Pedreras: la batalla simulada en Nuevo León

La supuesta cruzada del Gobierno del Estado en contra de las pedreras, una de las principales fuentes de contaminación atmosférica en la ciudad, presenta situaciones de conflicto de interés y de simulación por parte de la administración del gobernador Jaime Rodríguez.

Las empresas de extracción y trituración de caliza en Nuevo León han contratado como asesor a José Luis Tamez Garza, extitular de la Agencia de Protección Ambiental en Nuevo León y exdelegado de la Semarnat.

Ambientalistas calculan que el área metropolitana tiene un déficit de un millón de árboles
“Son mentirosos… son socios ‘El Bronco’, Roberto Russildi y Salomón Marcuschamer”
Guillermo MartínezEcologista

La supuesta cruzada del Gobierno del Estado en contra de las pedreras, una de las principales fuentes de contaminación atmosférica en la ciudad, presenta situaciones de conflicto de interés y de simulación por parte de la administración del gobernador Jaime Rodríguez.

Las empresas de extracción y trituración de caliza en Nuevo León han contratado como asesor a José Luis Tamez Garza, extitular de la Agencia de Protección Ambiental en Nuevo León y exdelegado de la Semarnat.

Hace nueve años, Tamez Garza, siendo director de la Agencia Estatal de Protección al Medio Ambiente en el sexenio de Natividad González Parás, implementó una norma ambiental para regular las emisiones contaminantes de las pedreras.

Hoy, nueve años después, Tamez Garza se cambió de bando y ahora defiende a estas empresas aglutinadas en la Asociación de Extractores de Caliza.

José Luis Tamez Garza, asesor de las pedreras de Santa Catarina, cuenta con un pasado oscuro en temas de contaminación por la empresa Pigmentos y Óxidos, S. A. (Pyosa), que afectó a cientos de residentes de San Nicolás.

Tamez Garza, quien estuvo como delegado de la Profepa en 2004, fue acusado por los vecinos de ocultar exámenes médicos de habitantes de las colonias Tabachines, Balcones de Anáhuac y Getsemaní.

Varios colonos resultaron con plomo en la sangre por contaminantes de la empresa Pyosa.

En ese entonces, a dos mujeres de 18 años se les extirparon los senos por cáncer, se tuvieron casos de niños con columna bífeda (doble) y 22 familias que tienen 24 casos de niños especiales.

También se reportó la muerte de seis personas por cáncer y supuestos paros cardiacos en residentes de la calle Nogales, de la colonia Tabachines.

Ahora, José Luis Tamez Garza intenta convencer de que las pedreras no son las principales contaminantes en Nuevo León, y dice que los automóviles son el verdadero problema de la mala calidad del aire.

En medio de esta situación cuestionable se encuentra Roberto Russildi, secretario de Desarrollo Sustentable del Estado, con vínculos con la empresa desarrolladora Casas Javer.

Conflicto de intereses

Aunque “El Bronco” prometió en su primer informe de Gobierno cerrar las industrias trituradoras de caliza, que producen emisiones contaminantes, esto ha quedado en el discurso mediático.

“En este momento instruyo al secretario de Desarrollo Sustentable ordene las visitas a estos establecimientos y, como medida de seguridad, suspenda las actividades generadoras de contaminación”, dijo el gobernador.

Discurso en beneficio de las pedreras, pues solo ha generado incertidumbre por la posible disminución de producción del material para construcción, y con esto el precio del producto se ha encarecido en las últimas semanas.

Además, las pedreras continúan dinamitando la zona, ocasionando un aumento en la contaminación, aseguran vecinos de Santa Catarina, quienes hicieron circular videos en redes sociales.

Pero esta débil acción contra las pedreras tiene una explicación.

Existe un grupo de funcionarios convertido en aliados a favor de estas empresas, que son las principales contaminadoras del aire en el área metropolitana, mucho más que los vehículos, aseguran expertos en ecología. 

Se trata de Roberto Russildi Montellano, titular de la Secretaría de Desarrollo Sustentable y accionista de Casas Javer; José Luis Tamez, asesor de las pedreras y exfuncionario estatal.

Erika Salinas, quien trabaja como jurídica en la Secretaría de Desarrollo Sustentable y fue funcionaria de la Semarnat; y Rolando Hugo García Rodríguez, funcionario de la Secretaría de Obras Públicas y yerno de Alfredo Villarreal, dueño de Triturados El Roble.

Esta última empresa es la principal productora de material para construcción en Nuevo León, lo que la haría una de las más contaminante del medio ambiente en el área metropolitana.

Esto pone sobre la mesa del debate la influencia del yerno para que la empresa Triturados El Roble se convierta en la consentida del gobierno de Jaime Rodríguez “El Bronco”. Actualmente no ha sido cerrada.

Para el ecologista Guillermo Martínez Berlanga, el Gobierno independiente está en un claro conflicto de interés.

“Son mentirosos… son socios ‘El Bronco’, Roberto Russildi y Salomón Marcuschamer, y tendrán que soportar la embestida de los ecologistas y de los ciudadanos, que ya estamos hasta la madre que el gobernador diga mentiras.

“Nosotros pedimos que no pusiera a Russildi por conflicto de intereses, pero el gobernador nos dijo que era un chingón administrador, sí, pero pone un experto en el tema ambiental”, consideró el ecologista.

Sin política de reforestación

En la lógica del Gobierno independiente no está combatir la contaminación con una reforestación de arbolado, pero sí está cobrar más impuestos a la ciudadanía con la verificación vehicular.

Hoy en día, el gobernador Jaime Rodríguez “El Bronco” ni siquiera ha promovido un proyecto que lleve a sembrar miles de árboles para formar verdaderos “pulmones” urbanos, que ayuden a limpiar el aire del área metropolitana.

Expertos en materia ambiental aseguran que en el área metropolitana hacen falta más de un millón de árboles para frenar un poco la contaminación.

“Por qué se han negado en 15 meses a lanzar una campaña de reforestación masiva en el área metropolitana, ¿sabes por qué?, porque no es negocio… a la zona metropolitana le hacen falta un millón de arboles.

“Con eso cabría la posibilidad de no tener tanta contaminación en temporada invernal, los árboles producen oxígeno y recogen el CO2… eso ya lo pudieron haber hecho, y esto es para mantener a raya la contaminación”, dijo el ecologista Guillermo Martínez Berlanga.

Son pocos los árboles sembrados en los municipios, que si bien tienen campañas de reforestación y buscan crear más áreas verdes, esto resulta insuficiente para poder luchar por una ambiente libre de emisiones contaminantes.

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