Barren la manipulación
Uno de los cambios relevantes que trajo consigo el nuevo Sistema de Justicia Penal en Jalisco, aunque poco conocido, es la adopción de nuevos candados que le impiden al Gobierno estatal “maquillar” los índices delictivos a través de las llamadas actas de hechos o expedientillos.
El antiguo sistema que operó hasta el 2016 le permitía a la Fiscalía General -y antes, a la Procuraduría- omitir la apertura de averiguaciones previas para centenas de miles de delitos que se asentaban únicamente en actas y expedientillos, lo que los hacía quedar fuera de la estadística delictiva pública.
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Uno de los cambios relevantes que trajo consigo el nuevo Sistema de Justicia Penal en Jalisco, aunque poco conocido, es la adopción de nuevos candados que le impiden al Gobierno estatal “maquillar” los índices delictivos a través de las llamadas actas de hechos o expedientillos.
El antiguo sistema que operó hasta el 2016 le permitía a la Fiscalía General -y antes, a la Procuraduría- omitir la apertura de averiguaciones previas para centenas de miles de delitos que se asentaban únicamente en actas y expedientillos, lo que los hacía quedar fuera de la estadística delictiva pública.
El uso de las actas y expedientillos para evitar el registro de nuevas averiguaciones, se había constituido en una gran zona de discrecionalidad para la dependencia, y sin mecanismos de rendición de cuentas ante la sociedad.
Pero esto se modificó radicalmente con el nuevo sistema para el que ya no existen las actas de hechos, ministeriales o circunstanciadas, ni los expedientillos, pues contempla únicamente dos opciones para la atención de una denuncia: la carpeta de investigación –que sustituye a la averiguación- o la carpeta no judicializable para hechos no delictivos.
Blanca Trujillo Cuevas, directora general de Atención a Delitos contra la Indemnidad Sexual y la Integridad de las Personas de Fiscalía, explicó la importancia de la migración de la dependencia al nuevo modelo.
“Ahora en el rango o las opciones de no judicializables, que serían las actas ministeriales de antaño, se reducen las posibilidades porque es solamente para aquellos hechos que de plano no revisten características de delitos o que tienen alguna connotación especial.
“Entonces estrictamente las no judicializables son solamente extravíos, o colaboraciones a otro Estado, o algún vehículo recuperado (…) el nuevo sistema esa es otra de las bondades que tiene precisamente en estos márgenes de ponderación: dejarlos más limitados y más fijos, para que ahora sí las cifras, los números, el tipo de delito queden más aterrizados y más establecidos”.
Se suponía que el antiguo sistema ofrecía estas alternativas a la averiguación, como las actas y expedientillos, para registrar en ellas solo casos de extravíos –no robos-, y hechos que no eran delictivos o cuyas denuncias no aportaban los datos mínimos para formalizar la indagatoria.
Sin embargo, en la práctica esas otras modalidades terminaron volviéndose los depósitos de grandes cantidades de delitos que, aunque eran denunciados por los jaliscienses, nunca llegaban a una averiguación, aun de alto impacto como robos a personas, a casas, a negocios y a vehículos.
Los números que ha publicado Reporte Indigo son elocuentes: el sexenio de Emilio González Márquez (2007-2012) abrió 477 mil 646 averiguaciones, y heredó en actas y expedientillos otras 736 mil 423 denuncias que nunca figuraron en sus índices delictivos, y de estos últimos, solo 412 mil 933 eran extravíos o hechos no delictivos.
El actual gobierno de Aristóteles Sandoval Díaz (2013-2016 julio) sumó 341 mil 530 averiguaciones y carpetas de investigación, pero dejó fuera de sus índices otras 453 mil 266 denuncias en actas y expedientillos, y de estas solo 234 mil 259 eran extravíos o hechos no delictivos.
Los candados
La funcionaria afirma que bajo las nuevas reglas del sistema acusatorio, al haber eliminado las actas y expedientillos, ahora cualquier hecho delictivo denunciado se registra forzosamente como carpeta de investigación, y por tanto, su inclusión en las estadísticas públicas delictivas está asegurada.
“Definitivamente desaparecen y solo nos circunscribimos a dos opciones: carpeta de investigación y carpeta no judicializable. Ahorita ya no maneja nadie ni actas, ni expedientillos, ni actas ministeriales, ni actas de hechos, ni ninguna otra figura que se le pueda parecer”.
Otro factor que aporta en ese mismo sentido es la nueva plataforma informática de la Fiscalía que, de forma automática, condiciona la inscripción de toda denuncia de un delito como carpeta de investigación, y no como carpeta no judicializable –que no se incluye en los índices delictivos-.
“Estamos trabajando con un sistema informático que incluso no le va a permitir al Ministerio Público levantar una carpeta no judicializable por un delito, es decir, el margen precisamente discrecional -como lo manejas- se reduce, pero aparte el sistema informático también te controla eso”.
Estos cambios deberán traer mayor certidumbre sobre la veracidad de los índices delictivos que ofrece el Gobierno estatal. Todavía en la primera mitad de esta gestión (2013 a 2016 julio) las diferencias entre los delitos reconocidos y los que quedaban soterrados en actas y expedientillos eran enormes.
Los únicos supuestos bajo los que el nuevo sistema de justicia permite la apertura de carpetas no judicializables son: extravíos de todo tipo, vehículos recuperados, muertes accidentales, diligencias solicitadas por otros Estados y suicidios, básicamente.
Prohibido ocultar delitos
La funcionaria de Fiscalía asegura que no tienen conocimiento de que las actas y expedientillos hayan sido utilizadas deliberadamente, durante este gobierno o el pasado, para manipular las estadísticas delictivas, sin embargo, sí advierte que el sistema anterior o tradicional lo hacía posible.
“Por eso precisamente nos dan estas reglas para abatir ese tema y dejar el margen de ponderación más limitado y más restringido.
“Tenemos la indicación concreta del fiscal general (Eduardo Almaguer Ramírez) de que todo aquello que sea delito se va a levantar carpeta de investigación (…) tenemos prohibido ‘maquillar’ cifras, ocultar delitos y simplemente los que se inicien es lo que está sucediendo en el Estado de Jalisco”.
Los ignorados
En la primera mitad de esta administración estatal (2013-2016) la diferencia entre los delitos reconocidos y los que quedaban enterrados en actas y expedientillos es significativa:
Robo a persona
>38,619 hechos en actas y expedientillos
>13,933 averiguaciones y carpetas de investigación
Robo a casa habitación
>9,404 en actas y expedientillos
>20,110 en carpetas de investigación
Robo a negocio
>17 mil 208 en actas y expedientillos
>11,861 en carpetas de investigación
Privación ilegal de la libertad
>387 en actas y expedientillos
>1,155 en carpetas de investigación
