones es inevitable, sus empresas con el pan de cada mesa en México, sin embargo esta noche es tiempo de ver lo que realidad nos compete: el partido de futbol.

FINALAPERTURA2013 El llanto de Azcárraga

La final del futbol mexicano se está jugando fuera de la cancha. Si bien el partido de ida será mañana por la noche y la vuelta el domingo en la tarde, el morbo que ha despertado la rivalidad entre Carlos Slim y Emilio Azcárraga Jean la vuelve más interesante.

Como el episodio memorable que está protagonizando Televisa, dueña del Club América, por su postura en contra de la señal restringida que ofrecerá Fox Sports, propietaria de los derechos televisivos del Club León, para el juego del jueves.

FINALAPERTURA2013 El león detrás de la fiera

Poco más de un año le bastó a Carlos Slim Helú para recoger los frutos de su ingreso al negocio del futbol mexicano.

Se dice que los ‘peces gordos’ de la Liga MX no lo querían adentro. Le cerraron las puertas a otras tantas propuestas económicas, pero tan efectiva ha sido su bienvenida que está a un paso de ganar su primer campeonato.

En agosto de 2012, el segundo hombre más rico del mundo, decidió ampliar su negocio en el balompié nacional con la firma por el 30 por ciento de las acciones del Club León, perteneciente al Grupo Pachuca.

FINALAPERTURA2013 Una batalla de televisión

Es expectante ver al América superlíder y vigente campeón en una nueva final, pero más interesante se puso esta nueva disputa por el título nacional por tratarse del León como el rival, ya que la contienda directa entre Emilio Azcárraga y Carlos Slim se ha trasladado a la cancha.

Los dos gigantes de las telecomunicaciones en México protagonizan esta semana la nota deportiva, al ser una vez más enemigos directos.