Hombres que buscan imágenes de mujeres lactando a sus bebés, conocidos como vampiros blancos, inundan las redes sociales.
La lactancia erótica o lactofilia es una práctica sexual que se da dentro del ámbito de la pareja, algunas veces, y consiste en que hombres adultos beban la leche que una madre lactante produce para su bebé.
Se trata de una parafilia, una práctica sexual atípica, consistente en el deseo de ingerir leche de los senos de una mujer.
Sin embargo, aunque se considera una actividad ‘normal’ cuando ambos involucrados, la madre lactante y el adulto que desea ser amamantado, están de acuerdo, en redes sociales los vampiros blancos acechan a madres inocentes que comparten imágenes de una actividad normal: alimentar a sus pequeños hijos.
El peligro está en redes sociales
Diversos colectivos de madres presentes en las redes sociales alertan a otras acerca del peligro de compartir en redes sociales fotos de ellas alimentando a sus bebés con sus cuerpos.
Los vampiros blancos aprovechan cualquier oportunidad para obtener este tipo de imágenes, incluso crean grupos o páginas de redes sociales para compartir este tipo de contenido.
Una forma muy común, además del robo de instantáneas desde los perfiles de madres lactantes, es hacerse pasar por especialistas en lactancia u ofrecer ediciones del llamado ‘árbol de la vida’.
Cuando se presentan diversos problemas en el amamantamiento de un recién nacido las madres buscan el apoyo de una asesora de lactancia, algunas de ellas laboran de manera virtual cuando a ella o a la madre les es difícil desplazarse y encontrarse en un lugar físico.
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Con fines sexuales, los lactofilicos piden videos a las madres para ‘corregir la postura del bebé al amamantar’, uno de los problemas más comunes y que acaban con lactancias de manera prematura.
Los vampiros blancos aprovechan esto para obtener fotos de mujeres lactando, con el supuesto objetivo de corregir los aspectos que impiden la óptima alimentación del bebé.
Otra de las formas para obtener este tipo de material sensible de las madres es cuando ella misma busca ayuda para edición de fotos.
Muchas mujeres buscan guardar un recuerdo de esta etapa de su maternidad, por ello se popularizó la edición tipo ‘árbol de la vida’ que muestra al seno de la madre como un árbol y la boca y mejillas del bebé como las raíces.
Vampiros blancos se hacen pasar por otras mujeres que ofrecen esta edición de manera gratuita.
Sofía, quien fue víctima de uno de estos sujetos, cuenta a Reporte Índigo, cómo fue contactada.
“Pedí en uno de los grupos de mamás en los que estoy, que se supone son de puras mujeres, que me editaran mi foto para que quedara así de árbol de la vida, quería imprimirla para el álbum de mi bebé, relata.
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La joven madre cuenta que en ese momento recibió un mensaje, vía inbox, de una supuesta miembro del grupo que se ofrecía a hacerle la edición.
“Le mandé las fotos pero se me hicieron súper raras muchas cosas, por ejemplo que le mandé una foto que servía para lo que quería pero estaba muy necia pidiéndome fotos dónde se viera más de cerca, del momento en el que le metía el pecho en la boca al bebé, donde se viera un poco más mi pezón y pues ahí si ya no me pareció normal y la bloqueé”, platica Sofía.
Otras mujeres, a través de esos mismos grupos, o en publicaciones desde sus muros alertan a otras acerca de dar acceso a estas imágenes a cualquiera.
