Apunta a drogas tiroteo en playa del carmen
La disputa por la venta de droga es la principal línea de investigación que manejan las autoridades sobre la balacera registrada ayer en la madrugada en el club nocturno Blue Parrot, en Playa del Carmen, que provocó la muerte de cinco personas.
El fiscal de Quintana Roo, Miguel Ángel Pech, aseguró que el tiroteo se originó después de que un hombre ingresara armado al club, y disparara contra una persona en particular.
“Cualquier ataque es terrible, más aún si resulta en la pérdida de vidas. Este es un suceso muy doloroso para los involucrados y para nuestra ciudad”
La disputa por la venta de droga es la principal línea de investigación que manejan las autoridades sobre la balacera registrada ayer en la madrugada en el club nocturno Blue Parrot, en Playa del Carmen, que provocó la muerte de cinco personas.
El fiscal de Quintana Roo, Miguel Ángel Pech, aseguró que el tiroteo se originó después de que un hombre ingresara armado al club, y disparara contra una persona en particular.
En su mensaje, el gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín, atribuyó el tiroteo en el centro nocturno donde se celebraba un festival de música electrónica a un conflicto entre dos particulares.
“La intolerancia y el conflicto de interés entre dos individuos provocaron este hecho que nos llena de indignación”, dijo el mandatario estatal.
“Las primeras investigaciones señalan un conflicto personal entre dos, conllevó a que uno le disparara al otro, lo que implicó la intervención de los guardias de seguridad a quienes agredió para repelerlos”.
En el lugar del ataque, en el que al menos cinco personas murieron, se encontraron 20 casquillos, “seis calibre .38 súper, ocho calibre nueve milímetros, y seis de calibre .380”.
Esto, dijeron las autoridades, apuntan a la posibilidad de que algunos de los clientes del bar estuvieran armados y respondieran a la agresión. Con el estruendo del tiroteo, indicó el funcionario, se generó una estampida de personas que trataron de ponerse a salvo, lo cual derivó en algunos lesionados, incluyendo una mujer, quien finalmente murió.
“Hasta agotar la investigación se determinará si hubo presencia del crimen organizado”, explicó el fiscal general.
Para algunos especialistas este evento podría ser la antesala de una guerra entre los grupos del crimen organizado que buscan el control de esa región, en donde desde el 2014 la PGR reconoció la presencia de los cárteles del Golfo y Los Zetas.
De acuerdo a datos de la Procuraduría General de la República (PGR), dos grupos del crimen organizado que se disputan el control de las rutas de trasiego de drogas desde Colombia con destino a México y Estados Unidos: Los Pelones, filial del Cártel del Golfo, y el Comando Especial Zeta, del cártel de Los Zetas.
La presencia del crimen organizado en Quintana Roo, que hasta ahora se había manifestado discreta a los ojos de la opinión pública, dio muestras de su ferocidad en las estadísticas oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
El delito que más creció el año pasado en esta entidad fue robo con violencia, al registrarse un total de 4 mil 432 atracos, una de las cifras más elevadas del país, en relación con el número de habitantes.
A causa de la presencia del crimen organizado, durante el 2016 aumentaron los delitos por daños patrimoniales –extorsión, despojo, abuso de confianza, daño a la propiedad ajena y fraude– los que alcanzaron los 2 mil 513 ilícitos.
Se suma la entrada de otras células criminales, como la del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), La Familia Michoacana y el Cártel de Sinaloa.
No descartan guerra de narcos
El fiscal de Quintana Roo, Miguel Ángel Pech, reconoció que se investiga la participación de cárteles en este ataque que dejó cinco personas muertas, entre ellas, cuatro ciudadanos extranjeros.
Tierra de pandillas
En Quintana Roo existen por lo menos 84 pandillas juveniles, que de alguna manera tienen nexos con el crimen organizado, reconoció un funcionario del gobierno municipal de Benito Juárez, quien prefirió el anonimato.
En entrevista con Reporte Indigo el funcionario detalló un diagnóstico elaborado por el anterior gobierno estatal de Quintana Roo, a través de la Unidad Especializada para el Combate a la Delincuencia (UECD), determinó que en los municipios de Cozumel, Chetumal y Playa del Carmen, las pandillas juveniles son las que tienen a su cargo la comercialización de drogas en la vía pública y centros nocturnos.
Esta versión no dista con la que contiene el único informe publicado por la Secretaria de Seguridad Pública del Gobierno Federal sobre la presencia de grupos pandilleros en todo el territorio nacional, en donde se señala que solo en Quintana Roo existen al menos 150 pandillas juveniles que atentan contra la seguridad pública.
De acuerdo al funcionario del área de seguridad entre las pandillas identificadas con nexos con Los Pelones, del cártel del Golfo, se encuentran Los Caguamos, El Acapulco, Los Chiles Fritos, la Banda del Pitufo, Los Chombos, la Banda del Maybú, Los Darside y la Pandilla del Chulo, quienes tienen control sobre la venta de drogas, no solo en Cozumel, sino también en Playa del Carmen y en Cancún.
A la lista de pandillas que han trastocado la paz pública en Quintana Roo, también se suman las que tienen nexos con las células del Comando Especial Zeta, que atienden a los intereses del cártel de Los Zetas, entre las que se encuentran Los Escualos, Los Irigans, Los Kimberly, Los Pachucos, Los Ramones, Los Sur 13, los Sur 29 y Los Tóxicos.
Estas últimas, dijo el informante, son a las que se atribuyen los principales delitos al alza en los tres municipios más importantes de Quintana Roo, las que de manera frecuente se enfrentan en la vía pública por el control de los territorios de venta de droga al menudeo.
Otras pandillas que actúan sin aparente relación con células de los cárteles de las drogas, pero que también tienen presencia en las principales ciudades de Quintana Roo, son Los Pablines, Los Romero, Los Canarios, Los Sapos, Los Mocos, Los Raptors y Los Galdinos.