El caos del Mariano Escobedo

El domingo por la noche fue largo para quienes volaban a la capital regia procedentes de otras ciudades del país, e hizo obvia la falta de personal de algunas líneas aéreas

El retraso de una hora y media en los vuelos se debió, según información extraoficial, porque no podían mover un avión de carga de una pista.

El contratiempo provocó molestias y hasta encono en los usuarios del aeropuerto.

Decenas de personas resultaron varadas en Guadalajara, San Luis Potosí y sobrevolando Saltillo, por la falla de la aeronave de carga y el cierre temporal del puerto aéreo.

No había empleados para atender a los usuarios de los tres vuelos en la terminal C

El domingo por la noche fue largo para quienes volaban a la capital regia procedentes de otras ciudades del país, e hizo obvia la falta de personal de algunas líneas aéreas

El retraso de una hora y media en los vuelos se debió, según información extraoficial, porque no podían mover un avión de carga de una pista.

El contratiempo provocó molestias y hasta encono en los usuarios del aeropuerto.

Decenas de personas resultaron varadas en Guadalajara, San Luis Potosí y sobrevolando Saltillo, por la falla de la aeronave de carga y el cierre temporal del puerto aéreo.

Pero además, una vez que los usuarios del transporte aéreo llegaban al Mariano Escobedo, el inconveniente se prologó hasta las primeras horas del lunes.

El caso de VivaAerobús en la Terminal C fue el más evidente, porque los pasajeros empezaron a describir la situación en redes sociales, además de que quienes acudieron a recibir a familiares y amigos hicieron largas filas afuera de esta estación.

Tres vuelos que llegaban de Ciudad Juárez, Chihuahua; Tampico, Tamaulipas, y Guadalajara, Jalisco, tuvieron que esperar por cerca de una hora y media, sus maletas.

No había empleados para atender a los usuarios de los tres vuelos en la terminal C.

Los pasajeros denunciaron, a través de redes y en llamadas a esta redacción, que llegaron de Ciudad Juárez aproximadamente a las 23:45 horas y a la 1:00 del lunes todavía no recibían sus maletas.

Llegaron también los vuelos de Tampico y de Guadalajara, pero los empleados de VivaAerobús no aparecieron por alguna parte de la terminal.

Incluso, varios de los pasajeros decidieron increpar a personal de seguridad de la terminal para que los dejara salir al área de pistas a exigir su equipaje.

Pero los empleados de seguridad no permitieron que los pasajeros salieran y les pidieron que hablaran con gente de la administración de la aerolínea, sin embargo el personal no apareció en la terminal.

El caos provocó que varias personas cerraran el paso a un empleado de OMA, a quien le dijeron que exigían les entregara sus maletas.

También le explicaron que no era en contra de él, sino de la aerolínea, que no tenía el personal para recibir a los pasajeros y entregarles su equipaje.

Por una hora y media, aproximadamente, la banda de equipaje estuvo corriendo vacía en la Terminal C, hasta que el personal de OMA ingresó al área de pistas y empezó a descargar las maletas.

Los vuelos que fueron desviados en las tres terminales fueron el 2118 que partió de la Ciudad de México y el 239 de Guadalajara, de Interjet.

Los 2031 de Guanajuato, el 2185 de Guadalajara y el 2205 de Culiacán, de la línea Aeroméxico.

El 124 de Magnicharter y los tres aquí mencionados de VivaAerobús procedentes de Ciudad Juárez, Tampico y Guadalajara.

Trascendió que el peso del avión de carga no podía ser arrastrado por las grúas que había en el aeropuerto y por ese motivo la asistencia para sacarlo de la pista fue muy lenta.

El último caos que vivieron los pasajeros las últimas horas del domingo fue que una vez que empezaron a aterrizar en el Mariano Escobedo con una mayor frecuencia por el retraso, a la hora de tomar los taxis también hubo contratiempo.