¿Movimiento childfree enmascara odio a los niños?

29 de Nov, 2019

En un mundo donde el término ‘friendly’ acompaña diversos prefijos como ‘eco’, ‘pet’, entre otros es extraño encontrar, cada vez más, sitios en los que los niños tienen el acceso prohibido.

Lo que pareciera ser una estrategia de mercadotencia inteligente, pues los comerciantes ofrecen diversos servicios en los que el consumidor se podrá ver libre de niños, se ha convertido en un movimiento radical dentro de las autonombradas personas childfree.

Personas se agrupan, a través de las redes sociales, en comunidades con la etiqueta de ser ‘childfree’, es decir, ser individuos que no buscan tener descendencia.

Sin embargo, al interior de estos grupos existen personas que no sólo buscan vivir una vida libre de hijos, sino que exigen que no haya presencia de ellos en los espacios públicos.

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Childfree la vida sin hijos ¿y sin niños?

Los movimientos childfree no son nuevos, desde hace años circulan en redes sociales agrupaciones de personas con un objetivo en común: no traer más hijos al mundo.

Actrices como Cameron Díaz, Jennifer Aniston o la célebre conductora Oprah Winfrey forman parte del llamado movimiento NoMo (No Mother), mujeres que no desean ser madres a pesar de los estándares impuestos a mujeres por la sociedad.

Grupos de Facebook como Childfree México, Sin hijos por Elección la vida Childfree y Childfree Zone agrupan miles de personas que no desean vivir la experiencia de cambiar pañales a media noche, vivir en incertidumbre constante y terminar con su estilo de vida.

Alejandra, una joven licenciada en Relaciones Internacionales, es una de ellas, ¿sus razones para no tener hijos? son varias y algunas de ellas no son nada ‘egoístas’, tal y como la califican algunas de las personas que la instan a reproducirse.

“Tengo muchos argumentos a favor y uno en contra de no tener hijos, en realidad me parece irracional tener hijos pues todo está en su contra”.

Alejandra, quien se dedica a labores referentes a la mitigación del cambio climático, menciona que tener hijos es la forma de duplicar o hasta triplicar la huella hídrica, de emisiones carbono y en general de contaminantes que puedes tener en el planeta.

“No sólo es como ‘un poquito más de papel, sino un ser que come carne, usa el automóvil, entre otros servicios y bienes que causan contaminación”.

La joven considera que no tener descendencia es un acto de amor a favor de sus probables hijos debido a las condiciones actuales climatológicas.

Aunado a estos argumentos Alejandra considera que las condiciones laborales actuales, a pesar de estudiar una carrera universitaria, tampoco permiten tener certeza para mantener sin problemas a un bebé.

También las condiciones sociales, como la proliferación de movimientos ultranacionalistas de derecha e izquierda, preocupan a la internacionalista.

“Si lo amaría con toda mi alma y deseo lo mejor para él por qué decidiría traerlo a este escenario. En resumen, no tener hijos en un acto de amor”, menciona.

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Pedofobia, el odio a los niños

El odio a los bebés y niños es un padecimiento real conocida como pedofobia.

Las personas que viven con este padecimiento sienten un miedo irracional a estar en compañía de niños y bebés, llegando a sufrir episodios de ansiedad.

Algunos de los síntomas que acompañan al pedofóbico al estar cerca de niños es hipertensión, dolor en el pecho, pesadillas e incluso vómitos.

Las razones para no tener descendencia son variadas y aunque ninguna pareciera tener fundamento en el odio a los menores de edad a algunos adultos se les hace insoportable convivir con niños y adolescentes menores de 14 años.

La radicalización del movimiento childfree, gente que desea tener una vida libre de hijos y de niños, podría tener origen en este padecimiento.

Cristina, una estudiante de 21 años de edad, no tiene un diagnóstico certero pero sus síntomas corresponden a alguien que padece pedofobia.

“Odio a los niños desde que era niña”, menciona entre risas.

Cristina tiene 3 sobrinos, de entre 3 y 11 años de edad, a los que le es difícil tolerarlos, pues simplemente no puede estar en el mismo espacio en el que ellos están cuando visitan la casa de sus padres, en donde ella aún vive.

“Sé que no quiero tener hijos porque la sola idea me causa repulsión, convivir con mis sobrinos cuando visitan a mis papás se me hace súper complicado apenas puedo soportarlo”, dice.

Tener descendencia es algo que jamás ha estado o estará dentro de sus planes, sabe muy bien que no tiene la paciencia ni las ganas para cuidar a un pequeño ser totalmente dependiente de ella.

“Yo quiero seguir estudiando, trabajar, viajar, disfrutar de la vida y la verdad es que yo o veo con mi hermana, un hijo te ata para siempre e incluso te puede hacer infeliz”, concluye.

Exigencia de espacios públicos childfree ¿es válida?

Los lugares que ofertan paz y tranquilidad lejos del bullicio que causan las risas, berrinches y correteos de los niños cada vez van en aumento en el mundo y mexicanos childfree desean que sean una realidad en México.

Aunque existen numerosos hospedajes en los que la presencia de niños está terminantemente prohibida, además de clubes de playa y restaurantes en sitios vacacionales, los childfree buscan espacios donde puedan comer tacos, beber un café o leer un libro en lugares libres de niños.

Sin embargo, los miembros radicalizados de este movimiento incluso sugieren que deben existir espacios públicos; como parques, transporte, museos, libres de menores de edad.

En diversas páginas de Facebook, como Childfree zone, los usuarios pugnan por espacios libres de niños; como cafés, cines y restaurantes, otros incluso expresan sus deseos por comprar en almacenes donde la entrada a niños no esté permitida.

Usuarios de redes a favor de la presencia de niños en espacios públicos, como la página Frente Feminista Radical Guadalajara, de vez en cuando comparten mensajes de las personas que piden que los espacios childfree no se limiten a bares y lugares de entretenimiento nocturno.