El eslabón crimen-política
Las redes de quien fuera presuntamente el principal operador financiero del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Sergio Schmidt Sandoval, según la Comisión Nacional de Seguridad, crecieron por todo el estado y de forma particular en Puerto Vallarta, hoy bajo la mirada nacional.
Luis HerreraEduardo Almaguer Ramírez aseguró que este fungía como un ‘vínculo’ entre el crimen organizado con los sectores político y empresarial del estado
“(...) no existe ningún antecedente de hermanamiento, en proceso o concluido, y en el cual no participó la autoridad municipal de Guadalajara por no haber originado este proyecto cultural y no estar enterada del mismo”
Las redes de quien fuera presuntamente el principal operador financiero del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Sergio Schmidt Sandoval, según la Comisión Nacional de Seguridad, crecieron por todo el estado y de forma particular en Puerto Vallarta, hoy bajo la mirada nacional.
Tras la detención de Schmidt Sandoval el 18 de agosto por la Policía Federal, el fiscal general de Jalisco, Eduardo Almaguer Ramírez, aseguró que este fungía como un “vínculo” entre el crimen organizado con los sectores político y empresarial del estado, por lo que las ondas telúricas de su aprehensión aún están por verse.
Sin embargo, la prensa vallartense dejó registros públicos el 4 de septiembre de 2013 de la visita que hizo entonces Schmidt Sandoval a la propia Presidencia Municipal del puerto, cuando su gobierno estaba en manos del exalcalde Ramón Demetrio Guerrero Martínez, del Partido Movimiento Ciudadano (PMC), y actual diputado local.
Según lo reseñaron los periódicos locales del puerto, se trató de un encuentro entre el presunto cerebro financiero del CJNG, con el que fuera el secretario general municipal de Vallarta, José Antonio Pinto Rodríguez, en las oficinas de éste.
Hasta ahora ni el PMC Jalisco, ni el exalcalde Guerrero Martínez, ni el exsecretario general Pinto Rodríguez, han emitido algún pronunciamiento sobre los motivos de aquella reunión con Schmidt Sandoval, de lo que ahí abordaron o las razones de la misma.
Sin embargo, según las notas y videos publicados de la reunión, y fuentes de ese gobierno, ésta giró en torno al menos a una temática: el conflicto que se había suscitado en el puerto por la entrega de un recurso federal por 6.3 millones de pesos para fondear el espectáculo Fandango del Teatro Vallarta, al que estaría vinculado el hoy detenido.
Ese recurso se había etiquetado en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) con ese fin, pero se requería de la validación municipal para su entrega a los empresarios, pues el Gobierno federal lo había transferido a las cuentas bancarias del municipio.
No obstante, el sector crítico de los regidores de ese gobierno se oponía a validar la liberación del recurso a dicho proyecto privado, en lugar de a iniciativas o infraestructura de carácter público.
La historia
En efecto, en el 2013 el PEF incluyó un donativo en su anexo 35.4 “Proyectos de Cultura”, por 6.3 MDP etiquetado como “Fandango en Puerto Vallarta”, a entregarse por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta, hoy Secretaría de Cultura), según se lee en el Diario Oficial de la Federación.
Fandango es un espectáculo privado de danza que se presenta en el Teatro Vallarta de la localidad. Este donativo no se incluyó, empero, en el apartado de “Proyectos no Gubernamentales” de ese anexo del PEF, sino en el de “Proyectos Municipales”, como si la iniciativa perteneciera al gobierno de la localidad.
Fue debido a esta clasificación en el PEF que el recurso primero se canalizó a cuentas del municipio, y luego tuvo que transferirse a los particulares para su ejercicio.
En aquel 2013 los medios vallartenses dieron cuenta de que quien había promovido que se etiquetara ese donativo, había sido el entonces diputado federal Rafael González Reséndiz, del PRI, hermano de Salvador, alcalde del puerto de 2010 a 2012, y subsecretario de Administración del gobernador Aristóteles Sandoval Díaz hasta hace unos meses –hoy secretario de Organización del PRI-.
Donativos cuestionados
Este tipo de donativos culturales forman parte de las partidas del PEF que han sido recurrentemente cuestionadas, debido a que en su autorización intervienen directamente los diputados federales, por lo que se han dado acusaciones públicas de irregularidades durante su validación, tales como los famosos “moches”.
El donativo de Fandango en Vallarta no fue el único que levantó polémica en 2013 en Jalisco.
Por ejemplo, ese mismo año se incluyó en el apartado de “Proyectos no Gubernamentales” un donativo para la exposición de Daniel Buren en el Instituto Cultural Cabañas por 8 MDP; una vez instalada, especialistas en arte coincidieron en que esa producción no requería más que de unos cientos de miles de pesos, y Reporte Indigo documentó que en 2010 se había valuado en solo 213 mil 588 dólares.
También en 2013 se etiquetó otro donativo cultural para el “Festival de Ciudades Hermanas Guadalajara-Perm”, en Rusia, por 12 MDP. Este se incluyó en el apartado “Proyectos Municipales” sin que el gobierno de Guadalajara tuviera en absoluto conocimiento del mismo (como sucedió en Vallarta); ni siquiera estaba hermanada con Perm.
Ese año, el entonces presidente de la Comisión de Cultura tapatía, Salvador Caro Cabrera –hoy titular de la Policía de Guadalajara- aseguró:
“La asociación civil referida exige el dinero por los gastos del evento que ya se realizó en la ciudad rusa de Perm, con la que, debe señalarse puntualmente, no existe ningún antecedente de hermanamiento, en proceso o concluido, y en el cual no participó la autoridad municipal de Guadalajara por no haber originado este proyecto cultural y no estar enterada del mismo”.
Antecedentes
En el video publicado de aquel encuentro entre el ex secretario general de Vallarta y Schmidt Sandoval, se aprecia a los entonces regidores Susana Mendoza Carreño y Humberto Gómez Arévalo, reclamándole al hoy detenido por lo que habrían sido amenazas de su parte.
Esos ediles se habían mostrado críticos a la entrega del donativo del Conaculta. La nota sobre esa reunión que publicó el medio local NoticiasPV.com, el 4 de septiembre de 2013, le atribuye al detenido esta frase: “me la pelan, ya me etiquetaron los 6 millones de pesos”.
El ex regidor Gómez Arévalo desapareció el 15 de enero de 2015. El fiscal general de Jalisco, Almaguer Ramírez, declaró que investigaban a Schmidt Sandoval por una desaparición en Vallarta, y lavado de dinero:
“Este sujeto tenía cerca de 30 años realizando actividades ilícitas en el estado, nosotros también estábamos llevando una investigación que pondremos a disposición de la autoridad correspondiente.
Nosotros lo teníamos revisando por el delito de desaparición de personas y por diversos delitos con la Unidad de Investigación Criminal y Extinción de Dominio”.
“Este sujeto lo que hacía era ser un vínculo entre autoridades de diversos niveles, de grupos sociales, grupos empresariales, con la delincuencia organizada. Tenía vínculos con diversos sectores sociales, no solamente con el ámbito político o judicial”.
Por su parte, Renato Sales Heredia, titular de la Comisión Nacional de Seguridad, llamó al detenido el “principal operador financiero” del CJNG, y uno de los 122 objetivos prioritarios del Gobierno federal: “se prevé que su detención afectará significativamente la estructura operativa y financiera de esta organización delictiva”.
Y aunó: “En diciembre del 81 habría participado en Lagos de Moreno, Jalisco, en el mayor asalto bancario de esa década, por 93 MDP”, según la prensa local, en ese robo habría estado también Jesús González Márquez, hermano del ex gobernador de Jalisco, Emilio González Márquez.
También lo responsabilizó de las 2.5 millones de pastillas de pseudoefedrina y metanfetaminas que se aseguraron en mayo de 2009 en Tlajomulco de Zúñiga.
