
El panorama que le espera a Donald Trump en su segundo gobierno
El presidente republicano deberá lidiar la herencia de Joe Biden en materia de migración y una economía que no ha podido recuperarse desde la pandemia, aunado a las guerras y la política exterior
Fernanda Muñoz y Pablo AbundizDonald Trump vuelve hoy a la presidencia de Estados Unidos, esta vez como el jefe de Estado número 47 y bajo un panorama nacional e internacional distinto al que lo recibió ocho años atrás.
A diferencia de 2017, actualmente el mundo superó una pandemia por COVID-19 que, en su momento, le dejó fuertes críticas a Trump por minimizar la situación y compararla con una “temporada de gripe”. Ahora, el republicano regresa frente a una población inmunizada, pero con los estragos económicos que heredó la crisis sanitaria.
Desde que la pandemia golpeó la economía mundial, Estados Unidos no ha logrado recuperarse del todo. En diciembre pasado, por ejemplo, la inflación cerró en 2.9 por ciento, de acuerdo con la Oficina de Estadísticas Laborales; un nivel por encima de lo que se esperaba de dos por ciento.
Fue el resultado económico que dejó Joe Biden lo que pudo arrebatarle a los demócratas una presidencia más, al considerar que es la economía uno de los temas que más interesan a los electores.
Para recuperar la economía nacional, durante su campaña, Trump prometió subir los aranceles a productos importados, fomentar la industria del petróleo y endurecer las deportaciones para reducir la cantidad de inmigrantes no autorizados en la fuerza laboral.
Donald Trump’s economic plan will make life more expensive for middle-class and working families. pic.twitter.com/1oZXHeNejg
— Kamala Harris (@KamalaHarris) September 24, 2024
Trump intentará recuperar la economía estadounidense mientras dirige a su Estado como mediador de dos guerras, la de Ucrania y Gaza; conflictos que Biden no dejó atrás con el apoyo económico y militar al gobierno ucraniano y proponiendo planes de pacificación en Gaza.
Según declaraciones del magnate, ambas guerras no hubieran iniciado si él estuviera en la presidencia; sin embargo, no se han expuesto sus planes para terminar con ambos conflictos.
Las relaciones con sus socios de América del Norte también estarán en la nueva agenda de Trump, quien se ha dirigido a sus homólogos, Claudia Sheinbaum y Justin Trudeau, con declaraciones poco agradables para ambos, como que aplicará un nuevo nombre para el Golfo de México, que regresará con políticas más estrictas para expulsar a migrantes hacia nuestro país e incluirá a su vecino del norte como un estado más de su territorio.
Así, Trump inicia su segundo cuatrienio con retos internos y externos, sumando en su contra 34 cargos por el caso de Stormy Daniels, el cual lo persiguió desde que terminó su primer gobierno.
Guerras en Gaza y Ucrania, el primer reto global de Trump
El republicano regresa a la Casa Blanca después de cuatro años en los que la relevancia de Estados Unidos en el escenario mundial entró en cuestionamiento ante dos guerras, la de Gaza y Ucrania.
Sin embargo, el regreso de Trump también representa el arribo de Stephen Miller como asesor, Kristi Noem a cargo del Departamento de Seguridad Nacional y Marco Rubio como secretario de Estado, perfiles de la derecha estadounidense conocidos por su posición conservadora, pero que intentarán auxiliar al mandatario ante los dos conflictos.
Al respecto, la doctora Arlene Ramírez Uresti, internacionalista y docente en la Universidad Iberoamericana, considera que las agresivas posturas de Trump ante las guerras son en respuesta a una política exterior mal calificada del gobierno de Joe Biden.
“La coherencia (en política exterior) se da en la retórica agresiva. Trump está perfilado no a ejercer un liderazgo global como lo había hecho Estados Unidos en otras épocas, pues hoy los desafíos que tiene lo llevan a mostrarse como un líder diferente a Joe Biden, y ahí radica su congruencia al hacer amenazas directas con la finalidad de posicionarse rápido en el escenario internacional”, anota la especialista.
📰👇🏻 #INExpress | Murió el exlíder del Sindicato de Pemex, Carlos Romero Deschamps; Joe Biden solicitó ayudar a Israel y a Ucrania con millones de dólares; Incrementaron a más de 4 mil muertos en la Franja de Gaza
Infórmate de esto y más con @adymoss pic.twitter.com/Gu85V4wn4n
— Reporte Índigo (@Reporte_Indigo) October 20, 2023
Una de las mayores crisis en materia de política exterior heredadas de la administración pasada es el conflicto Rusia-Ucrania. Durante el gobierno de Biden, Estados Unidos proporcionó más de 61 mil millones de dólares para la defensa de Ucrania, uno de los puntos más criticados de la administración, y se espera que Trump termine con esa política.
“Esta guerra le ha costado bastante a Estados Unidos y lo que hoy estamos viendo, la presión arancelaria y al interior de la Unión Americana, es que el país llega a manos de Trump en una recesión técnica; entonces, a él le interesa que el conflicto termine para dejar de suministrar recursos financieros y estratégicos a la región”, señala la doctora Ramírez Uresti.
Sobre el acuerdo de cese al fuego entre Hamás e Israel, otra crisis detonada durante los años de Biden, será responsabilidad de la administración Trump ejecutar las fases propuestas por el equipo de su antecesor y evitar un reinicio de hostilidades que amenace con volver a engullir Medio Oriente.

Es en esa región del mundo, donde la doctora Ramírez Uresti señala que se encuentra uno de los más grandes retos para Trump durante los próximos años, pues después de 15 meses de guerra entre Israel y Hamás la desestabilización de la región tiene un jugador clave en el régimen de los Ayatolá.
“Irán, aparte de China y Rusia, es otro de los temas más importantes para el mundo. La amenaza latente a partir de la desestabilización de Medio Oriente, del debilitamiento de Hezbolá y Hamás y la reconfiguración de los bloques de poder, llevan a poner el foco en Irán, un país con crisis internas y al que a Estados Unidos le ha costado mucho trabajo”, declara la académica.
Canadá y México, socios con “conflictos”
Con Donald Trump al frente de Estados Unidos, su agenda en política exterior sin duda incluirá la relación con sus vecinos del norte y sur, Canadá y México.
Con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, Trump se ha reunido en más de una ocasión, incluso durante su primer gobierno, lo que cambiará en el último trimestre de este 2025 cuando Canadá celebre elecciones generales y el político liberal sea relevado.
El maestro Alejandro Martínez Serrano, especialista en Relaciones Internacionales de la Universidad La Salle, asegura que fue la cercanía de Trudeau con Trump, después de la advertencia del republicano de imponer aranceles a Canadá y México del 25 por ciento, lo que pudo orillar a su dimisión.

“Trudeau anunció su renuncia al cargo por la baja popularidad y la crítica que recibió por su acercamiento con Trump. Se vio un sometimiento del primer ministro y, como respuesta, Trump vio en Canadá la opción de incorporarlo como su estado 51”, opina el académico.
A diferencia del caso del ministro canadiense, el maestro Martínez Serrano resalta que la presidenta Sheinbaum debería invitar a Trump a Ciudad de México para reunirse con él en Palacio Nacional, o en otro caso ella liderar una visita de Estado a Washington para verse en la Oficina Oval de la Casa Blanca.
“Sería más benéfico acudir de forma oficial y hablar cara a cara con el nuevo presidente, no como lo hizo Trudeau yendo a la residencia de Trump, lo que quedó en la informalidad”.
Pese a las advertencias del nuevo inquilino de la Casa Blanca a sus socios norteamericanos sobre el incremento de aranceles, llamar Golfo de América al Golfo de México y sumar a Canadá como su estado 51, los tres países están más que unidos por el T-MEC.
El Tratado, que representa el 30 por ciento del PIB mundial de acuerdo con datos del Gobierno de México, podría volver a negociarse bajo “un trato agresivo”, así lo prevé el maestro Martínez Serrano.
#IndigoTrend | Ante la inminente llegada de migrantes deportados de Estados Unidos, la Ciudad de México busca habilitar predios incautados a la delincuencia como albergues. https://t.co/wShYvIOb44 pic.twitter.com/IxWi6kZN91
— Reporte Índigo (@Reporte_Indigo) January 15, 2025
“Trump hace ocho años tomó la iniciativa de renegociar el documento y, en términos prácticos, actualizar temáticas que durante los años 90 no estaban contemplados, como el comercio electrónico; sin embargo, Trump aseguró que no estaba dándoles resultados a la economía, a los empresarios ni a los trabajadores estadounidenses, con lo que preveo un nuevo trato muy agresivo”, declara el maestro.
El control migratorio será otro tema que, particularmente con México, el magnate entablará con la doctora Sheinbaum, quien ha enfatizado en más de una ocasión que el trato a los migrantes debe mantenerse bajo un cuidado humano, seguro y ordenado.
De acuerdo con datos de la Unidad de Política Migratoria del Gobierno de México, de enero a octubre del 2024 un total de 173 mil 397 mexicanas y mexicanos fueron devueltos desde Estados Unidos, personas que pueden volver a intentar cruzar ilegalmente a la Unión Americana, al igual que las 16 mil 474 que fueron devueltas por autoridades migratorias mexicanas desde nuestro país de enero a agosto del año pasado, la mayoría de Venezuela.
Trump, un criminal convicto
El mismo día que Donald Trump asume la presidencia de Estados Unidos no solo se convierte en el presidente número 47 de su país, sino también en un criminal convicto.
El pasado 10 de enero, el juez Juan Merchan condenó al empresario a “libertad incondicional” por los 34 cargos de falsificación de registros comerciales por el caso de Stormy Daniels, de los que había sido encontrado culpable el año pasado.
A la decisión del juez de no otorgar una pena punitiva subyace la doctrina estadounidense de independencia del ejecutivo, por lo que en su condena, Merchan aclaró que “para no entorpecer” las funciones presidenciales se otorgaba la libertad incondicional.
Pese al resultado favorable, el equipo legal de Trump argumentó en más de una ocasión que el fallo de la Suprema Corte de Justicia en el caso Trump vs United States, en el que se entró a revisión el concepto de inmunidad presidencial, debía aplicarse.

Al respecto, el doctor Joel Peña Llanes, internacionalista del Centro de Relaciones Internacionales de la UNAM y doctor en Derecho por el Instituto de Investigaciones Jurídicas, explica que este caso asienta la inmunidad presidencial absoluta para todos los actos que generen sus funciones constitucionales, por lo que el jefe del Ejecutivo no puede ser procesado por las acciones oficiales y en alguna medida por actos secundarios que se deriven de sus responsabilidades oficiales.
Sin embargo, el doctor Peña Llanes aclara que este fallo también establece una diferencia entre los actos oficiales de la presidencia y los actos privados de quien la ocupa, por lo que de cometer algún acto ilícito dentro de su mandato, Trump podría ser juzgado una vez abandone el cargo.
“La Corte aclara que los actos no oficiales, aquellos que no están relacionados con sus funciones como presidente, no están cubiertos por la inmunidad presidencial, por lo que sí puede ser procesado por conductas privadas o no oficiales incluso si estas se llevaron a cabo durante su mandato”, explica el académico.
A pesar de que la victoria electoral que podría significar para Trump el fin de sus problemas legales, el fallo de la Corte respecto a los actos no oficiales podría revivir el caso de “Conspiración para defraudar a los Estados Unidos”; abierto contra el magnate por su participación en los disturbios del 6 de enero de 2021.
Según el reporte final del fiscal Jack Smith, los hechos violentos durante el intento de impedir la certificación electoral de Joe Biden fueron responsabilidad de Trump, por lo que una continuación del caso sería posible.
“Si nosotros analizamos el caso del Capitolio, no puede ser considerado un acto oficial porque Trump no lo ejerció apegado a las funciones constitucionales que se le atribuyen por ser titular del Ejecutivo, es un acto privado que aparte se considera ilícito; entonces, partiendo de la idea de que nadie puede estar por encima de la ley y que la Corte ya dictó que los actos privados no están amparados por la inmunidad presidencial, eventualmente tendría que ser llevado frente a la justicia”, finaliza el doctor Peña Llanes.