Todo apunta a omisión oficial

Los indicios que aportó el agente del Ministerio Público que integra la averiguación previa, por el homicidio doloso cometido en agravio de los hermanos José Abraham y Rey David Copado Molina, empleados de Marketing Research & Servicios S.A. de C.V., apuntan hacia la negligencia del alcalde, el que pidió a su cuerpo de policía no intervenir para el rescate de los jóvenes linchados.

La averiguación previa que integra el agente el Ministerio Público con sede en Tehuacán, Puebla, revela que el edil de Ajalpan dejó pasar el tiempo antes de informar sobre la situación de riesgo que enfrentaban los dos encuestadores. La llamada para informar a la Secretaría de gobierno de Puebla, tardó más de dos horas en realizarse.

Además, el alcalde Lara Torres fue omiso para desplegar a la fuerza policial a su mando, pese a que los jóvenes asesinados estuvieron siendo golpeados por la turba enardecida, por más de dos horas frente al Palacio de Gobierno, a donde se hizo presente solo como observadores un grupo de policías municipales, los que por iniciativa propia estuvieron pidiendo la entrega de los jóvenes ensangrentados.

Fuentes de la Procuraduría de Justicia del Estado de Puebla dieron a conocer que no sería extraño que la condición del alcalde pase de ser el principal testigo de los hechos a una condición de indiciado, pues versiones de algunos elementos de la Policía municipal que ya declararon ante el agente del ministerio, no avalan la versión de la pronta intervención del edil.

La noche del pasado lunes, un grupo de más de 200 personas retuvieron, golpearon, asesinaron y quemaron a dos encuestadores que realizaban trabajos para conocer el estado socioeconómico de las tortillerías en esa localidad. La turba enardecida, azuzada aparentemente por algunos empresarios de la maquila señalaba a las víctimas de ser secuestradores.

Este miércoles, al comparecer ante el agente del Ministerio Público, el alcalde de Ajalpan, se deslindó de la posibilidad de la omisión, pero no pudo decir la razón por la que omitió solicitar a su cuerpo de Seguridad Pública una acción determinante para salvar la vida de los dos detenidos. Tampoco pudo explicar la forma en que un grupo de civiles ingresó a la comandancia de la policía y sustrajo las armas de la policía municipal.

De acuerdo a la investigación de la Policía ministerial del estado de Puebla, paralelo a los hechos del linchamiento de los dos encuestadores que fueron tomados por secuestradores en base a la versión de una niña, a la que no se ha podido ubicar; de la comandancia de la Policía municipal de Ajalpan se sustrajeron 15 armas de fuego, ocho armas largas calibre 2.23 y siete armas cortas calibre 9 mm, según lo corroboró el secretario del ayuntamiento, Juan Guzmán.

La Procuraduría de Justicia de Puebla no cuenta con detenidos por este hecho, pero hay una lista de 44 personas a las que ya se les busca para que acudan a rendir su declaración ministerial en calidad de testigos, la mayoría de ellos integrantes de diversas organizaciones sociales opositoras al alcalde Lara Torres, al que se le acusa de negarse a la posibilidad de permitir la presencia del mando único de policía en esa localidad.

Esta no es la primera ocasión en que se registra un linchamiento en esa zona del poniente del estado de Puebla. Hace apenas 15 días los pobladores del Altepexi, población limítrofe a Ajalpan, intentaron el linchamiento de un presunto ladrón de motocicletas. La semana pasada en la localidad de San Marcos también una turba intentó linchar a otros dos presuntos ladrones, ante la mirada omisa del edil. En suma, en los municipios de Puebla, de acuerdo al recuento de los medios locales de comunicación, en lo que va de este año se han registrado 30 intentos de linchamiento en 18 municipios.