Sergio Ramos pidió “perdón” por la eliminación de España en el Mundial 2014, “por la imagen” dejada en los partidos ante Holanda y Chile, y aseguró que estarán tan “unidos como en la victoria”.

“Es muy duro para nuestro país y para nuestra historia. Pedimos perdón por la imagen de la selección en este Copa del mundo. No ha sido lo esperado. Hay que felicitar a Holanda y Chile, ser digno en la derrota, aunque sea un día duro de asimilar”, aseguró en la zona mixta de Maracaná.

El rey Juan Carlos abdicó el trono de España, pero hay algunos lujos a los que no renunciará.

Juan Carlos acabó ayer con 39 años de reinado al firmar la ley de su abdicación en una ceremonia oficial con 150 funcionarios en el Salón de Columnas del Palacio Real, en Madrid.

Pero los cuestionamientos continúan para el monarca, pues seguirá como capitán del Ejército, tendrá protección judicial y podría recibir una pensión.

La infanta Cristina de Borbón sale de su cuento de hadas para entrar en una historia de suspenso.

Con la abdicación de su padre, el rey Juan Carlos, Cristina ya no será parte de la familia real, por lo que dejará de tener paga del palacio de la Zarzuela y ya no tendrá agenda oficial. 

Esto aumenta la posibilidad de que la infanta reciba una condena judicial, pues desde el 7 de enero el juez José Castro le imputó cargos de fraude fiscal y lavado de dinero por presuntamente ser cómplice de su marido Iñaki Urdangarin, señala la prensa.

El músculo de los republicanos españoles lució con más fuerza que nunca esta semana, cuando decenas de miles invadieron las principales calles de ciudades como Madrid, Barcelona y Bilbao.

”¡Un bote, dos botes, Borbón el que no vote! ¡España, mañana, será republicana!”, fue una de las principales consignas de los quejosos, quienes buscan un referéndum que culmine en la instauración de una república. 

Con el tiempo y las transiciones, España se ha vuelto condescendiente.  Así pareció cuando ocurrió la boda del príncipe heredero, Felipe de Asturias, con Letizia, una plebeya que escribía su nombre con falta de ortografía. 

Los cambios entre el conservadurismo de una tradición de profundo catolicismo, exacerbado con la represión del franquismo, y la sorpresa de verse de pronto casi tan liberales como los republicanos en el exilio que antes era obligatorio odiar, facilitaba las cosas.  España había pasado mucho como para ser inflexible.