Rosalía, de pie ante las críticas

La cantante española ha generado controversia desde que inició su carrera musical. Tras haber mezclado el flamenco con ritmos como el trap, la sociedad gitana la acusó de usurpar una cultura que no es la suya; sin embargo, no ha sido la única artista señalada

En España, específicamente en su campo musical, cuando se piensa en uno de sus ritmos principales aparece el flamenco, género del que los gitanos se dicen autores y ruegan que se respete tal y como ellos lo han hecho a lo largo de los años. Actualmente, critican a la cantante Rosalía por modificarlo, principalmente, porque no es ni gitana ni nacida en Andalucía.

“Hay gente que quiere que la música no cambie, que no se mezcle con otros sonidos, que sea como la han conocido en la tradición más pura a lo largo del tiempo. Pero en el caso del flamenco, éste ya se ha internacionalizado, un montón de músicos lo han llevado a otros ámbitos de mezcla”, explica Enrique Blanc, periodista musical, a Reporte Índigo.

Cuando Rosalía escuchó el flamenco por primera vez fue a los 13 años, oyó a Camarón de la Isla (San Fernando, España, 1950), un cantante que, a pesar de no ser gitano, tocó y buscó renovar este género.

Como la cantante de 26 años, Camarón de la Isla fue altamente criticando en su tiempo. En 1979, sacó a la venta el álbum La leyenda del tiempo, en el que mezcló rock, pop, folk, ritmos tropicales y, por supuesto, el flamenco. De acuerdo con Blanc, hoy día no se puede entender el flamenco contemporáneo si no se alude a Camarón.

Para Rosalía, la apropiación cultural en el campo musical no existe. Menciona que ella nació en un mundo globalizado en el que ya no hay géneros musicales. Cuando se sienta a componer y mezcla flamenco con electrónica, por ejemplo, ni siquiera es consciente de estar fusionando dos mundos distintos.

“No paro de escuchar a gente discutir sobre si lo que hago es o no flamenco, ¡Qué más da! Hago música coherente con el momento que estoy viviendo. Dentro de unos años, miraremos hacia atrás y nos daremos cuenta que este fue un momento de cambio”
RosalíaCantante

El periodista Edgar Corona, especialista en música, asegura en entrevista que la simbología que Rosalía ha utilizado ha molestado a toda una comunidad que está dolida, que tiene todo un antecedente histórico de mucha discriminación y segregación.

En el flamenco, generalmente, se habla de minas, de barcos y de prisiones, palabras que se originan de un suceso trágico, cuando vivieron un intento de exterminio en España, en 1749. Se intentó sobrellevar toda es impotencia, pena y miedo, a través de la música.

El primer álbum de Rosalía, Los Ángeles (2017), se enfoca más en el género que inspiró a la cantante desde niña. Incluso, estudió el ritmo y acepta que lo respeta, conoce sus orígenes (provine de una mezcla de etnias, una fusión de sonido gitano, negro, hebreo, árabe y español). Sin embargo, sostiene que esta música no es propiedad de los gitanos, ni de nadie.

Blanc comenta que en la primera producción de la cantante, aunque el guitarrista Raúl Fernández no asumió el flamenco desde la idea de un artista virtuoso, como Paco de Lucía (Algeciras, España, 1947), llevó este género desde una postura mucho más convencional, y aún así hizo que el disco tuviera más esencia de flamenco que El mal querer (2018), la segunda producción de Rosalía.

Sobre este material, Blanc dice que los ortodoxos del flamenco se molestaron, porque es un disco en el cual el género en discusión se aproxima al trap, ritmo que hace referencia a los lugares donde se vende droga ilegalmente.

En “Malamente”, canción de El mal querer, que a la fecha tiene 67 millones 555 mil 18 reproducciones en YouTube, menciona la palabra “Undebel”, que significa “Dios” para los gitanos, uno de sus valores morales más importantes. El que Rosalía mencione esta palabra, no siendo gitana, es una supuesta agresión para esta cultura social

No es la única

La cantante nacida en San Esteban, España, no ha sido la primera cantautora que ha sido señalada por usurpación cultural en el campo de la música. Miguel Poveda (Barcelona, 1973) también las recibió. “La apropiación cultural es la cosa más ridícula que he escuchado nunca”, declaró en su tiempo el artista.

Ahora que le tocó el turno a Rosalía, Poveda dijo a medios locales que ella es una cantante que ha incluido el ingrediente del flamenco a su propuesta, algo que a su parecer es atractivo. “España se tiene que sentir orgulloso de los artistas que ofrecen algo nuevo”, sentenció.

También está el caso de Enrique Morente (Albaicín, España, 1942), con el álbum Omega (1996). El cantante de flamenco colaboró con la banda de rock Lagartija Nick, logrando hacer una mezcla entre sus géneros característicos, más poesía, homenajeando al poeta Federico García Lorca.

Por su parte, Niño de Elche (Elche, España, 1985) experimentó con el rap y el flamenco. En su último álbum, Antología del cante flamenco heterodoxo (2018) admitió que “siempre que quieres traducir una tradición, inevitablemente, la traicionas”.

Enrique Blanc argumenta que el tiempo les ha dado la razón a los artistas que han recibido críticas por intentar algo nuevo, específicamente en el flamenco, un género que aún estará en cuestionamiento por sus presuntos autores y quienes quieren tocarlo

De acuerdo con Edgar Corona, el fenómeno de Rosalía está en un momento de cúspide. Blanc coincide en que es una artista que puede demostrarle a quien sea, que tiene una voz y un talento en el escenario indiscutibles.

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