Los infiltrados
Con nueve días de anticipación a la marcha conmemorativa del 2 de octubre, los anarquistas “infiltraron” a la policía de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal y revelaron sus claves de comunicación interna, armamento que utilizan, equipo de protección y hasta los esquemas de contención y ataque.
Los anarquistas se propusieron conocer a detalle a su enemigo para saber sus puntos vulnerables y ahí atacarlos. Lo consiguieron.
Icela LagunasEl GDF ubica a Jessie Montaño como uno de los más violentos anarquistas que participa activamente en las marchas
A través de redes sociales, el grupo convocó a prepararse para la ofensiva a través de un manual del estudiante movilizado
El Bloque Anarko contra Inteligencia creó un espacio para exhibir la preparación de los granaderos y Policía Bancaria
Con nueve días de anticipación a la marcha conmemorativa del 2 de octubre, los anarquistas “infiltraron” a la policía de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal y revelaron sus claves de comunicación interna, armamento que utilizan, equipo de protección y hasta los esquemas de contención y ataque.
Los anarquistas se propusieron conocer a detalle a su enemigo para saber sus puntos vulnerables y ahí atacarlos. Lo consiguieron.
La embestida del pasado 2 de octubre en contra de los granaderos fue más agresiva por parte de los anarquistas, a pesar de que el gobierno capitalino también los sorprendió con policías infiltrados, vestidos de civil.
Cada marcha que pasa, los llamados anarquistas consiguen hacer más daño a la policía del DF. El objetivo específico son los granaderos, contra quien descargan su furia.
Esta vez el llamado “Bloque Anarko Contra Inteligencia”, como se conoce a la página en Facebook de los anarquistas, exhibió en dicho sitio que buscó en las entrañas de la policía, pues subió algunos videos internos de cómo se capacita a los granaderos y elementos de la Policía Bancaria Industrial (PBI) para contener a manifestantes.
Este fue el argumento de los anarquistas para justificar su llamado a preparar cocteles molotov, petardos de fabricación casera, máscaras antigases y pasamontañas. Objetivo: atacar a los granaderos.
“Dado los eventos que se han suscitado, la represión hacia los maestros en el desalojo del Zócalo, las detenciones arbitrarias del pasado 1DMX (1 de diciembre, día de la toma de protesta de Enrique Peña Nieto); 1SMX y 13SMX (primer informe presidencial de Peña) y el 13SMX (desalojo de los maestros de la CNTE del Zócalo capitalino)”.
El Bloque Anarko “Se ha dado a la idea de crear un espacio donde puedan ver cómo se organizan las fuerzas represoras. Como siempre el Estado ha contado con fuerzas represoras, en diferentes partes del mundo se les conoce como carabineros o policía antidisturbios, aquí en México se les conoce como granaderos”.
Una vez que ubicaron a los granaderos como su principal objetivo, los anarquistas plantearon la necesidad de “entender cómo actúan, cómo se organizan, con qué equipo cuentan para responder ante ellos”, escribieron el pasado 23 de septiembre, fecha en la que públicamente iniciaron su preparación para el enfrentamiento del pasado 2 de octubre.
En la oficina del secretario de Gobierno del GDF, Héctor Serrano, se monitorea desde hace tiempo a estos grupos a través de las redes sociales, a fin de conocer sus convocatorias y planes de movilización.
Sin embargo, la anticipada preparación que tuvieron los anarquistas sorprendió a los granaderos, quienes esta vez fueron víctimas de una lluvia de cocteles molotov y petardos que incendiaron sus uniformes, provocándoles quemaduras a algunos de ellos.
A pesar de que esta vez el gobierno capitalino también lanzó la contraofensiva de infiltrar a policías vestidos de civil, a quienes se observó realizar detenciones de los llamados anarquistas.
Pero los anarquistas fueron más allá. Abiertamente, a través de esta página, convocaron a su grupo a prepararse para la ofensiva a través de un “manual de autodefensa” y “manual del estudiante movilizado”.
“¡Lean, entiendan, estudien, analicen el presente, el presente trabajo, enriquézcanlo ya que los tiempos requiere organización para contrarrestar al enemigo!, insisten.
El 1 de octubre, un día antes de la marcha que recuerda la masacre estudiantil de 1968, para la cual se prepararon, los anarquistas difundieron videos del curso “Antimotines” que toman los granaderos al interior de las instalaciones de la SSPDF.
En el video se observa en pleno entrenamiento a los elementos capitalinos, cómo forman una valla con sus escudos para protegerse de las piedras que un supuesto grupo de vándalos les lanza durante la simulación de un enfrentamiento.
En un segundo video, también grabado dentro de las instalaciones del agrupamiento de la SSPDF, se exhiben las tácticas que emplean los uniformados para el encapsulamiento y cerco a los manifestantes.
Titulado “PBI en curso de granaderos”, las imágenes exhiben una práctica llamada “Formación en línea de escuadras para acorralar y cercar a manifestantes”.
Lo mismo ocurre con un tercer video, que presuntamente bajaron del canal Youtube que demuestra las tácticas antimotines que aplica la Policía Federal.
En medio de esta casi guerra declarada a los policías, los anarquistas convocan a cubrirse el rostro para evitar que a través de las cámaras de video o de los policías, el gobierno capitalino logre identificar a sus líderes.
“Es por ello que la capucha es indispensable para protegerse y evitar la identificación de cada uno de los manifestantes”.
Después del encontronazo del 2 de octubre queda claro que, anarquistas y gobierno del Distrito Federal, se declararon la guerra.
Uno y otro se estudian, se miden y planean cómo contrarrestarse.
Desde las entrañas del equipo de Miguel Ángel Mancera Espinosa se espía a los líderes y ellos, por su lado, ubican por nombre a mandos, los estudian y planean cómo atacarlos.
Así como el GDF ubica a Jessie Montaño como uno de los más violentos anarquistas que participa activamente en las marchas que ocurren en la ciudad, los anarquistas también ya ubican a los jefes policiacos de la SSPDF que ejecutan los dispositivos.
De ahí que el subsecretario de la SSPDF, Luis Rosales Gamboa, conocido como “Jefe Apolo” esté en la mira de los anarquistas. Desde hace tiempo lo ubican como el brazo ejecutor de lo que ellos llaman “represión policiaca”.
En más de una vez, Luis Rosales ha sido cercado por los manifestantes. En su edición “El superviviente Jefe Apolo”, Reporte Indigo dio a conocer que luego de las movilizaciones del 1 de diciembre, todavía en la administración de Marcelo Ebrard Casaubón, el mando policiaco quedó en la mira de los anarquistas, pues lo responsabilizaron de las detenciones arbitrarias de ese día.
El pasado 2 de octubre se vengaron. El llamado “Jefe Apolo” fue uno de los lesionados por parte del GDF.
Después de ese enfrentamiento, uno y otro lado de la batalla se preparan para el próximo enfrentamiento. Seguros de que lo habrá. Cada uno se ufana de sus aciertos, de lo que resultó exitoso en la última batalla.
Por parte de los llamados anarquistas, a través de las redes sociales, celebraron con éxito el uso de bombas molotov y haber alcanzado con proyectiles al “Jefe Apolo”.
Mientras que por el lado del GDF se aplicó con relativo éxito el factor sorpresa de los policías de civil que se infiltraron para capturar a los anarcos.
Como parte de la ruta que ya se conoce. Los jóvenes ya preparan las colectas para reunir el dinero y pagar las multas que fije el juez para liberar a los detenidos. ¿Otra vez habrá fuego amigo de perredistas pagando las fianzas de quienes causan destrozos al gobierno de la ciudad? Veremos…
