Hasta 6 años de cárcel por camcording

En México es común la comercialización de películas y discos piratas. Según datos ofrecidos por la legisladora, 8 de cada 10 discos ópticos que se compran en México no tienen licencia para ser comercializados.

Una pena de dos a seis años de prisión podría aplicarse a quienes hagan camcording en las salas de cine del país.

El camcording es la práctica de grabar ilegalmente una película o producción cinematográfica en el cine o una sala de exhibición para luego venderla o reproducirla indebidamente.

La priista Marcela Guerra, senadora por Nuevo León, presentó una iniciativa para modificar el Código Penal Federal y establecer el camcording como delito.

“El camcording (…) se trata de una actividad ilícita que afecta de manera importante a la industria cinematográfica porque, a pesar de que en la actualidad existe una gran variedad de formatos para ver películas (como) discos ópticos, streaming, televisión de paga, descargas en internet, etc., la exhibición en salas es el canal más importante durante la etapa inicial de lanzamiento”, señala la senadora en su iniciativa.

El Código Penal Federal castiga la piratería en un sentido amplio, aplicando penas de prisión a quienes producen, reproducen o comercializan copias ilegales de alguna obra, con fines de lucro.

Lo que la senadora busca es que se castigue la raíz del problema, cuando una persona o un grupo de personas entra al cine y graba la película que se proyecta, para luego hacer másters y hacer miles de copias que se comercializan en el mercado informal.

“Es precisamente en este momento inicial cuando se puede causar el mayor daño con el camcording, pues si alguno de los asistentes a la sala graba la película y la distribuye de manera ilegal, esto genera un daño considerable a los creadores de la obra, que es muy significativo durante el periodo de estreno y que se replica a lo largo de toda la cadena de valor”, argumenta Guerra.

En México es común la comercialización de películas y discos piratas. Según datos ofrecidos por la legisladora, 8 de cada 10 discos ópticos que se compran en México no tienen licencia para ser comercializados.

La industria afirma que esto provoca pérdidas de alrededor de 340 millones de dólares. Entre el 2008 y el 2010 se grabaron ilegalmente 32 películas norteamericanas, señala.

Las autoridades pueden detener a una persona que es detectada haciendo camcording, pero pronto sale libre pues en ese momento no está obteniendo un lucro de la grabación.

“No se debe perder de vista que este tipo de delitos son difíciles de acreditar, toda vez que los delincuentes buscan dejar el menor indicio que pueda ser usado en su contra para comprobar su responsabilidad penal, además de la inclinación natural para evitar a toda costa cualquier tipo de sanción punitiva”, sostiene Guerra.

La iniciativa es presentada este miércoles y será estudiada en el Senado de la República.