Mónica, Laura y Ana, son mujeres mexicanas que se enfrentaron a ellas mismas para dejar a atrás su vida y replantearse su existencia frente a su destino biológico, ser madres.
De acuerdo con lo que establecen los roles sociales y hasta naturales, las mujeres están destinadas biológicamente a la conservación de la especie, tienen las posibilidades de engendrar hijos, sin embargo, se torna una decisión difícil cuando están de por medio los intereses de cada persona, adolescencia, divorcio, abandono, infertilidad o falta de pareja.
Indigo Staff