Síndrome de Cushing en bebés; el enemigo silencioso de cremas para las rozaduras

27 de Mar, 2021

El uso frecuente de cremas para las rozaduras con altos niveles de cortisol, generan en los bebés Síndrome de Cushing, el cual modifica estructuras del cuerpo.

Exponer de manera constante al neonato provoca en él este síndrome que en ocasiones se le llama hipercortisolismo, aunque a veces también se produce cuando el cuerpo genera demasiado cortisol por sí solo.

El exceso de cortisol produce algunos efectos visibles como joroba de grasa entre los hombros, la cara redondeada y estrías gravídicas de color rosa o púrpura en la piel.

Sin embargo, no son las únicas consecuencias pues este padecimiento puede derivar en presión arterial alta, pérdida ósea y, a veces, diabetes tipo 2.

¿Cómo se manifiesta y qué puedo hacer ante el Síndrome de Cushing?

Los signos y síntomas del Síndrome de Cushing varían según el nivel de cortisol que presente el paciente.

Además de aumentos de peso súbitos, el paciente con esta enfermedad puede mostrar depósitos de tejido adiposo, especialmente  alrededor de la sección media del cuerpo y la parte superior de la espalda, aunque también se ven en la cara y entre los hombros.

Otros de los síntomas o manifestaciones son: estrías color rosa o púrpura en la piel del abdomen, muslos, mamas y brazos; piel fina y frágil, propensa a hematomas, cicatrización lenta y acné.

En las mujeres con este padecimiento puede observarse vello facial y corporal más grueso y periodos mensuales irregulares o inexistentes.

Por su parte, los hombres con la enfermedad pueden presentar: disminución de la libido, de la fertilidad y disfunción eréctil.

Los pacientes en general demuestran fatiga intensa, debilidad muscular, pérdida del control emocional, dificultades cognitivas, presión arterial alta, dolor cabeza, aumento de la pigmentación, pérdida ósea; que a la larga produce fracturas, y en niños, retraso en el crecimiento.

Los niveles excesivo de la hormona cortisol son los los causantes del síndrome de Cushing, este se produce en las glándulas suprarrenales y cumple diversas funciones en el cuerpo.

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Además de regular la presión, el cortisol reduce la inflamación y mantiene el corazón y los vasos sanguíneos funcionando normalmente, ayuda al organismo a responder ante el estrés

También regula la metabolización de proteínas, los carbohidratos y las grasas obtenidas en la dieta.

Esta enfermedad se desarrolla a partir de una causa ajena al cuerpo, por ejemplo, la ingesta de medicamentos con corticoesteroides en dosis altas durante un tiempo prolongado.

Aunque es más común que aparezca por la ingesta de medicamentos orales,   necesarios para tratar enfermedades inflamatorias, como la artritis reumatoide, el lupus y el asma, el síndrome también ataca a niños cuyas rozaduras fueron tratadas con cremas que se comercializan para esto.

También es posible desarrollar este padecimiento a partir de corticoesteroides inyectables, por ejemplo, inyecciones repetidas para el dolor articular, la bursitis y el dolor de espalda.

Las razones naturales por las que se presenta esta enfermedad abarcan desde un tumor en la glándula pituitaria, un tumor que secreta la hormona adrenocorticotrófica, padecimiento primario de las gandulas suprarrenales. También tiene que ver la herencia familiar.

Algunos de los medicamentos para controlar la producción excesiva de cortisol en la glándula suprarrenal son el ketoconazol, el mitotano (Lisodren) y la metirapona (Metopirona).

El medicamento más nuevo contra el síndrome de Cushing es la pasireotida (Signifor), que actúa disminuyendo la producción de corticotropina en un tumor hipofisario.

Estos medicamento causan efectos secundarios tales como: vómitos, dolores de cabeza, dolores musculares, presión arterial alta, potasio bajo e hinchazón. También diarrea, náuseas, hiperglucemia o diabetes, dolor de cabeza, dolor abdominal y fatiga.

Si ninguna de estas opciones de tratamiento es adecuada o eficaz, médicos recomiendan la extirpación quirúrgica de las glándulas suprarrenales