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Chimalistac, tentación para especuladores

Chimalistac es otra de las grandes tentaciones para los especuladores inmobiliarios. En este barrio vive el padre de Marcelo Ebrard, actual jefe del gobierno capitalino. 

Quizá por eso a duras penas se respeta el Plan Parcial de Desarrollo Urbano de esta colonia, que sirve de puente entre San Ángel y Coyoacán.

Sus vecinos, al igual que los de San Ángel, levantan la voz para denunciar, en este caso, la proliferación de establecimientos mercantiles que operan en franca violación a los usos de suelo.

Los vecinos denuncian la permisividad de la Seduvi, ya que en la avenida Insurgentes, que bordea la colonia, operan table dance, bares y cantinas

Chimalistac es otra de las grandes tentaciones para los especuladores inmobiliarios. En este barrio vive el padre de Marcelo Ebrard, actual jefe del gobierno capitalino. 

Quizá por eso a duras penas se respeta el Plan Parcial de Desarrollo Urbano de esta colonia, que sirve de puente entre San Ángel y Coyoacán.

Sus vecinos, al igual que los de San Ángel, levantan la voz para denunciar, en este caso, la proliferación de establecimientos mercantiles que operan en franca violación a los usos de suelo.

La avenida de los Insurgentes rodea esta tradicional colonia empedrada cuyos habitantes se suman a la ola de sectores que rechazan el Programa General de Desarrollo Urbano de la Ciudad de México, que propuso la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda.

Aquí la lucha cotidiana es en contra de los diversos grupos de interés que presionan a fin de que ya no se considere estas zonas patrimonio de México y se conviertan en centros urbanos en los que se permitan edificios, oficinas, comercios y hoteles.

Historia

Chimalistac forma parte del corredor San Ángel, San Ángel Inn y Tlacopac que cuentan con un decreto histórico que los declara zona típica y pintoresca.

Al igual que San Ángel, fue reconocido por el decreto presidencial de zona de monumentos históricos de 1987, por sus características urbanas y patrimoniales, y cuyo objeto es la conservación y preservación de esta zona.

También están regidos por un programa parcial (ZEDEC) que cuida su carácter primordial de zona habitacional.

Razón por la cual los vecinos denuncian la permisividad de las autoridades delegacionales y de la Seduvi, ya que en la avenida Insurgentes, que bordea la colonia, operan table dance, bares y cantinas como Solid Gold, La Envidia, El Calígula, El Garden, algunos de los cuales, incluso, se adentran en el barrio.

Juan Antonio Migliano Maure, uno de los más aguerridos vecinos en defensa de Chimalistac, rechaza el Plan General de Desarrollo Urbano de la Ciudad de México ya que pretende limitar o eliminar los derechos de los ciudadanos y dar prioridad a los proyectos inmobiliarios privados.

A través de expresiones o herramientas poco claras en la ley tales como los llamados “polígonos de actuación”, “transferencias de potencialildad”, “exención de estacionamiento”, “impulso de usos mixtos”, “vocación territorial inmobiliaria” o “áreas de gestión estratégica  se cuelan las irregularidades.

“Como consecuencia hay daños reales tales como un posible incremento de valor catastral y un demérito de la calidad de vida del usuario”, acusa el vecino.

Detalla que la Ciudad de México no merece que, a costa de intereses económicos mezquinos y de corto plazo, se pierdan los espacios con historia.

Al rechazo por la consulta pública del proyecto de Programa General de Desarrollo Urbano se sumó el Colegio de Arquitectos de la Ciudad de México y la Sociedad de Arquitectos Mexicanos.

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