La labor periodística siempre se basa en la evidencia, en develar la veracidad de un suceso, y corroborar la legitimidad de lo que se busca hacer noticia.
Cuando se pone en entredicho a la fuente de la información, es cuando tambalea la credibilidad, el prestigio y la virtud de exclamar lo que significa la verdad.
Sin embargo pugnar por el derecho de defender la autenticidad del reportaje, debe llevarse hasta las últimas consecuencias.
Hidalgo Neira