Por la dirigencia de la debacle

01 de Oct, 2018

El PAN de Nuevo León arrancó la contienda por la renovación de la dirigencia estatal. Mauro Guerra busca reelegirse en el cargo y ya tiene como contrincante a la exdiputada local Sandra Pámanes, quien el viernes presentó su carta de intención para participar en el proceso.

Ambos competirán por estar al frente de un partido que atraviesa una crisis interna debido a la carga que representó perder en la elección del 1 de julio a “La Joya de la Corona”, es decir, al municipio de San Pedro, entidad panista por 30 años.

La debacle albiazul en este municipio ha sido el punto de conflicto entre varias corrientes panistas, sobre todo por un grupo de disidentes que impera en San Pedro, y que ahora busca retomar la cabeza del PAN estatal

Las pugnas al interior también repercuten en la militancia panista, la cual siente que la institución se ha alejado de la ciudadanía y que su democracia es casi nula. Incluso, la imposición de candidatos en los comicios pasados elevó la inconformidad.

Algo que podría agravar aún más la molestia panista es que no se logre recuperar el acta de constancia en los municipios de Monterrey y Guadalupe para Felipe de Jesús Cantú y Pedro Garza Treviño, respectivamente.

Esto sería un duro golpe para el PAN nuevoleonés, que sólo podría gobernar dos municipios importantes: San Nicolás y Santa Catarina.

Acción Nacional tendría que conformarse con tener mayoría en el Congreso local, aunque sus diputados no ocupan las comisiones más importantes, otra situación que agrava la debacle.

Hasta el momento, Sandra Pámanes, exdiputada local panista, y Mauro Guerra, exlíder estatal que busca la reelección de la dirigencia del PAN por tres años más, son los contrincantes confirmados.

En entrevista exclusiva con Reporte Índigo, los dos aspirantes hablan sobre sus intenciones en el futuro del PAN en Nuevo León y reflexionan sobre la derrota en San Pedro.

Trabajar más

Para la exdiputada local, Sandra Pámanes, el PAN de Nuevo León primero tendrá que hacer un análisis de conciencia para detectar las cosas que se hicieron mal, tras la derrota de la excandidata panista a la Alcaldía de San Pedro, Rebeca Clouthier.

“Son 30 años de gobiernos que dieron excelentes resultados a la ciudadanía, en donde se cumplió con esa expectativa de una ciudad con una calidad de vida mejor para los ciudadanos, es un municipio emblemático no sólo para el PAN de Nuevo León, sino a nivel nacional”, explica sobre la trayectoria en San Pedro.

La panista, quien acudió el viernes pasado a la sede estatal del PAN para manifestar su intención de registrarse a la contienda por la dirigencia del partido, criticó que hoy en día no existe una verdadera democracia desde las entrañas del partido.

“Ese resultado nos debe llevar a una reflexión muy profunda sobre qué está pasando, y que no podemos seguir por ese camino. Entonces, es ahí donde tenemos que hacer un análisis de mucha conciencia y muy profundo de lo que está sucediendo, y recobrar valores y principios”, señala Pámanes.

Desde la perspectiva de la panista, la militancia está desanimada por las malas decisiones de la dirigencia, que afectaron la democracia de Acción Nacional

“Hay un desánimo en la militancia sobre cosas que se han venido tomado de manera equivocada, una forma de actuar en detrimento de la misma fuerza del partido hacia fuera, como instituto político que tampoco cuida el interés de la militancia en sus aspiraciones políticas. Está totalmente anulada la democracia interna, eso nos lleva a tener resultados tan lamentables como ahora”, detalla.

Sandra Pámanes asegura que la dirigencia del PAN tuvo que trabajar mucho más para obtener victorias contundentes en Monterrey y Guadalupe y no darle oportunidad al PRI de llevar la elección a los juzgados.

“Guadalupe y Monterrey se debieron haber ganado de una manera contundente y nos presentan este resultado, que igual son triunfos de Acción Nacional, pero por la deficiencia en el actuar de la dirigencia se ha debilitando ese acercamiento con la ciudadanía”, concluye.

Corregir errores

El exdirigente de Acción Nacional de Nuevo León, Mauro Guerra, asegura que si bien el partido tuvo un buen desempeño en la pasada elección, considera que hay que hacer un análisis para determinar los errores y corregirlos.

“Me duele lo que pasó en San Pedro, yo apoyé a Rebeca. Creo que hay una opinión de los ciudadanos con respecto a lo que el PAN venía haciendo en San Pedro, y esa es la parte que se tiene que evaluar. La única forma de sacar adelante a nuestro estado es con los candidatos, habrá que hacer una análisis para ver en qué nos equivocamos y corregir para que de aquí a 2021 no se dé”, comenta.

Hace dos semanas Mauro Guerra renunció como líder del PAN estatal para poder registrar su intención de participar en la renovación de la dirigencia.

Al ser cuestionado sobre la inconformidad de los militantes, menciona que hay que reconocer el trabajo que los albiazules hicieron en campaña. Guerra no habla de distanciamiento, sino de cercanía con los ciudadanos.

“Yo creo hay que mirar un poco el trabajo, si algo hicimos en estos tres años fue salir a la calle, recorrer los municipios y colonias en la zona metropolitana, nuestros diputados tocaron las puertas. Pero lo más importante es que los candidatos que se presentaron tuvieron el respaldo de los ciudadanos, y al final, esos resultados se ven, no podríamos haber ganado 12 distritos en todo el estado si no hubiéramos tenido ciudadanos, militantes y candidatos trabajando”, resalta.

Guerra considera que un logro de su gestión como dirigente fue consolidar los valores panistas y continuará con esa tarea en caso de ser el ganador

“Yo tengo muy claro que en esos tres años buscamos regresar a esos valores al PAN de cumplir a la gente, de buenos gobiernos, de cero corrupción y lo hicimos. Por eso tuvimos la confianza de la ciudadanía, de aquí al 2021 queremos hacerlo mejor”, concluye.