Hace 50 años, en 1968, Echeverría llamó al diálogo pero con los “auténticos estudiantes”

La invitación al diálogo de Luis Echeverría fue aceptada por el Movimiento Estudiantil de 1968, pero con una condición: que los encuentros fueran públicos; activistas comienzan a planear la marcha del 27 de agosto, cuyo objetivo era ‘conquistar’ el Zócalo de CDMX hasta la solución del conflicto

El 22 de agosto de 1968, en medio de la tensión por entre el gobierno y los integrantes del Movimiento Estudiantil de 1968, Luis Echeverría, entonces Secretario de Gobernación de Gustavo Díaz Ordaz, anunció que las autoridades estaban dispuestas a dialogar, pero lanzó un nuevo ataque a los manifestantes.

Para quien se convertiría más tarde en Presidente de México, ele Gobierno estaba dispuesto “a examinar, en unión de los sectores interesados, por conducto de los funcionarios competentes, en sus respectivas esferas, los puntos de vista de los auténticos maestros y estudiantes”.

Echeverría señalaba que con “un diálogo franco y sereno” podría llegarse a la solución de lo que consideraba un “lamentable problema”.

El Consejo Nacional de Huelga (CNH) aceptó el ofrecimiento, e incluso que el Gobierno fijara la fecha y la hora, pero con la condición de que las pláticas fueran públicas.

Al siguiente día, el 23 de agosto, líderes estudiantiles y la Coalición de Maestros de Enseñanza Media y Superior Pro Libertades Democráticas, dieron a conocer que la Secretaría de Gobernación informó que el Poder Ejecutivo aceptó, vía telefónica, la realización del diálogo público, sin embargo, activistas consideraron que lo correcto es que la notificación fuera dada a conocer a los medios de comunicación oficialmente.

Tras reiteras que deseaban que representantes de la prensa, de la radio y de la televisión, estuvieran presentes en las charlas, los estudiantes advirtieron que el 27 de agosto pretendían realizar una manifestación que concluyera en el Zócalo, en donde contingentes pretendían realizar un mitin permanente hasta la solución del conflicto.

Para el 26 de agosto, el CNH ya había establecido nuevos contactos con la Segob, y designado a seis comisiones para plantear sus demandas al gobierno; se preveía que los encuentros comenzaran el día 28.

Los estudiantes alistaban la manifestación del 27 de agosto, y reiteraron su disposición a permanecer en el Zócalo hasta la solución de sus demandas; el Departamento del Distrito Federal anuncia que permitirá la propuesta aunque no se haya solicitado el permiso.

En ese periodo de tiempo, el 24 de agosto, también se concretó al liberación del ex policía Guillermo Domínguez, quien fue detenido el 22 de agosto en el Zócalo, cuando pedía la “moralización de la policía”.

Estudiantes participaron activamente en protestas para exigir la libertad de Domínguez.

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