Van por plan de exhumaciones
Colectivos de familiares de personas desaparecidas buscan que se lance un plan nacional de exhumaciones e identificación para extraer los cuerpos enterrados en calidad de desconocidos, y así tener registro de sus datos para saber si se trata de alguno de los suyos.
Imelda García
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Debe establecerse un Plan Nacional de exhumaciones y no dejarlo a lo que medianamente pueda hacer cada estado”
Reclamamos nuestro derecho a participar en la elaboración de esta ley. Tenemos un aporte fundamental producto de la experiencia”
Colectivos de familiares de personas desaparecidas buscan que se lance un plan nacional de exhumaciones e identificación para extraer los cuerpos enterrados en calidad de desconocidos, y así tener registro de sus datos para saber si se trata de alguno de los suyos.
Buscan que se abran no solo las fosas comunes de todos los cementerios civiles del país, también quieren buscar en los panteones militares y en fosas clandestinas.
Quienes buscan a uno de los suyos quieren que este programa nacional incluya líneas de acción para poder identificar y registrar fosas comunes y clandestinas, que se resguarden los restos y se identifiquen cuerpos y fragmentos humanos.
Como parte de sus propuestas en la construcción de la Ley de Desapariciones, que está empantanada en el Senado de la República, activistas y familiares agrupados en el Movimiento por
Nuestros Desaparecidos en México (MovNDmx) proponen la creación de un Sistema Nacional de Búsqueda.
Dicho sistema implicaría registros y protocolos en los que actúen todos los sectores sociales para
intentar juntar las piezas de lo que parece ser un rompecabezas sin solución.
Los ausentes y su historia
En México se tienen registrados 28 mil 407 desapariciones al 31 de julio de este año, según cifras del Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas (RNPED).
Denunciados ante el fuero federal se tienen solo 979 casos; en el fuero común son 27 mil 428.
La mayor parte de las personas desaparecidas son jóvenes. Los registros gubernamentales muestran que el rango de edad de quienes han desaparecido oscila, en su mayoría, entre los 15 y los 34 años de edad.
Una tercera parte de las personas desaparecidas son mujeres, el 32.3 por ciento (6 mil 934); el resto, 67.7 por ciento, son varones (21 mil 473).
Detrás de cada uno de ellos no solo hay una historia de desaparición forzada o desaparición cometida por particulares.
Detrás de cada uno está una familia que los ha buscado, en algunos casos literalmente, hasta por debajo de las piedras. Y como afectados directos estas familias buscan ahora ser escuchadas por el Congreso de la Unión.
“Vivimos una enorme tragedia, una crisis humanitaria que no ha sido reconocida y asumida en su verdadera dimensión, por quien tiene la responsabilidad de esta situación, el Estado.
“Reclamamos nuestro derecho a participar en la elaboración de esta ley y la legislación correspondiente. Tenemos un aporte fundamental, producto de nuestra experiencia y del diálogo entre nosotros que nos ha permitido construir una visión común y propuestas conjuntas”, expone el MovNDmx en un pronunciamiento.
Urge esfuerzo nacional
Desde la sociedad civil, la propuesta es la conformación de un sistema en el que todos los entes del Estado se involucren para buscar a los desaparecidos.
El Movimiento por Nuestros Desaparecidos en México pretende que se conforme un Sistema Nacional de Búsqueda que cubra todo el país y se dé con base en la presunción de vida de la persona.
Desde el enfoque operativo, deberán crearse algunos registros nacionales.
El primero de ellos es un nuevo registro nacional de personas desaparecidas, con datos sobre los casos de quienes se encuentran ausentes.
También un registro nacional de personas vivas, con identidad desconocida, como quienes se encuentran en hospitales, albergues, estaciones migratorias o cárceles.
Y en especial un registro de personas fallecidas, sin identificar, que hayan sido sepultadas en fosas comunes de panteones civiles y militares, en fosas clandestinas o donado a universidades con fines científicos.
“Debe establecerse un Plan Nacional de exhumaciones y no dejarlo a lo que medianamente pueda hacer cada estado”, señala el Movimiento.
Además sugieren un registro actual de personas detenidas, con datos personales, como fotografías, huellas dactilares o datos de identidad.
Todo esto, señala el Movimiento, debe ir de la mano con la creación de una red eficiente para el cruce de información de todas las bases de datos de todas las dependencias federales y estatales, para que se facilite la búsqueda.
Y los registros deberán ser abiertos para las personas que realizan la búsqueda de sus familiares.
Los colectivos solicitan también que se conforme una Comisión Nacional de Búsqueda, integrada por familias y autoridades, y que juntos puedan diseñar y ejecutar planes nacionales, dando prioridad a la localización de personas en vida y sin importar hace cuánto tiempo desaparecieron.
Piden crear nueva figura de ausencia
Cuando una persona desaparece, no lo hacen su hipoteca, deudas o ninguna otra de sus obligaciones.
Al no ser declarada legalmente fallecida, los familiares deben afrontar los pendientes que una persona haya dejado. Si nadie lo hace, la víctima de desaparición puede perder todo lo que tenía.
“Las víctimas de desaparición se encuentran en total indefensión frente a la protección y administración de su patrimonio y del seguimiento a derechos y obligaciones”, destaca el Movimiento.
Solicitan la creación de la figura legal de “declaratoria de ausencia por desaparición”.
La legislación vigente contiene las figuras de declaratoria de ausencia y de presunción de muerte; ninguna relacionada con la desaparición.
Esta nueva figura establecería la presunción de vida del desaparecido, y daría pie para que se reincorporara a su vida normal en algún momento.
Los senadores han asegurado que la legislación estará lista antes del 15 de diciembre próximo, cuando termina el actual periodo de sesiones.