Y a todo esto, ¿por qué la UNAM sigue pidiendo tesis a estudiantes y para qué sirven?

En el contexto del caso de plagio de tesis por parte de la ministra Yasmín Esquivel, la UNAM explica qué es una tesis
José Andrés Velázquez José Andrés Velázquez Publicado el
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Este viernes el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Enrique Graue Wiechers, lamentó el plagio de la tesis de la ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Yasmín Esquivel.

Asimismo, anunció que la universidad no está facultada para anular el título de la funcionaria pública.

¿Para qué sirven las tesis?

El escándalo en torno al plagio del trabajo de investigación avivó el debate respecto a la utilidad y vigencia de las tesis como método de titulación. En algunas universidades, la UNAM incluida, hay carreras en las que ya no es obligatorio presentar un trabajo de esta clase como forma de titulación.

Partamos por el inicio: ¿Qué es una tesis? Según información de la UNAM, “Es una proposición concreta de algún tema de interés del estudiante, generalmente relacionado con las materias de alguna disciplina de estudio de la carrera”.

Este trabajo se expone mediante un documento final, precisamente la tesis, ante un grupo de sinodales, quienes analizan tanto el documento como su presentación. Al final deciden si se le otorga o no el grado en cuestión.

¿Por qué sí hacer una tesis?

Continuamos con información de la UNAM. En una publicación se señalan algunos motivos que justifican la realización de una tesis. Destacan:

  • Justifica conocimientos a fondo sobre un tema específico, dentro de la gama de áreas, temas y materias que integran la currícula de una licenciatura.
  • Es la última oportunidad para experimentar y aprender a realizar ensayos o trabajos de investigación y redacción con carácter profesional.
  • Comprueba que el egresado posee criterio profesional, dentro de una rama en especial, materia o toda una carrera a nivel universitario.
  • Es la primera y quizá la única oportunidad que tiene el estudiante para elaborar un libro (su tesis).
  • Tal vez sea la última oportunidad de realizar libremente una investigación de interés particular escogida por el propio estudiante por gusto y no por obligación.

¿Por qué no se hacen o terminan las tesis?

Según la misma publicación, las y los estudiantes enfrentan dificultades al momento de elaborar su trabajo de investigación. Destacan:

  • Falta de interés por parte del estudiante.
  • Deficiencias en la dirección de la tesis.
  • Poco tiempo para dedicarlo a la investigación.
  • Incremento de las responsabilidades del nuevo profesionista.
  • Expectativas por descubrir y aprovechar las oportunidades de empleo.

En este contexto surge la pregunta, ¿es realmente útil mantener un sistema que propicia situaciones como el plagio?

Por ejemplo, como Carlos Gutierrez reflexionó en su columna para Milenio, “qué tal si en vez de producir conocimiento útil y original los estudiantes terminan haciendo una batea de babas con información basura, que nada más hará perder el tiempo al sínodo, a las universidades y a la propia sociedad”.

Por otro lado, hace un par de años otro columnista, Pedro Juan González, reflexionó para El Mundo: “¿Para qué seguir acumulando montañas de ejercicios mediocres o definitivamente inútiles que no aportan nada, haciendo clara la excepción de algunos cuantos que marcan la diferencia y que hacen que la excepción confirme la regla?”

Como solución, sugirió que sería mejor llegar a un acuerdo entre todas las universidades para que todas las tesis se concentren en la solución de problemas de la sociedad actual.

Por lo pronto queda pendiente ver qué es lo que resuelve la Secretaría de Educación Pública (SEP) con el caso de la ministra Yasmín Esquivel.

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