Revive la insurrección

El clima de tensión en esta localidad va en aumento. Los comuneros organizados en forma autónoma no descartan la posibilidad de “un alzamiento con repercusión nacional” con la única intención de que sus demandas seas escuchadas. La queja de los indígenas purépechas es sólo una: el gobierno estatal ni los ve, ni los oye.

En Cherán insisten en tomar el control de la seguridad pública en sus manos. No han recibido ninguna respuesta del gobierno estatal
En tanto la tensión crece en Cherán, el gobernador interino destaca a la prensa que Michoacán no es un estado fallido
"El gobierno nunca nos ha querido a los indios. Solo servimos para las fotos de turistas, que piensan que vivimos una vida bonita. Pero la pobreza aquí es mucha”
Ramón Mateoindígena de Cheran

El clima de tensión en esta localidad va en aumento. Los comuneros organizados en forma autónoma no descartan la posibilidad de “un alzamiento con repercusión nacional” con la única intención de que sus demandas seas escuchadas. La queja de los indígenas purépechas es sólo una: el gobierno estatal ni los ve, ni los oye.

En esta parte de Michoacán se exige una mayor presencia de las fuerzas armadas federales, que venga a poner fin a la incertidumbre con la que viven los vecinos de esta comunidad enclavada en el corazón de la zona indígena del estado, en donde el reclamo también es el sentido de una participación más activa del gobierno estatal que ayude a generar empleos en la zona.

Aquí la pobreza lacera, dado que el índice de desempleo es de los más altos de todo el estado, con una población que raya por encima de 55 por ciento sin ocupación fija permanente, en tanto que la población económicamente activa se desempeña en áreas como la agricultura, ganadería, explotación maderera y manufacturas artesanales, la mayoría de ellos sin ningún esquema de apoyo oficial que les permita un envejecimiento digno, ya no digamos una pensión para el retiro.

El elevado índice pobreza de esta región, paradójicamente rica en recursos naturales, es lo que lleva a Ramón Mateo, viejo del pueblo, a reflexionar sobre el la labor del gobierno estatal y el abandono en el que se sienten los vecinos de la localidad.

No nos quieren –dice convencido, mientras le da un sorbo a la coca-cola que acaricia tembloroso con sus manos viejas y callosas-. El gobierno nunca nos ha querido a los indios. Solo servimos para las fotos de turistas, que piensan que vivimos una vida bonita. Pero la pobreza aquí es mucha.

Ramón Mateo, con sus casi 72 años de edad, con dificultad para caminar, con una guadaña que se asoma tímidamente desde su morral que carga de su lado izquierdo, forma parte de la policía comunitaria de Cherán. No se desvela vigilando caminos ni haciendo guardias, pero se mantiene atento a lo que pasa en el pueblo para dar la voz de alerta ante cualquier alteración al orden público.

-El Concejo nos dijo que estemos muy al pendiente –explica-, porque las cosas se pueden poner difíciles.

La voz de aviso ya se ha dado entre todos los vecinos: “estar alertas para cualquier llamado que se haga”, donde se contempla en primera instancia el cierre de los caminos de acceso que comunican a Cherán con el resto de la meseta purépecha, en donde los pobladores se siguen lamentando de la inseguridad que tienen que vivir todos los días.

El Concejo Mayor –máxima representación de la autoridad comunal indígena que gobierna el municipio en forma oficial- ha expuesto la desconfianza que le tienen al gobierno estatal en materia de seguridad pública, al solicitar por medio del diálogo la expulsión, de suelo indígena, de un grupo de policías ministeriales y una representación del Ministerio Público, a quienes –se dijo oficialmente-, se les perdió la confianza.

-Son muchas cosas por las no confiamos en el gobierno estatal –contesta el indígena a pregunta expresa-. Sabemos que no existimos para el gobierno. Nos siguen viendo como algo que sirve para traer turistas al estado, pero somos algo más que eso. Somos gentes que necesitamos muchas cosas… trabajo, seguridad, empleo (sic), doctor y medicinas. Necesitamos mucho y el gobierno no nos da nada.

El cúmulo de necesidades es grande en esta localidad, como en diversos puntos del territorio estatal, pero lo que más demandan los vecinos de este lugar. Al menos, lo que los ha llevado a mostrarse de nueva cuenta en plena inconformidad con el gobierno estatal es la falta de atención a las averiguaciones sobre los comuneros asesinados y desaparecidos.

Los habitantes de Cherán insisten en tomar el control de la seguridad pública en sus manos. No han recibido ninguna respuesta del gobierno estatal a sus demandas presentadas en la reunión que sostuvieron con el gobernador interino Jesús Reyna García desde el pasado 26 de mayo. El lamento indígena es generalizado: No hay avances en las investigaciones sobre 18 comuneros muertos o desaparecidos.

-No nos dicen nada sobre lo que pasó con nuestros muertos y desaparecidos –explica Ramón Mateo, dejando la mirada perdida a lo lejos, entrecerrando los ojos como si tratara de enfocar alguna imagen que no es otra cosa que una polvareda que levanta una camioneta que circula por la calle terregosa-. Necesitamos saber en dónde están los desaparecidos.-Insiste.

En Cherán se demanda una estrategia de seguridad que incluya la participación de los vecinos del lugar. No le tienen la confianza suficiente al gobierno para dejar en sus manos la garantía de sus personas y sus bienes, eso ya les ha costado 13 muertos y 15 desaparecidos, de los cuales, en 18 casos no saben a bien el curso de las investigaciones oficiales y el gobierno estatal no atina a ofrecerles una explicación puntual.

Los indígenas purépechas se lamentan que ahora el gobierno interino de Jesús Reyna trate de aparentar una total calma en el estado, mediante el uso de algunos medios de comunicación, tratando de mandar a todo el país una imagen que no coincide con la realidad, sepultando en el olvido las demandas de los vecinos de Cherán, que se han dicho dispuestos a seguir con su lucha de resistencia.

En tanto la tensión crece en Cherán, el gobernador interino Jesús Reyna destaca a la prensa internacional que Michoacán no es un estado fallido. Enfatiza que las dependencias estatales están “prestando sus servicios” con normalidad y mantienen el ritmo de trabajo que demanda la sociedad. Reconoce que “hay ciertas dificultades” en algunos puntos de Michoacán, pero resalta que “el estado no es ingobernable”.

Su oficina de prensa –bajo la consigna de mostrar un estado mediático en calma- emite sendos comunicados oficiales en donde lo mismo da cuenta de acciones a favor del empleo para los jóvenes que eventos de promoción a la salud, y destaca como un logro la declaratoria de la secretaría de salud en la entidad que señala como espacio 100 por ciento Libre de Tabaco a la Delegación Regional del Instituto Mexicano del Seguro Social.

Las principales acciones del gobierno interino de Michoacán se han centrado en actos oficiales que se llevan a cabo en la cabecera municipal de Morelia, en donde es evidente una calma y una seguridad que no se puede presumir en diversos puntos del territorio, donde el menor de los problemas es la falta de trabajos de infraestructura, falta de inversión en el campo o la emigración hacia Estados Unidos de cientos de jóvenes sin empleo ni posibilidad de educación superior en sus localidades.

Cherán es la única localidad de Michoacán en donde opera una policía comunitaria. Aquí no se nombran grupos de autodefensa como en otros puntos del estado. La policía comunitaria está bajo las instrucciones del Consejo Mayor que es la figura de gobierno que rige el destino de esta población indígena, bajo el principio de usos y costumbres ancestrales.

-Nosotros ya somos independientes –dice Ramón Mateo-. Eso no le gusta al gobierno estatal y por eso no han abandonado. Pero vamos a lograr que alguien mire hacia notros y nos vamos a levantar otra vez, como el pueblo purépecha que hemos sido.

Este el primer municipio independiente de partidos políticos y elecciones oficiales. El alzamiento de los vecinos de esta localidad se inició el 15 de abril del 2011, cuando fue disuelto el ayuntamiento y en su lugar se integró el Concejo Mayor, con la representación de los cuatro barrios que integran la localidad, mediante una elección abierta en la plaza principal.

El 2 de noviembre de ese mismo año, se oficializó la independencia de esa localidad indígena con una sentencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación que reconoció el derecho de los vecinos de Cherán a elegir a su propio gobierno conforme a sus usos y costumbres, al margen de las elecciones entre partidos, arbitradas por el Estado.

-¿Dicen que habrá un alzamiento?

– ¿Apoco no lo ves? -Contesta Ramón Mateo, mientras tira la botella de coca-cola en un bote de basura y saca su guadaña del morral, para seguir con su recorrido de vigilancia.