El rey del punk en español no ha muerto y se llama Evaristo

Si en el rock Elvis Presley obtuvo la consagración y alcanzó el mote alusivo a la corona dorada, en el punk en español el vocalista de La Polla Records y Gatillazo es el referente obligado, aunque seguramente a él poco le importa que lo cataloguen como un monarca de la música

El punk, ese género musical que resiste todo el tiempo, innatamente contestario, poco coordinado en sus melodías y pocas veces afinado, tiene en Evaristo Páramos Pérez a uno de sus hijos más avezados.

La mayoría de los seguidores de La Polla Records, el grupo que vio la luz en 1979 y del cual Evaristo era vocalista, difieren férreamente con la idea de que sea uno de los hijos pródigos del punk… “¡Es el padre!”, exclaman, el padre de por lo menos la escena musical punk en español, aclaran.

Lo cierto es que el mismo cantante ha negado ser uno de los padres del punk. Al referirse a su profesión, las letras que ha escrito y la música que interpreta, el casi sexagenario afirma que él no inventó nada, que todo lo que ha dicho está referenciado a cosas que ya se hicieron: “todo lo que he dicho es por influencias anteriores, no hay ningún invento mío”, dijo recientemente en una de las pocas entrevistas que ha brindado a la página jotdown.es.

Evaristo, fan a ultranza del grupo R.I.P., una de las primeras bandas de punk que existieron en la península ibérica, comenzó su periplo dentro de la música en 1979, dos años después de que en Inglaterra explotara esa bomba que se llamó punk music y que fue encabezada por jóvenes que no sabían tocar ningún instrumento y que aún así se subían al escenario a cantar, dedicándole melodías discordantes a la ya desde entonces Reina Isabel II y a criticar todo lo que se les pusiera enfrente: religión, padres, policía, estudios, familia, monarquía, costumbres: el establishment.

Nacido en Guillarei, Pontevedra, pero criado en Salvatierra, comunidad que pertenece al País Vasco, Evaristo vio en el movimiento punk, que en Inglaterra estaba comandado por los Sex Pistols (1975) y en Estados Unidos por Los Ramones (1974), la oportunidad de expresar algo, de subirse a un carro en donde los improperios eran bien vistos y en donde el lenguaje político radical era permitido; así que junto con Fernandito (baterista), Maleguin (bajo), Txarly (guitarra) y Sume (guitarra) conformó La Polla Records que en su nombre lleva impregnado el léxico con el que los punks suelen entonar sus canciones.

Las letras de la banda reflejan el pensamiento de los entonces jóvenes músicos (Evaristo nació en 1960) que estaban en contra del fascismo, autoritarismo, nacionalismo y por supuesto catolicismo. Los nombres de las canciones son provocadoras y “Ellos dicen mierda, nosotros amén”, “Los jubilados”, “Toda la puta vida igual”, han pasado a formar parte del soundtrack de los melómanos que buscan en la otredad lo que el sistema no puede brindarles.

Más allá de las letras de las canciones, Evaristo siempre ha sido un activista de izquierda; ha votado, lo que lo delega del anarquismo. En una entrevista que dio a la revista Rolling Stone en 2005 confesó que en las elecciones vascas de ese año votó “por unas chicas muy valientes, las del Partido Comunista de las Tierras Vascas porque la otra alternativa era poner en la papeleta euskera no teníamos conversación”.

El éxito mundial parece no haber trastocado los ideales del vocalista quien hasta el 2015 opinaba que España seguía hundida en el franquismo, que el régimen no había cambiado en nada y que la supuesta transición encabezada por el entonces presidente Mariano Rajoy Brey era una farsa.

“¿Transición a qué?, ¿qué han hecho?, ¿acabar con un régimen? No, le han cambiado la cara. Yo no sé cuántos años llevamos ya de franquismo. A ver, tú dime quién controla los modos y maneras, y cómo está la peña”, espetaba en una entrevista hecha por el periodista español Juan Vilá.

A sus casi 60 años, Evaristo dice que ha dejado las drogas que lo acompañaron a lo largo de su vida. La heroína, ha confesado, más que por gusto la dejó porque le diagnosticaron hepatitis B… “Me ponía amarillo y estaba todo el día cansado, me pille la hepatitis B en la mili, en Burgos. Iba al médico del cuartel y le decía que estaba cansado y me enviaba a picar agujeros con un pico y pala”, confesó en una entrevista a la revista Rolling Stone.

Consciente de que ganó dinero “criticando a la sociedad”, y fiel a sus principios punks, en 2005 el compositor informó que los organizadores del festival Viña-Rock le habían ofrecido un cheque en blanco por volver a juntar a La Polla para dar un concierto, a lo que contestó que “de ni coña pues La Polla se acabó”.

Tras la disolución de la Polla Records en 2003 el rey del punk, el hijo pródigo del género musical, aún continúa en la música gritando y componiendo con Gatillazo, con quienes ha grabado los discos Gatillazo (2005), dianas legales (2007) Sex Pastels (2008), Sangre y Mierda (2011), Siglo XXI (2013) y Cómo convertirse en nada (2016).

A Evaristo lo acompañan en este viaje musical Txiki y Angelito en las guitarras; Mikel en el bajo, y Tripi en la batería.

Además de dedicarse a la música, Evaristo, quien es admirador confeso de Paul Auster, es escritor. En una especie de experimento new age o quizá espiritual tiene en su haber dos libros: “Por los hijos lo que sea” (2001) y “Cuatro estaciones hacia la locura” (2014, 2016), este último relacionado profundamente al tema de la muerte y el amor en el que una frase devela parte de su contenido: “me limpio el culo con parte de mi pasado”.

El miedo a la muerte se hace presente en “Cuatro estaciones hacia la locura”; el mismo Evaristo lo ha reconocido al decir que pensar en este aspecto metafísico lo hace pegar un susto de la hostia… “De repente me di cuenta de que yo no era el valiente que se caga en la muerte. Qué susto, macho. Me vi mal preparado. Es el desconocimiento de lo que hay después”, confesó al sitio jotdown.es.

Algunos datos más…

¿Por qué le quitaron el Records a La Polla?

En 1994 un Tribunal le ordenó a la banda vasca dejar de usar su nombre después de que uno de sus ex técnicos de sonido los demandara por el uso de este.

Ignorando la ordenanza, Evaristo y sus colegas sacaron el álbum Bajo Presión (1994) pero en 1996, ante la presión jurídica, decidieron usar sólo el nombre de La Polla.

De esta época es emblemático el álbum en vivo “La Polla en tu recto”, el cual fue lanzado en 1998.

Las visitas de Evaristo a México con La Polla y Gatillazo

Los punks de abolengo en México aún recuerdan la minigira que realizó La Polla Records en 1990 en nuestro país.

En el último decenio del siglo XX La Polla se presentó en varios foros los cuales ‘reventaron’: el cuasi mítico Teatro Blanquita; La Última Carcajada de la Cumbancha (LUCC), en donde tocaron junto a los mexicanos Masacre 68 y Sedición y en el ex Balneario Olímpico de Pantitlán, ubicado en los límites de Neza con el entonces Distrito Federal, entre otros lugares. 

Con Gatillazo, Evaristo visitó Monterrey y Guadalajara en el 2011; en esta última ciudad hubo disturbios y cerca de 40 personas terminaron detenidas por la policía del estado de Jalisco cuando finalizó el concierto.

Los grupos con los que ha colaborado Evaristo

El rey del punk en español ha colaborado con grupos importantes a nivel internacional entre los que destacan Boikot, El Último ke Zierre, Kaos Etiliko, Kaotiko, Negu Gorriak, Non Servium, Banda Bassotti, Disidencia, Zirrosis, entre muchos más.

Su penúltimo roce con la ley

El viernes 28 de mayo de este año al finalizar un concierto de Gatillazo en el Festival Trompetera de Jerez de la Frontera, en Cádiz, Evaristo fue abordado por elementos de la Guardia Civil después de que le gritara a un grupo de uniformados: “policías, sois unos hijos de puta”.

El asunto no pasó de una llamada de atención acompañada de una multa por “faltas de respeto y consideración” a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. En España este tipo de “delitos” son considerados no graves y se solucionan con un monto económico que va de los 100 a los 600 euros.

Lo anterior provocó que usuarios de redes sociales protestaran, nuevamente, contra lo que en el país ibérico se conoce como la “ley mordaza”, misma que les ha costado la libertad a algunos críticos del sistema, no importando si se dedican a la música, como el vocalista de la banda Def con Dos a quien un tribunal condenó a un año de prisión por algunos tuits en los que supuestamente enalteció al terrorismo.

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