Exigen que autoridades les permitan trabajar.

Vendedores ambulantes protestan en Palacio de Gobierno; piden que los dejen trabajar

Vendedores ambulantes exigen que se les permita trabajar en las inmediaciones de la Macroplaza; alegan haber estado en el sitio 25 años

Luego de ser desalojados de la zona hace algunas semanas, trabajadores dedicados al comercio ambulante protestaron hoy frente al Palacio de Gobierno para exigir que se les permita volver a laborar en las inmediaciones de la Macroplaza.

Eduardo Arguijo Baldenegro, vocero de la agrupación civil Avance Popular, misma que representa a los comerciantes, expresó que, aunque el tema es de competencia municipal, acudieron a la base de la administración estatal debido a que desde ahí se gestó la orden de desalojo.

“Los comerciantes de aquí de la Macroplaza tienen 25 años trabajando, han sufrido los embates y la represión de cuanto gobierno, autoridad o administración llega; todos han sido sacrificados, han sido reprimidos, les han decomisado su mercancía, se las tiran al piso, han sido golpeados por los propios inspectores, no los dejan trabajar a gusto”, denunció Aruijo.

 

Denuncian ‘presiones’ para desalojo

El vocero afirmó que el gobierno estatal obedece a presiones provenientes de los medios de comunicación para realizar sus operativos, sin importar que el comercio informal en la zona sea, para muchas familias, la única fuente de ingreso de la que pueden echar mano.

Además, afirmó que la mayoría de los trabajadores en México laboran bajo un esquema informal, por lo que se está atacando una forma de vida legítima para millones de personas.

“Todo porque siempre ha obedecido a su vocero, el periódico El Norte, les avienta un periodicazo e inmediatamente los desalojan, inmediatamente van y los reprimen, les decomisan su mercancía, y eso no es justo, México vive hoy una crisis económica donde el 60 por ciento de los trabajadores son informales y sólo el 40 por ciento son formales, con seguridad social y un trabajo estable”, declaró.

El protestante agregó que los comerciantes informales son el alma y el colorido de la Macroplaza, y sin ellos los paseantes no acudirían en gran número a dicho espacio público.

“Ellos tienen 25 años aquí, y quieren llevar comida a su casa y hacerlo de manera lícita, no robando ni cometiendo actos delincuenciales; quieren llevarla de manera pacífica y desarrollando un trabajo digno como lo marca la Constitución”, comentó Arguijo.

La protesta contó con bloqueos momentáneos en algunas calles del Primer Cuadro de la ciudad; aunque se liberó la circulación, los manifestantes aseguraron que retomarán sus actividades todos los días a no ser que las autoridades ofrezcan una solución satisfactoria a sus demandas.

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