Semefo en BC vuelve a colapsar

El coordinador general del Servicio Médico Forense (Semefo) en Baja California, César Raúl González Vaca, indicó que las instalaciones en la ciudad de Tijuana, las cuales cuentan con una capacidad de albergue para 150 cadáveres, en la actualidad se encuentran saturadas.

Ante medios de la localidad, el funcionario explicó que la crisis de seguridad que enfrenta la entidad –una de las más graves del país, siendo Tijuana la segunda ciudad más violenta del país– y al estar rebasados con los ingresos actuales, se estudia la posibilidad en coordinación con la federación para habilitar un ala del edificio del DIF estatal como instalaciones provisionales del Semefo.

Con esta medida, González Vaca espera que la dependencia tenga la capacidad de recibir entre 100 y 150 cuerpos adicionales en los próximos días. Esto, luego de que unas fotografías en donde se aprecia una decena de cuerpos de hombres y mujeres en el piso de lo que presuntamente son las instalaciones forenses en Tijuana, causaran indignación este fin de semana en redes sociales

Sobre esto, el funcionario mencionó que las imágenes están “borrosas”, pero que se encuentran realizando las investigaciones pertinentes para emitir un posicionamiento sobre esta clara violación al protocolo de salubridad del organismo.

En descomposición

Sin embargo, la problemática del Semefo en Tijuana no es reciente. Es una crisis que se viene acumulando desde años atrás y cuyo colapso se generó a la par de la crisis de violencia que impactó la región en 2018.

En el mes de junio del año pasado, la reestructuración del Servicio Médico Forense en la entidad propició dos cambios mayores: el primero, que la titularidad del organismo se diera de manera estatal y no por direcciones de zona, como se manejó hasta entonces; el segundo, que el doctor César Raúl González asumiera las riendas de la dependencia.

No obstante, un mes después de su nombramiento, el magistrado Salvador Juan Ortiz Morales, presidente del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de Judicatura, reconoció que el Semefo enfrentaba un panorama adverso en la ciudad de Tijuana, con la acumulación de cuerpos derivado de la crisis de violencia en el estado. Esto motivó a solicitar un presupuesto con tope de 10 millones de pesos al Congreso local para subsanar la demanda.

Asimismo, para finales de año, el Semefo en la franja fronteriza acumuló una serie de quejas de vecinos de las inmediaciones, quienes se quejaron de la contaminación que generaban.

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