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El partido de las ‘estrellas’

Cuando hace más de 50 años el cantante mexicano Tony Camargo grabó su exitosa cumbia “El Partido por la Mitad”, bien pudo parecer que se estaba echando un clavado al futuro; sin saberlo, con su rítmica letra, estaba dando la clave de sobrevivencia a los partidos políticos, que ya para entonces padecían del descrédito general.

30%
de los votos
que mantienen al PT dentro del sistema de financiamiento público han sido ganados por candidatos de la farándula

Cuando hace más de 50 años el cantante mexicano Tony Camargo grabó su exitosa cumbia “El Partido por la Mitad”, bien pudo parecer que se estaba echando un clavado al futuro; sin saberlo, con su rítmica letra, estaba dando la clave de sobrevivencia a los partidos políticos, que ya para entonces padecían del descrédito general.

El artista no se imaginó que la jocosa cumbia, en donde se proponía a Cantinflas para presidente, Agustín Lara para embajador o Pedro Vargas para secretario de gobernación, dejaría de ser una propuesta disparatada. Tal vez nunca pensó que esa sería la pauta a seguir en los tiempos modernos de la política mexicana.

Aun cuando ningún partido político se ha escapado de la posibilidad de postular como candidatos a “estrellas” del deporte y los espectáculos, sin duda es el Partido del Trabajo (PT) el que más se ha abrazado a la fórmula donde se mezcla el gobierno y la farándula, con la finalidad de sumar votos.

Desde que el PT nació, el 8 de diciembre de 1990, su principal signo de convencimiento electoral entre sus votantes, no han sido las políticas comunistas pro soviéticas que esgrime. Es el lanzamiento de candidatos mediáticos lo que le ha permitido sostenerse como fuerza política nacional. Ello le ha ayudado a salvar en tres ocasiones la posibilidad de perder el registro como partido.

Desde la postulación de la ex Miss México Judith Grace González Hincks como candidata a la alcaldía de Monterrey en 1997, hasta la asunción como actual senadora de la velocista Ana Gabriela Guevara, el PT no se ha alejado de su zona de confort.

La postura más reciente es la negociación que se mantiene con la cantante Dulce (Bertha Elisa Noeggerath) para que abandere las próximas elecciones en Tamaulipas, en donde aspira que sea su candidata al Gobierno estatal. Las negociaciones siguen en pie, aunque la cantante esgrime una inicial negativa por el alto índice de violencia en la entidad.

El reciente caso de la candidatura del ex Big Brother Patricio Zambrano, “El Pato”, a la alcaldía de Monterrey, en donde se ubicó en la tercera posición del cómputo general, le han dejado al PT una cosa en claro: que se encuentra en la ruta adecuada para la obtención de votos al margen de los resultados como partido político.

A los ojos de la dirigencia del PT, controlada por el profesor Alberto Anaya, los resultados brindados al partido por parte del Pato Zambrano, expareja sentimental de Irma Serrano “La Tigresa”, lo han colocado en la posición para ser lanzado como candidato a la presidencia de la república en las elecciones próximas. Por eso, la gira de promoción que se le ha diseñado a “El Pato” por todo el país.

El artífice de la estrategia electoral que le ha dado la sobrevivencia al PT no es Anaya; el cazador de estrellas para el Partido del Trabajo es el periodista Manuel González Arizpe, quien recorre el país en busca de los candidatos de peso mediático que ayuden a la aportación de votos.

En los últimos 10 años, González Arizpe le ha representado al partido la aportación de casi el 30 por ciento de los votos que lo mantienen dentro del sistema de financiamiento público y con presencia en las cámaras de diputados y senadores de la federación, así como en 26 congresos estatales.

Política y espectáculo

Entre las candidaturas más rentables políticamente que el PT ha podido tener, destaca la de Jesús González “Chis-Chas”. El cómico norteño, protagonista de una veintena de películas, fue lanzado como candidato a diputado federal por el distrito de China, Nuevo León. No ganó, pero mantuvo al PT en la contienda.

La cantante Viola Trigo en 1997 fue lanzada como candidata a la regencia de la ciudad de México. Su popularidad hizo que la votación para el PT en la capital se disparara del 4 al 8 por ciento de los votos totales.

El cantante Julián Garza, mejor conocido como “El Viejo Paulino”, también desfiló por las candidaturas del PT. Fue abanderado a la diputación federal por el distrito de China, Nuevo León. No ganó, pero superó el 11 por ciento de la votación total emitida.

El exdirector técnico de futbol de los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León, Tomás Boy, fue invitado a hacer campaña para buscar una posición en el senado de la República. Fracasó en el intento de ser legislador, pero elevó en un 4 por ciento la votación del PT.

Otro futbolista llevado a la cancha de la política fue Francisco Javier “El Abuelo” Cruz, quien fue lanzado como su candidato a la diputación federal por el distrito quinto de Nuevo León, esto en el año 2000. Llevó la votación a favor de su partido al 7 por ciento del cómputo general.

En ese mismo año, el PT postuló a Diana Perla Chapa Palacios, madre de la cantante Tatiana, en busca de la alcaldía de San Pedro. No ganó la elección pero la presencia de Tatiana en sus mítines elevó la votación, a grado tal que el PT pudo colocar una regidora por la vía plurinominal: Sonia González Quintana.

De la noticia a la política

Pero no solo artistas y deportistas ha buscado el PT. También ha puesto la mira en comunicadores, el ejemplo más claro es el de la periodista Diana Uribe Salazar, reportera del periódico El Porvenir. Ella fue postulada para que contender por la alcaldía del municipio de Juárez, los poco más de mil 400 votos que obtuvo no alcanzaron para reclamar el triunfo, pero en suma del PT fueron un apoyo considerable.

También la conductora Karla Marqueda fue llevada al escenario político. Fue sacada de la sección del pronóstico del tiempo de Televisa para lanzarla como candidata a la alcaldía de su natal Guadalupe, en donde la votación que la respaldó fue escasa, pero superó el padrón que el PT tiene en esa localidad de Nuevo León.

El periodista Benjamín Bojórquez, corresponsal de la Cadena Rasa, también fue postulado por el PT para una diputación local. No alcanzó el triunfo, pero la presencia de su partido se mantuvo vigente entre la masa votante.

A Santiago González, periodista de Multimedios Televisión, el PT lo convenció para que fuera el candidato a gobernador de Nuevo León, y lo incluyó también en la lista plurinominal de diputados locales. Los votos fueron suficientes para las necesidades de la dirigencia de su partido.

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Con la vuelta del registro, regresó también el financiamiento público.

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Lejos quedó aquel PT que apoyaba a capa y espada a Andrés Manuel López Obrador y presumía de ser una opción de izquierda.