Verano peligroso

No sólo es el hecho de sudar durante todo el día o de sufrir por las altas temperaturas, la llegada del verano trae consigo una ola de enfermedades y riesgos que se deben de tomar en cuenta.

De acuerdo a la Organización Meteorológico Mundial (OMM), la primavera de este año fue la más cálida en los últimos 40 años.

Y según un estudio dado a conocer esta semana por Nature Climate Change, el 74 por ciento de la población mundial estará expuesta a olas de calor mortales en el 2100 si las emisiones de gases de efecto invernadero continúan en aumento.

20%
Aumentó la incidencia de cáncer de piel en jóvenes menores a 35 años a nivel global en la última década
Es importante beber pequeñas cantidades de líquidos (agua, suero oral o té)

No sólo es el hecho de sudar durante todo el día o de sufrir por las altas temperaturas, la llegada del verano trae consigo una ola de enfermedades y riesgos que se deben de tomar en cuenta.

De acuerdo a la Organización Meteorológico Mundial (OMM), la primavera de este año fue la más cálida en los últimos 40 años.

Y según un estudio dado a conocer esta semana por Nature Climate Change, el 74 por ciento de la población mundial estará expuesta a olas de calor mortales en el 2100 si las emisiones de gases de efecto invernadero continúan en aumento.

Esta investigación de la Universidad de Hawai también determinó que aunque se redujeran drásticamente las emisiones de dichos gases, los cambios bruscos de temperatura afectarían al 48 por ciento de la población global.

Pero no se tiene que avanzar en el tiempo y la catástrofe para tomar medidas preventivas. Ya que las altas temperaturas causan estragos en el presente. Por ejemplo, en el verano se dispara la violencia en las ciudades, esto debido a que las altas temperaturas provocan cambios a nivel fisiológico y aumentan el ritmo cardíaco y la sudoración excesiva.

A consecuencia de ello, las personas se sienten con menos energía y se agitan, por lo que están más irritables y de mal humor, según indicó el psicólogo experto en violencia y agresividad humana, Brad Bushman a National Geographic.

En las calles, las personas conducen y transitan agitadas. Leonardo De Pierro, subgerente de Seguridad Vial del Centro de Experimentación y Seguridad Vial de Argentina, declaró a El Clarín que “el calor dentro del auto influye en las capacidades y en el comportamiento del conductor: induce a la fatiga y actúa como un factor potenciador de cualquier alteración que pueda tener el conductor”.

“También disminuye la atención, la asimilación de información y la agudeza visual, e incrementa el tiempo de reacción y la agresividad (…). El calor, a su vez, produce pérdida del confort y anticipa los síntomas del cansancio, como la somnolencia e irritación, los calambres en las piernas y el dolor de cintura, entre otros”, agregó De Pierro.

Otra investigación, llevada a cabo por la compañía alemana Hella, reveló que cuando se conduce un auto cuya temperatura interior supera los 27 grados centígrados, el riesgo de accidentes se incrementa hasta en un 11 por ciento. Si la temperatura rebasa los 32 grados centígrados (dentro del coche), el riesgo aumenta un 22 por ciento.

La Secretaría de Salud recomienda tomar medidas preventivas durante la temporada de calor, la cual será aún más intensa durante la canícula (período más caluroso del año y que comprende del 24 de julio al 2 de septiembre).

Entre esas medidas están vestir ropa de algodón, protegerse del sol con sombreros o cachuchas y para los que trabajan en exteriores se recomiendan descansos de 15 o 20 minutos en la sombra. A su vez, se aconseja aumentar el consumo de líquidos y beber al menos dos litros de agua al día.

Consecuencias del calor

>> Golpes de calor

>> Deshidratación

>> Insolación

>> Enfermedades gastrointestinales

>> Insomnio

>> Irritabilidad

>> Cansancio

>> Fatiga

>> Mal humor

>> Debilidad, quemaduras solares, dolor de cabeza y náuseas

>> Déficit salino

>> Erupciones

>> Sudoración excesiva

>> Fiebre

>> Aumento del flujo sanguíneo

Cuida la piel

Durante el verano no sólo es necesario hidratarse para evitar sufrir una deshidratación o un golpe de calor, también es importante cuidar y proteger la piel de los rayos del sol, para evitar el riesgo de padecer melanoma (cáncer de piel).

La exposición al sol aumenta significativamente el riesgo de desarrollar melanoma, el tipo de cáncer de piel más grave y cuya incidencia continúa en aumento, a nivel mundial.

De acuerdo a una investigación llevada a cabo por del Departamento de Dermatología de la Escuela Médica Warren Alpert de la Universidad de Brown, las mujeres que sufrieron al menos cinco quemaduras solares con ampollas entre los 15 y los 20 años de edad tenían un 80 por ciento mayor riesgo de desarrollar melanoma.

La quemadura de sol con ampollas durante la infancia incrementa más del doble el riesgo de desarrollar melanoma en la edad adulta, de acuerdo a datos de la Skin Cancer Foundation.

En México, el cáncer de piel ocupa el primer lugar de incidencia en hombres y el tercero en mujeres.

Y según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer de piel es el más frecuente en los seres humanos. Cada año se diagnostican 2 millones nuevos casos en todo el mundo.

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